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Ambos, perdidos y confundidos, rápidamente se incorporaron y corrieron hasta la entrada.

Jimin tocó el cuello de Gia, su pulso era débil.

—Se ha desmayado. —Le aseguró el rubio, algo lento. Sus labios estaban rojizos, su cabello más despeinado y su respiración entrecortada por el previo intercambio de besos con el menor—. Vamos a dejarla en tu cama.

El hechicero asintió y cargó a la castaña y la dejó envuelta a mantas que le diesen calor.

— ¿Qué crees que pasó? —Preguntó Jimin con preocupación al chico conejo que consternado detuvo su respuesta y agarró la mano de la chica.

—Está helada... Pero, encontré algo. Oh demonios, ¡Jimin!, lee esto. —Le apuró, pasándole una nota.

—No puede ser... —Susurró angustiado. Con temor abrazó el pequeño cuerpo de Yoongi.

Quería pensar con claridad pero no lo haría, hasta que su mejor amiga despertarse y le explicara de tal nota.

"Me has subestimado, pequeña zorra, intenta ahora salvar a tus amiguitos. Jimin no tiene protección y su querido mundano mucho menos, ¿te creías capaz de mantenerlo oculto a sus y mis espaldas? Qué estúpida, siendo impulsiva como siempre, sin siquiera usar la cabeza. Creyendo que me tragaría tales cuentos tuyos. Siempre queriendo hacer todo sola intentando ser la heroína de la historia, pero cariño, eres más débil que una hormiga y si quieres provocarme, adelante, veremos quién es más fuerte. Todo se ha puesto en marcha, quieras o no, no podrás evitarlo. Pagarás tus errores sufriendo la agonía de tu amada y asquerosa pareja de bobos. Empecemos hoy, ¿crees que podrás verlos una última vez? Tú decide. Veamos quién llega primero que lo que acordamos sigue en pie y como no colabores muñeca, alguien tan preciosa como tú, lo lamentará en su lecho de muerte."

—Oye Jimin... —El chico conejo apoyó una mano en la mejilla del menor, este le dio su atención presionando sus dedos.

— ¿Qué ocurre Hyung?

— ¿No te sientes extraño...? —Susurró.

—No, ¿estás segu...? —"¿Crees que podrás verlos una última vez?", "alguien como tú, lo lamentará en su lecho de muerte"... miró el papel y lo tiró a un lado—. Diablos, no. —El pelirrojo cogió al chico conejo en sus brazos cuando este de pronto parecía querer desplomarse allí mismo—. Intenta no inhalar aire Hyung, reten un poco la respiración. —El menor intentó proteger al rubio, ocultándolo con su campera—. No te duermas, por favor, Yoongi.

—Jimin... —Susurró.

—No, no te dejes llevar. —Le rogó mientras desesperado le sobaba la espalda.

—No puedo... —Los párpados del mundano se cerraron y Jimin zarandeó el pequeño cuerpo inútilmente.

Se volteó, intentando sentir alguna extraña energía. Cuando creyó sentir algo raro en su entorno, se le erizó la piel al sentir una respiración ajena en su oído y una voz desconocida susurrarle:

—Los tenemos. No podrán escapar ahora.

Antes de poder reaccionar, Jimin soltó un leve quejido y con una mano temblorosa quiso tocarse el cuello pero no llegó a hacerlo. Sintió sus ojos cerrarse, cuando la fina y afilada aguja que le habían clavado le era quitada de la vena, a la vez que se sumía en un negro y eterno vacío.

"¿Qué está ocurriendo?"

"¿Dónde estás Hyung?"

~

Gia, Gia, Gia... mi preciosa y bella chica... ¿Creíste que tu poder me intimidaría? Eres una ingenua. Dominik se apoyó en la puerta de su habitación. La castaña abrió los ojos y presionó la tela en sus manos.

Potion ×Yoonmin×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora