49. Dios es mujer

2.4K 181 34
                                    

Jazmine nunca pensó en sobrevivir a aquella pócima, no cuando después de que saliera de la cueva empezara a sangrar y así perdiendo al feto del producto de una violación.

No le dolió, pero si que le dolió saber que su nombre ahora el más buscado entre toda la comunidad mágica y que su principal cazador era Regulus Black.

Todo fue un total caos cuando apenas consciente llegó a la casa de su abuelo, donde aquel hombre yacía inerte en el suelo y con el corazón roto apenas pudo decirle adiós porque los mortifagos aún seguían cazándola y aquella casa ya no era segura.

Intentó contactarse con las Ward pero sabía el peligro que eso conllevaba por lo que su última opción fue ir hasta su casa, que ahora parecía un maldito desastre.

Pero Kreacher no la dejó caer en ningún momentos y a como pudo, llamó la atención de los Potter.

Todo sucedió tan rápido, que cuando despertó dos semanas después no supo dónde estaba pues la casa parecía totalmente cambiada.

Ya no era esa casa con la misma energía "vieja" que tenía, ahora estaba completamente renovada, como si fuera una casa de algún suburbio de las afueras de Londres, pero le gustaba.

Porque su habitación estaba más bonita.

—Cariño —Euphemia Potter apareció en la puerta de su habitación—, estas bien.

—¿Qué pasó? ¿Por qué no te acercas? —la alentó y tiró de las sábanas para que ella pudiera acurrucarse con su madre, pero frunció el ceño cuando ella negó.

—Tengo viruela de dragón querida, apenas vas recuperandote así que no quiero contagiarte de esto, pero quería verte por si mañana no despierto —se burlo la señora de cabellos blancos.

Jazmine quiso abrazarla por última vez y lo hizo cuando un día extrañamente apareció sonriente en la cocina.

Primero perdió a su padre, luego su mamá de la tristeza también partió al mundo de los no vivos. Pensó que el dolor físico podía curarse, pero aquel dolor sentimental que le dió ver perder a sus padres no la hizo recuperarse en semanas.

Hasta que un catorce de febrero por fin Lily y James Potter, aparecieron en la casa y con ello, por fin la chica pudo darse cuenta que Lily estaba embarazada.

—Dios, no lo puedo creer —los sentimientos acumulados hicieron que Jazmine empezara a llorar mientras abrazaba a su cuñada—, estoy tan feliz...

—La partera dice que es un niño.

—Hola pequeño Harry, soy tú tía y voy a amarte por siempre —la chica se inclinó para hablarle a la creciente panza de la pelirroja y terminó besando su piel.

Parecía como si su sobrino o sobrina lo hubieran dado un poquito de luz que había perdido con sus padres y su abuelo, los extrañaba cada maldito día. Porque de alguna u otra forma se sentía culpable de no haber podido hacer algo.

Se sentía peor cada vez que recordaba como había encontrado a su abuelo, pero supo que había muerto con honor en amor hacía ella. Pero no se merecía todo ese amor, no se merecía nada.

Y entonces volvió a sentir que su vida tomaba un color gris, porque tenía que esconderse en aquella casa que estaba apenas protegida por un par de hechizos.

—¡James! —Sirius apareció un día en la puerta—, ¿Jazmine? ¿Tienes a tu maldita hermana aquí y no lo habías dicho?

Aquellos dos compartieron un abrazo, lleno de amor fraternal que les había hecho falta desde que se reconciliaron. Jazmine lo apretó como si le diera la certeza en que Sirius de pronto se convirtiera en Regulus.

The way i loved you - Regulus Black Where stories live. Discover now