Capítulo 63

1.2K 195 11
                                    

   ANASTASIA

Mi suegro se queda solo cocinando la carne, nosotros estamos en las tumbonas alrededor de la piscina mientras escuchamos como Mía nos cuenta como fue que Ethan le pidió matrimonio. Ella está muy emocionada, y yo no puedo creer el cambio de actitud de Ethan con respecto al matrimonio.

  — ¿No hubo música con violinistas?  — Ataca a Elliot.

  — ¿No hubo aviones escribiendo Mía, cásate conmigo?— Contraataca mi marido.

  —¿No hubo una idea original?—  digo mientras le acaricio la cabeza a mi perrhija, que está encima de mis piernas.

  —¡Basta !— , grita Mía, — para mí ha sido perfecto, tal vez no había músicos, ni mensajes en el cielo, ni mucho menos una idea original para pedirme matrimonio, pero a mí me encantó— , agrega molesta.

— No pude prepararme con anticipación, estaba asustado, pensé que la había perdido y quise arriesgarme, temiendo que me dijera que no— Ethan se defiende.

— ¿Entonces fue tu desesperación lo que te llevó a proponerle matrimonio a mi hermana?—  Mi marido pregunta demasiado en serio.

  — Si y no— Ethan toma la mano de Mía y la lleva a sus labios para besar sus nudillos — estando lejos de ella me di cuenta que mi vida sin ésta hermosa mujer no tiene sentido, la amo con todo mi ser y quiero pasar el  resto de mi vida a su lado — responde, mirando intensamente a mi cuñada con ojos de hombre enamorado

—Que lindo— dice Kate, — pero debemos hablar de la fiesta , será una boda de otoño —, añade.

  —Yo propongo que hablemos de la fiesta, el vestido de novia, la boda, la comida, excepto la noche de bodas—, agrega Elliot.

  —¿Por qué?—  Ethan responde burlonamente mientras él y Mía se miran con complicidad.

  — Es obvio, Christian y yo no queremos saberlo.—

  Que hipócrita, podría asegurar que apenas ha tenido oportunidad le ha preguntado a Christian sobre nuestra luna de miel y nuestra noche de bodas.

  — Elliot tiene razón, hay cosas que no queremos saber y mucho más si se trata de nuestra hermanita — agrega mi esposo.

  —No tengo ningún problema en decirle lo que voy a hacer—, dice Mía burlonamente.

  —Ni siquiera lo pienses—, responde Christian con un tono amenazante.

  —Sugiero que mejor hablemos de la noche de bodas entre Christian y Ana—, sugiere Ethan.

  No puedo evitar sentir un rubor en mis mejillas.

  —¿Quieres llegar vivo a tu boda?—  Mi esposo responde y Ethan y Mía se ríen.  No veo que es divertido.

Mía deja de reír y me mira.

  —Ana, Kate, quiero que sean mis damas de honor— , dice con seriedad. — Por favor.

  — Será un honor—, le  respondo con una sonrisa.

  —Me siento muy honrada de que me hayas pedido que sea tu dama de honor—, agrega Kate.

  —Elliot y Christian, ¿quieren ser los padrinos?—  pregunta Ethan.

  — Hmm, estoy feliz en ser el padrino de bodas de mi hermana—, responde Elliot.

  Todos volvimos la mirada hacia mi esposo esperando su respuesta.

—Está bien, acepto—  Mía aplaude con entusiasmo.

  —Chicos, ¿por qué no están ayudando a su padre?—  Grace grita desde donde está mi suegro.

MI DULCE REDENCIÓNWhere stories live. Discover now