CHRISTIAN
Me separo de Ana, por falta de aire.
Maldita sea, mi polla se ha puesto dura.— Volvamos a la sala,— me dice con la respiración agitada.
Aparentemente no soy el único excitado en esta habitación, cariño, podemos quedarnos aquí y usar el escritorio o el sofá, o tal vez la pared como soporte.
— ¿Me dejarás así?— Miro hacia abajo a mi vientre, y agarro mi polla con mis manos.
— Primero resolvamos el problema de tu ex-amante— me dice.
— Ella nunca fue mi amante — compañera sexual, no amante — mi amante eres tú — ya deberías saberlo.
— Vamos — maldita sea.
Ella camina hacia la puerta, agarra la perilla y la gira.
De vuelta en la sala, Leila está de espaldas a nosotros hablando por teléfono.
— Ya te lo dije, el señor Grey está muy enamorado de Anastasia, él nunca se fijaría en mí — seguramente ella está hablando con la perra de Elena .— Sé que no es una excusa, pero estoy cansada — agrega. — Señora Lincoln, por favor... Está bien, haré lo que me diga—¡maldita sea!
Leila cuelga y se gira.
— Estaban aquí, ¿me han oído? — Pregunta.
— ¿Estabas hablando con la pedófila de Elena?— Ana le pregunta a Leila, y ella asiente.
— Supongo que no le has dicho que te descubrimos —digo con un tono duro.
— Por supuesto que no,— afirma.
— Quiero que me escuches con atención — ella pone toda su atención en mí — te llevarás a tu hijo y te irás de esta ciudad, puedes irte a cualquier ciudad, o si prefieres puedes irte a otro país.
— Pero... — me interrumpe.
— Quiero que ésta sea la última vez que nos veamos, no quiero saber más de ti. — Sé que soy drástico pero es lo mejor, no quiero que nada de mi pasado empañe mi futuro con mi Ana.
— ¿A dónde iré? No tengo dinero —responde preocupada— además, mi hijo tiene sus amiguitos en esta ciudad, no puedo apartarlos de ellos.
—Claro que puedes —le espeto— dale las gracias a Ana, que me convenció de no hacer nada contra ti, pero debes irte lejos de nosotros.
Leila mira sorprendida a Ana.
— Te daré un poco de dinero para que comiences una nueva vida con tu hijo, pero aléjate de Elena, Russell y nosotros, ya fue bastante difícil lo que nos hiciste pasar, — dice Ana y me sorprende su determinación.
— Anastasia, no sé qué decirte,— responde Leila asombrada.
— No digas nada, vete y dale una buena vida al pequeño Paul — es lo mejor que puede hacer.
— Gracias...—
— No lo hago por ti, lo hago por tu hijo, sé lo difícil que es crecer sin un padre o una madre, no quiero que el pequeño Paul pase por algo así.— Añade mi mujer.
— Gracias, y perdón por todos los malos momentos que pasaron por mi culpa — nos dice.
Me pregunto si realmente está arrepentida.
— Antes de que te vayas, quiero que me digas quién está ayudando a Elena en el hospital. — Quiero saberlo para poder atraparlo y enviar a Elena a la cárcel.
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MI DULCE REDENCIÓN
FanfictionLuego de abandonar a Christian, Anastasia trata de rearmar su vida, pero sé da cuenta que no puede hacerlo sin él. Intentarán acercarse nuevamente , pero ¿Será tan fácil? ¿Cómo se tomará él, los motivos que llevaron a Anastasia abandonarlos? Una ex...