Capítulo 107: A él le gusta

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Pei Cheng regresó al anochecer. Cuando fue al Yamen, Jiang Sanye estaba ocupado y tuvo que volver sin hablar con él. Pero no quería regresar, anoche tuvo una pelea con Jiang Rinzhi y luego un enfrentamiento con el maestro Cheng, por lo que no tenía ganas de regresar tan temprano y ver la apariencia desagradable del maestro Cheng. No sabía que la persona que más odiaba ahora ya no podía estar frente a él nunca más.

Entonces, como no quería volver tan pronto, Pei Cheng simplemente fue a la tienda de dim sum. La tienda no es grande, algunos pasteles son especiales y originales de la tienda, por lo que su precio será más alto. Pero aparte de eso, todos los demás pasteles tienen un precio justo. Así que esta tienda de dim sum sigue siendo muy popular entre la gente común.

Pei Cheng tomó el libro grande de cuentas y revisó el movimiento de los últimos meses. Encontró que las ganancias de este mes eran mucho más bajas que las del año pasado. Se disgustó y llamó al mayordomo para preguntarle sobre eso. El mayordomo sonrió con pesar y explicó: "El maestro Pei no lo sabe. En los últimos años sólo nuestra pastelería en este mercado tenía buen gusto y precios razonables, así que a la gente le gustaba venir a comprar a nuestra tienda. Pero este año hay una nueva pastelería en la siguiente calle. He probado el sabor de esa pastelería, y de hecho, es mejor que el de nuestra tienda".

"¿Qué pasa con el precio?" El mayordomo suspiró y contestó: "En relación al precio, sólo cobran una o dos placas más de cobre que nosotros. Aunque la gente que viene a comprar pasteles no es muy rica, la mayoría de ellos tienen dinero extra en sus manos. Están dispuestos a gastar dinero en pasteles y naturalmente, pagarían una o dos placas de cobre extra para comprar algo más delicioso".

Pei Cheng golpeó el libro de cuentas con fuerza, "¿Entonces por qué no me lo dices? ¡Si no fuera porque vengo hoy para ver el libro, no me contarías que le está yendo mal a la tienda estos últimos meses!" El mayordomo fue paralizado por esas palabras, sabía que Pei Cheng no era sólo el esposo del segundo maestro Jiang, si no que también era el segundo maestro más joven de la casa Pei. Por lo que le pareció que por defecto Pei Cheng era como todos los jóvenes maestros que no se preocupan por cosas como estas.

El mayordomo creía que Pei Cheng abrió la pastelería sólo por diversión y no le interesaría mucho, por eso él ignoró la tienda. De todos modos la tienda no era suya, ¿por qué debería preocuparse? Lo que no sabía, es que esta tienda era muy importante en el corazón de Pei Cheng. Entonces cuando él vio que la tienda había ido cuesta abajo durante los últimos meses, se enojó de inmediato.

Pei Cheng no es tonto, puede darse cuenta de los pensamientos del mayordomo, "Te traje aquí, no para que seas como yo, si no para ser un comerciante. Las cuentas de la tienda durante estos meses no son buenas, ¿y ni siquiera puedes enviar a alguien para informarme?" El mayordomo se secó el sudor frío de la frente y se defendió: "Al principio iba a decirlo, pero era casi fin de año así que no pude decirlo. Después, la familia Jiang dio a conocer la noticia de la separación del Patio Este. En esas circunstancias me es aún más difícil para mí molestarte con este asunto y ha quedado en espera de esta manera".

Pei Cheng sonrió enojado, "Si realmente tomaras en serio este asunto, no me lo harías saber hasta ahora". El mayordomo entró en pánico, tratando de explicar algo, de pronto vio a Pei Cheng cerrar el libro de contabilidad de un golpe, "Dame todos los libros de cuentas de los últimos dos años. Quiero revisarlos más de cerca". El mayordomo rápidamente sacó los libros y los puso frente a Pei Cheng diciendo: "Todos fueron hechos por el contador original, eso es todo".

Cuando Pei Cheng escuchó esas palabras, sus ojos eran como dos cuchillos que hicieron temblar al mayordomo, "Según lo que dices, ¿nunca has estado a cargo de la tienda? El mayordomo hizo un gesto con la mano y explicó: "No, lo hice, no sé cómo administrar las cuentas así que naturalmente no sé si el contador ha hecho algo con los libros".

The Male WifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora