Mate Del Alpha.

CAPÍTULO 85|✔

||ALYSA||

El día tan esperado había llegado, todo estaba preparado y solo era cuestión de minutos para estar unida de todas maneras a Evan. Las cosas en la manada habían mejorado, no había más rastros de ninguna otra criatura sobrenatural y supusieron que solo habían estado de pasada por ahí.

La ciudad de Wokem fue el destino elegido para celebrar nuestras nupcias, no podíamos arriesgarnos a llevar humanos a la manada.

Alessia fue la primera en llegar, estuvimos aquí tres días antes por el motivo de que aún había cosas que terminar.

La fiesta de despedida fue algo sencillo, nada de alcohol o chicos nudistas; Evan enloqueció cuando Melisa "accidentalmente" dijo algo sobre eso.
Solo nos quedamos en la habitación de hotel en una pijamada, está vez sin escapes a fiestas.

Ahora me encuentro en la habitación de hotel con las chicas mientras nos maquillan y arreglan nuestro cabello, no quería nada de esto, yo misma iba a hacerlo, pero mis damas de honor me lo regalaron y no podía rechazarlo.

— Listo —dicen las chicas y al mirarme en el espejo me quedé asombrada. Me veo realmente bien.

— Muchas gracias, les ha quedado espectacular —les sonrío y estás me devuelven el gesto.

Las chicas recogen su material ya que solo faltaba yo, mis amigas ya estaban maquilladas y peinadas, así que cuando terminaron conmigo solo guardaron sus cosas y salieron.

— Es hora de que te pongas tu vestido —chilla Doth.

— Así es, pero tiene que ser rápido, tu hombre ya está allá —dice Alessia extendiéndome el vestido.

— Gracias —lo tomo y todas salen para que pueda cambiarme cómodamente.

Deshago el nudo en mi bata y la dejo caer por mis hombros; entro en el vestido y llamo a las chicas para que me ayuden a ajustarlo.

— Te ves realmente preciosa —dice Leslie abrazándome.

— Así es Aly —dice Doth uniéndose al abrazo.

— Te ves muy atractiva y caliente con ese vestido mujer —dice Alessia entre risas.

— Así es, tu hombre va a enloquecer al verte —dice Melisa con una sonrisa de lado.

— Gracias por estar aquí, a todas —nos uno en gran abrazo y escucho varios golpes en la puerta.

— Yo iré —dice Leslie y va hacia la puerta abriéndola.

— Disculpen si las molesto señoritas, pero es hora —dice un chico y asentimos.

Tomo mi ramo y salimos de la habitación. Al estar fuera el auto ya nos espera en la entrada del hotel así que que al llegar a este, nos abren la puerta y subimos.

Los nervios intentan tomar el control de mi cuerpo y siento como los cachorros se mueven.

— Pequeños ¿no pudieron esperar a otro día? —susurro a mi vientre.

Durante el camino las chicas me hicieron distraerme para olvidar mis nervios antes de ponerme mal, pero al ver que estábamos cerca los nervios regresaron.
Es como si un gran nudo de inseguridades me ahorcara, cualquier cosa puede pasar y no puedo evitar pensar en ello.

Al llegar a la gran iglesia baje con ayuda de mis damas de honor, quienes me escoltaron hacia la entrada, estando ahí sus palabras de aliento no tardaron en llegar y Alessia intentaba hacerme reír cada vez que podía para que dejara mis nervios de lado.

— Señoritas, ¿me permiten un momento a Alysa? —pregunta el señor Romeo y estas asienten dejándome con él.

— ¿Evan ya está dentro? —pregunto y limpio las palmas de mis manos con mi vestido.