Mate Del Alpha.

CAPÍTULO 43|✔️

|| ALYSA||

— Por lo que tengo entendido cuando conoces a la pareja de tu hijo te dedicas a avergonzarlo —dice el señor Romeo con una sonrisa— así que lo siento hijo, pero ese es el deber de un padre.

— Papá por favor —dice Evan riendo— le estás dando armas a quien no las necesita.

— Vamos, prometo que contaré una historia vergonzosa mía también —digo mirando al señor Romeo.

— Está bien —ríe— esto no es algo vergonzoso, o al menos eso pienso yo; pero cuando mi esposa estaba en sus últimos meses de gestación yo tuve que realizar un viaje, ella era demasiado obstinada y me contradecía en todo, yo le dije que por nada del mundo saliera sola pues en cualquier momento podría traer al mundo a nuestro cachorro y ella decidió hacerlo, el punto es que Evan nació en un auto y nadie se había enterado hasta que su madre llegó al hospital tranquilamente para que revisarán al bebe, ella tenía conocimientos médicos y pudo dar a luz por su cuenta.

— Mi historia es algo rara —rio— desde muy pequeña mi padre y hermano me enseñaron a defenderme y siempre me repetían que nunca debía dejar que nadie me molestara, y yo como la niña obediente que era hice caso a sus palabras; estaba en preescolar y nos encontrábamos recortando figuras, un niño que siempre me molestaba corto un mechón de mi cabello diciendo que fue un accidente, pero mi furia fue tanta que no dude en golpearlo, le di puñetazos en la cara provocando que su nariz sangrara y cuando la profesora se dio cuenta me llevo a dirección, llamaron a mis padres asustados diciendo que parecía un varoncito y en casa mi hermano me felicito pero mis padres me castigaron —finalizo y Evan sigue riendo.

— Deberías tener cuidado con ella hijo —dice el señor Romeo riendo— cuando Evan era pequeño había una niña con la que pasaba demasiado tiempo, todos llegamos a pensar que serían Mates; la historia es que ambos se comportaban extraños frente al otro, la pequeña era tan bonita que ponía nervioso a Evan, tanto que un día...

— Papá no continúes —interrumpe Evan tan rojo como un tomate.

— Yo necesito escuchar eso —digo y tomo de mi café.

— Cómo te decía, un día Evan se hizo en los pantalones solo porque ella beso su mejilla —finaliza y mi risa inunda el lugar, no puedo parar de imaginar a Evan de pequeño y encima que se haya hecho en los pantalones.

— Creo que ya fue mucha vergüenza, no le contarás nada más a esa mujer que me estarás condenando a sus burlas de por vida —dice Evan cubriendo su rostro.

— Es que es gracioso pero tierno a la vez —digo cuando mis risas han cesado— no puedo creer que tú, el gran e impotente Alpha se haya hecho en los pantalones.

— Era pequeño y tonto —dice y quita las manos de su rostro— pero juro por mi vida que investigaré algo sobre ti.

— Seré justa —digo y su padre nos mira— según contaban mis padres, había un lugar que no era guardería al que ibas un año antes de entrar a preescolar, yo detestaba ir al baño a donde todos iban y mi madre siempre me decía que no lo usara porque eso era antihigiénico, así que un día también me hice en mi ropa porque no quise usar el mismo baño que todos —digo y las risas de ambos llaman la atención de todos— si, mi madre tuvo que ir a limpiar después de clases.

— Estamos a mano —dice Evan riendo.

— Al parecer los dos tienen un historial similar —dice el señor Romeo y asentimos.

— Algo debíamos compartir —digo riendo.

— Si quieres saber algo más, Kane y Abraham te podrán contar sin problema alguno —dice el señor Romeo y toma de su café.