—¿esta usted bien? —preguntó el rizado acariciando las mejillas de Louis incitando a que lo mirase los ojos pero el ojiazul estaba mirando sus propias manos algo afligido.
—mi padre le grito cosas innecesarias, ya sabe como es él... —Dijo Eliot, Harry gruño y Louis suspiró haciendo una triste mueca.
—joder, su padre algún día de estos sobrepasará mi paciencia y lo defenderé a muerte... —gruñó haciendo que Louis rogase con la mirada lo contrario.
—sin embargo, yo defendí a mi hermano. —admitió el alfa y Harry le agradeció con la mirada — Y ahora, debo irme... Por favor cuide de Louis.
—no es necesario que lo pida, ese es mi deber como su alfa. —Louis le regaló una dulce sonrisa a Harry para luego acercarse a Eliot para abrazarlo.
—g-gracias por todo... —susurró cerca de su oído y Harry gruñó sin poder evitarlo a ver como se abrazaban. Sabía que eran hermanos pero también sabia que Eliot era alfa, es por eso que ambos se separaron y el ojiazul se acerco a Harry para sonreírle a su hermano.
—nos vemos luego... —dijo hacia Harry y el rizado asintió con la cabeza para luego ver cómo este salía de la casa. Dejando así solos a ambos en el hogar del rizado.
—¿está bien? —le preguntó el rizado acercándose a Louis, el más bajo miro sus ojos y asintió abrazándolo por el torso para luego apoyar su oído en su pecho.
—necesito tenerlo conmigo, siempre... —murmuró el omega, haciendo que el más alto sonría acariciándole el cabello.
—siempre estaré a su lado, ahora no se irá a otro lugar si no es conmigo. —el ojiazul sonrió para luego mirarle los ojos verde mar que tanto le volvían loco.
—usted me hace sentir especial. —le admitió el ojiazul, Harry se le acercó a sus labios para besarlo castamente— Espero que siempre sea así.
—nunca lo trataría de otra forma, usted es mi estrella en el cielo oscuro, mi flor en el jardín desértico y mi pilar de mi estructura... Usted lo es todo para mi. —el ojiazul no dudo en besarlo.
Fue un impulso de aprovechamiento para demostrarle como le hacían sentir sus palabras dulces cada vez que se las decía. Y Harry parecía encantado con su forma de agradecerlo.
—sus palabras me llenan el corazón. —admitió.
—a mi sus besos... —le susurro sobre los labios y Louis sonrió — me hacen desearlo.
—debe controlarse... —el rizado le miró algo confundido.
—¿no esta tomando los supresores ? —le preguntó y Louis no sabia que decir.
—¿por qué lo pregunta? —le miró nervioso y el ojiverde entre cerro los ojos ante su nerviosismo.
—esta nervioso... No ha tomado los supresores, es por eso que me desespera su aroma. —dijo en conclusión y Louis asintió — ¿por qué no los ha tomado?
—usted... —hizo una mueca— Yo no puedo tomarlos aún. El doctor pidió chequearme.
—esta bien. —le dijo sonriendo y Louis intentó calmar su nerviosismo con esa mentira.— ¿qué le dijo su padre esta vez?
—nada de lo que me sienta orgulloso de repetir. —admitió.— Prefiero no hablar de aquello.
—esta bien, respeto su decisión. — Louis le miró sonriendo para luego besarle los labios castamente haciendo que el ojiverde ruegue por más con la mirada. Pero Louis rápidamente se alejo para tomar su maleta.
— ¿dónde puedo dejarla? —preguntó haciéndose el desentendido y el rizado gruño leve, haciendo que Louis ruede los ojos.
—en mi alcoba... —jadeo acercándose al más bajo, el omega volvió a rodar los ojos.
—harry... —murmuró y el más alto le miraba como si fuese su presa.— Debe calmarse... se lo pido.
— intento... —susurró acercándose al cuello del omega, para luego lamerle la marca. El ojiazul sintió temblar sus piernas por lo que soltó las maletas. — Lo siente también...
— por favor... —le suplicó en un gemido que provoco que el rizado sintiera su cuerpo desearlo aún más.— no quiero...
— ¿no me quiere dentro suyo? —le pregunto cerca de su oído y Louis rogó mentalmente para que se alejase de él.
— no me siento bien... —se excusó falsamente.
— ¿le duele algo? —preguntó serio el rizado, mirándole los ojos y Louis asintió mintiendo.
— la cabeza, me duele muchísimo. —inventó— Mi padre me dejó jaqueca.
— entonces esta bien... — dijo agobiado mientras que se alejaba un poco del ojiazul para después tomar las maletas. Louis vio el ceño fruncido del ojiverde y no dijo nada cuando el alfa salió de allí con las maletas en dirección a las habitaciones. Sólo lo siguió.
*
—¿su hermana? ¿está mejor? —preguntó curioso y el rizado no decía nada mientras que se comenzaba a arreglar para acostarse a la cama. Louis sólo lo miraba esperando alguna respuesta pero esta nunca aparecía y aquello le comenzaba a asustar.
Y es que luego de haber rechazado a su alfa, el rizado no le había vuelto a dirigir la palabra, pero Louis pensó que era momentáneo. Sin embargo, han pasado horas de aquello y aún no recibía una respuesta.
—¿porqué esta acá? —el alfa bostezo y se sentó en su cama para comenzar a sacarse los zapatos dejando su espalda al rostro de Louis— ¿cierto?. —el omega trago saliva para luego suspirar profundamente.— ¿cariño?
El alfa gruño levemente haciendo que Louis guardará silencio. Pasaron un par de segundos y el rizado acabó acostado en la cama a un lado del ojiazul, pero dándole la espalda. El omega hizo una mueca mientras que veía como el rizado estiraba su mano a apagar la luz de la habitación.
Sabía que estaba molesto y no lo cuestionaba, pero se sentía mal por ello. Por lo que acabó acercándose al ojiverde lentamente acabando con sus frías y delicadas manos rodeando el torso del alfa que estaba ardiendo de molestia, soltando pequeños gruñidos cuando las manos de Louis tocaron su cuerpo.
—lo siento... —se disculpó y el rizado no respondió— cariño, perdón. — el alfa gruño.
— dormir... —dijo casi en un gruñido— Es hora de dormir.
— no, no puedo dormir contigo así. —el ojiverde bufó cuando las manos de Louis subieron por su abdomen marcado hasta su pecho con vellos, para jugar con sus dedos en ellos.
—estoy molesto. —admitió y Louis sonrió al escucharle decir aquello por lo que acercó sus labios a la piel desnuda de su hombro para luego besarle castamente esa área, pero repetidas veces. — No me gusta estarlo.
—perdón por haberle hecho enfadar. —dijo sincero y el alfa cerró los ojos al sentir su susurro cerca del cuello.
—no estoy molesto porque me rechazo, lo estoy por no poder controlarme. —dijo en gruñido.
— ¿está seguro? —el más alto asintió— ¿me promete que no esta molesto conmigo? —el ojiverde suspiro.
— lo juro... —louis besó su hombro y sintió como las manos del alfa tomaba sus manos— No quería hablarle por hoy porque es la única forma de mantener un margen físico con usted... o al menos eso creí.
Louis soltó una leve risita en su espalda y se apegó al rizado haciendo que el más alto sonriera cuando tocó sus pies helados.
— hay veces que lo deseo demasiado. —admitió vergonzosamente el más bajo y el rizado sintió su corazón acelerado.— Pero intentó calmarme, intento poder mantener el control de mis acciones.
—cuando usted no era mi omega y me toco estar en celo no podía controlarme en mi habitación... —Louis se sonrojo al escucharle aquello— Me masturbaba toda la tarde pensando en usted.
—harry... —el ojiverde gruño.
— no diga nada... —pidió— Quiero que me entienda...—el ojiazul asintió viendo como el rizado se giraba para luego percibir como las grandes manos del alfa rodeaban su cintura y tocaban su piel bajando hasta su trasero, descendiendo por su muslo hasta llegar a la rodilla para elevar su pierna a la cadera del rizado haciendo que ambos sexos se tocaran.
El ojiazul negó mentalmente, el alfa estaba jugando con fuego y en cualquier momento ambos acabarían quemándose. Louis sentía como ya comenzaba a humedecerse y como su respiración comenzaba a ir-regularizarse.
—intento controlarme, lo hago. —admitió el rizado a un suspiró de los labios de Louis, el ojiazul sintió su aroma y se relamió los labios— Pero siento su aroma... su exquisito aroma... —paseo su nariz por la mejilla y descendió hasta el cuello para quedarse allí. Louis cerró los ojos mordiéndose los labios cuando sintió su lengua en la marca, quería aguantarse su gemido— Pierdo la razón lentamente... Pero debo calmarme.
El rizado se alejó del cuello del omega para mirarle los ojos, ojos que Louis aún tenía cerrados intentando controlar su respiración.
—ahora mismo quiero estar dentro suyo... —admitió el rizado cuando los ojos de Louis se abrieron uniéndose a los suyos.— Dios, lo deseó tanto que podría correrme tan sólo sí usted me besa.
—cada vez que dice esas cosas me hace sentirme vacío. —el ojiverde sonrió relamiéndose los labios.— con usted dentro todo esta bien.
— hoy no. —le dijo el alfa y Louis suspiró. — Hoy estaré controlado.
— se lo agradezco. —susurró el más bajo acercándose al cuello del rizado para cerrar los ojos allí mientras sus manos comenzaron a hacerle caricias a sus vellos del pecho.
— buenas noches bebé... —le susurró el alfa cuando beso su cabellera y el omega sonrió mirándolo desde abajo.
— buenas noches cariño. —dijo tranquilo el ojiazul.
Pues, a pesar de toda aquella situación de sinceridad e instinto carnal, el ojiazul entendía perfectamente al rizado y viceversa. Es por ello que sin darse cuenta ambos acabaron soñando con el sexo que no tuvieron esa noche en la vida real, pero en otro mundo ambos acabaron haciendo lo que deseaban con tantas ganas.
*
hola, espero que estén genial. les quiero <3
sick lovexx
cari