Recelo

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Cada rato libre que había tenido en los últimos días, teniendo en cuenta que como Hokage realmente no tenía ratos libres, lo usaba en leer un poco sobre el caso de Tenten. Revisaba libros de medicina buscando posibles métodos para favorecer la reconexión a los recuerdos al tiempo que hacía el tratamiento curativo a la lesión de su cerebro. Lesión de la cual ahora tenía una ligera idea de qué la pudo causar, había encontrado en un libro de jutsus antiguos uno con el que se podía dejar a una persona inconsciente al hacer fluir una cantidad de chacra determinada en un ángulo muy específico en el cuello apuntando hacia la unión entre la médula espinal y el cerebelo, era una técnica peligrosa pues el mínimo movimiento al realizarla podía generar problemas en la víctima de dicho jutsu, el listado de problemas incluía la muerte, que afortunadamente no era el caso, entre otras tantas además de la pérdida de memoria, que era ocasionada al inflamar y maltratar las neuronas que se vieran implicadas, muy pocas personas manejaban esa táctica por la complejidad de la misma. Ese libro no daba ningún indicio de cómo revertir el proceso, más allá de dejar que las células se recuperaran solas y confiar que los efectos secundarios desaparecieran eventualmente. Un ANBU llegó a su ventana sacándola de sus pensamientos.

- ¿Y? — preguntó al verlo

- Ayer no salió en todo el día del departamento, hoy salió temprano, está en la biblioteca en este momento — le reportó

- ¿Cómo se ve?

- Tiene grandes ojeras, se ve desubicada pero no ha tenido ataques de ansiedad hasta el momento

- Continúa la vigilancia, si está fuera de su departamento pasada la hora del almuerzo y no ves que ingiera alimentos me lo informas de inmediato — el enmascarado asintió y se retiró

Su deber en su cargo era saber todo lo que pudiera sobre lo que ocurría en la aldea, no podía ser tomada por sorpresa por ninguna noticia así que parte de las labores de los ANBU eran vigilar lo que pasaba. Asignó uno de ellos exclusivamente a hacerle guardia a Tenten, necesitaba supervisar su evolución y hacer lo posible por saber así si se estaba tomando la medicación entregada, por eso la molestó ese reporte pues las ojeras eran señal de falta de sueño. El primer día supo que había salido a explorar y se había perdido, el guardia, sin su máscara puesta, intentó hablarle para ayudarla y ella había huido, resultando de nuevo en el campo de entrenamiento en donde afortunadamente estaba el Hyūga quien se había encargado de la situación. Con esa corta información de esos dos días empezaba a creer que enviarla a casa había sido un error.

~

El ANBU no regresó, lo cual fue bueno. Pero debía programar un control, era el momento de revisar si el procedimiento hecho días atrás mostraba alguna mejoría, la mandaría a llamar al día siguiente. Leyó un poco más, todavía pensando en el jutsu leído, ni ella en todo el conocimiento médico que tenía había conocido antes alguien que pudiera hacer algo como lo descrito. Su necesidad de saber quiénes habían sido esos atacantes aumentaba. Se retiró a descansar pasada la medianoche tras ver que la montaña de papeleo sobre su escritorio no había cambiado ni un poco. Empezó su mañana dando una ronda por el hospital, no había ningún caso que requiriera su atención así que buscó a su pupila para pedirle que fuera a buscar a Tenten y la llevara al consultorio, prefería que fuera ella quien la buscara y no enviar a un ANBU que le generara desconfianza, la chica asintió y se fue. Mientras esperaba revisó un poco el inventario de suministros médicos que tenían, sabía que Shizune hacía un trabajo magnífico con eso pero era una forma de distraerse. Sin novedades con el inventario vio a Sakura llegar a su lado para informarle que Tenten ya estaba en el consultorio esperando, le preguntó cómo la veía y había esquivado su mirada. ¿Así de mal? Tomó una jeringa y le pidió que la acompañara.

El Clan KazirgaWo Geschichten leben. Entdecke jetzt