El Clan Kazirga

Viaje

Después de regresar al campamento, se acostó otra vez de lado casi abrazándose mientras su cabeza rumiaba sobre lo que acababa de descubrir, tardó un poco pero el sueño volvió a aparecer. Dormía profundamente, estaba teniendo una pesadilla cuando algo le tocó el hombro sacándola de los brazos de morfeo, su cuerpo se puso rígido y abrió los ojos, acostumbrándose rápidamente a la claridad. Había un par de ojos oscuros mirándola. Soltó un grito, saliendo de la bolsa de dormir y empezando a alejarse, sentada en el suelo e impulsándose con las manos, para andar hacia atrás sin darle la espalda, un árbol la detuvo. Su pulso estaba acelerado y en contra de su voluntad sus ojos se aguaron al sentirse nuevamente en riesgo. Todos en el campamento se quedaron atónitos.

- Lo siento — se disculpó de inmediato Shikamaru, con las manos levantadas indicando que se había acercado en son de paz y retrocediendo varios pasos

Ella no lo veía, estaba hiperventilando, evaluando sus opciones para escapar.

- ¡Tenten! — en un movimiento ágil Sakura estaba frente a ella, agachada a su altura e intentando que hacer contacto visual — por favor Tenten, mírame — la vio hacer una señal con la mano, le estaba indicando a los demás que se distribuyeran para atajarla por si huía — Tenten, estás a salvo — ante esas palabras enfocó sus dilatadas pupilas en los orbes verdes de quien le hablaba, recordando dónde y con quiénes estaba

- Perdón — se disculpó, su respiración empezaba a calmarse. Sakura exhaló aliviada por haber logrado calmarla antes de tener que perseguirla por la mitad del bosque. No sabía que tanto podía correr esa Tenten frente a ella, pero la anterior era bastante rápida.

- ¿Quieres desayunar? — le preguntó para relajar el ambiente, ella asintió. Los demás ya se habían reagrupado así que la llamaron para que se acercara donde comían

- Necesito un minuto, por favor — tan pronto le dio la espalda abrazó sus rodillas para poder enterrar la cabeza intentando terminar de recomponerse. Se dijo a sí misma que estaba a salvo y era innecesario reaccionar de esa forma al despertar. Ninguno de los hombres presentes se iba a propasar o la iba a golpear.

Despacio se acercó a la fogata y se sentó junto a Neji, que era el más retirado de todos. Shino le entregó un plato y ella le agradeció. Vio el plato con lo que parecían hongos y arroz, se alegró de tener que dejar de comer solo sopas. No notó que Neji vigilaba el movimiento de su tenedor cuando se lo llevó a la boca.

- Tenten — le susurró, ella no le contestó por tener la boca llena pero se giró para verlo — tú no comes hongos — mordió lo que tenía en la boca y de inmediato sintió el desagradable sabor, de eso era la crema el día que vomitó. Con todo el disimulo que fue capaz los escupió

- Es bueno saberlo — contestó empezando a separarlos del contacto con el arroz — ¿qué hago con ellos?

- Hmph — le acercó el plato — pásamelos

- Gracias — murmuró ella mientras hacía lo que le había indicado. Todos se habían quedado en completo silencio viendo lo que acababa de pasar entre el par de compañeros y enfocaron los ojos en su propio plato al ver que el Hyūga levantaba la mirada.

Después de desayunar, recogieron todo el campamento y continuaron el viaje. Rumbo a aquel lugar que significaba casa.

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- Uryuu ¿Qué vamos a hacer? — preguntó Tuuli mientras acomodaba un par de cosas en la casa temporal que estaban ocupando

- Nada — contestó calmado

- ¿Los dejaremos así no más? — dijo Jannos totalmente enojado de oír esa respuesta