Capítulo 78

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No puede ser.

Por supuesto que no.

Clarisse... Ella... Ella es mi amiga.

No, no, no.

¡Mierda!

Clarisse no sería capaz de hacerle daño a mi hija, ella ha sido mi amiga desde el primer momento en que llegué aquí, ella quiere a Mía, no puede hacerme estó.

No puede creerlo, no doy crédito a lo que mis ojos miran, debe ser falso, Clarisse sería incapaz de hacerme daño, de hacerle daño, ella estuvo conmigo siempre. Yo veía en sus ojos el cariño que le tenía a la pequeña.

¿Como podía ser falso ese cariño?

Mi corazón amenazaba con abrir un hoyo en el pecho y salirse disparado de su lugar, mi cabeza retumbaba y mis ojos ardían, picaban. Lo que siento en esté preciso momento es el peor sentimiento de todos; traición, pura y dañina traición. Pero lo que hacía que doliera a un punto inimaginable era que venía de una persona que creí mi amiga. Yo jamás imaginé que pudieran ser una de ellas, nunca dudé de mis amigas ni por un segundo.

A veces los enemigos prefieren estar frente a tí.

Recordé las palabras de Damián aquella tarde cuando Ross y su gente nos interceptaron de camino a casa, eran las palabras más certeras que había escuchado jamás.

Yo la quería, la quería mucho, y ella se aprovechó de eso para llevarse a mi hija, para alejarla de mí y hacer con ella quien sabe qué.

—Sigue el auto con las cámaras de la carretera— ordenó Damián y Jonny empezó a teclear con rapidez.

Sentí la rabia, el odio que antes era un inmenso cariño hacia ella, me embargo completa. Quería gritar, decirle que era la peor basura que había pisado la faz de la tierra. Me sentía totalmente estúpida, traicionada, me había usado, toda su maldita amistad no fué más que una jodida trampa para jugarme sucio y robarse a mi hija.

Mi pequeña bebé.

—No lo entiendo— susurró Hansel sin despegar la vista de la computadora de Jonny. Giró el rostro para mirarnos a Damián y a mí con atención— ¿Por qué ella? ¿Con qué fin? Hasta dónde sabemos no tiene ninguna relación con Dana, mucho menos con Ross. Me parece algo sin sentido, era amiga de las chicas ¿Por qué robarse a la hija de su amiga?

—Por qué es una maldita traidora, claro está.— respondí en un susurró, mi voz era fría, en ella se podía notar todo el maldito odio que me consumía.

El dolor...

El dolor de que hubiese sido ella ¡Dios! La quería tanto, era mi maldita amiga.

—Estás son las imágenes, señor— la voz de Jonny cortó nuestras suposiciones.

En la carretera de camino a la ciudad se podía ver un auto conducir a toda velocidad; el auto dónde Clarisse se llevó a mi hija.

¿Sabía perfectamente la ubicación de la mansión?

El auto sigue avanzando con rapidez mientras Jonny adelanta el video cada dos por tres hasta que finalmente llega al minuto veinticinco y el vehículo se detiene. Ella no baja se queda allí dentro alrededor de quince minutos cuando un segundo auto aparece en escena; es pequeño en comparación con la camioneta, es un Audi y de él baja un hombre.

La puerta del piloto de la camioneta se abre y Clarisse sale de ella mirando al hombre con desconfianza, se acerca a él a paso lento y el chico rubio de pelo totalmente lacio le tiende lo que parece ser un celular. Ella tomá el teléfono entre sus manos y lo lleva a su oreja, unos segundos dura con el teléfono pegado allí hasta que finalmente asiente y regresa el celular al hombre.

No Puedes Escapar De Mí.©Where stories live. Discover now