Sonata De Invierno [Larry Stylinson] - TERMINADA [En Edición]

CAPÍTULO 31

...llego yo publicando dos capítulo en uno? 🤭 Gracias por leer la historia.
Comenten y voten porfa 💕

><><><><><><><><><><><><><

Edmond no pudo dormir ni un minuto en toda la noche, estaba pensativo por la actitud de su madre, intentaba pensar y encontrar algún motivo por el cual ella podría actuar de esa forma. Pero también estaba pensando en Louis, no sabía nada de él desde que lo había dejado en su departamento en Londres.

Ya que ni siquiera podía dormir, se levantó de la cama a las seis de la mañana y entró a tomar una prolongada ducha para quitarse todo el estrés que estaba sintiendo. Pidió que le llevaran el desayuno a su habitación y se sentó a ver televisión.

Vio su reloj y faltaban más o menos diez minutos para las ocho y media de la mañana, a esa hora debía ir a trabajar y también decidió que a esa hora llamaría a Louis para averiguar cómo estaba y cómo le había ido con su madre y Eleanor.

Se acercó al balcón y abrió las cortinas que cubrían las ventanas de éste, abrió la puerta y cerró los ojos al respirar aire fresco. Era un día muy hermoso, estaba soleado y nevaba un poco al mismo tiempo; miró hacia abajo y sonrió al verlo, Louis estaba allí.

Rápidamente tomó su abrigo y bajó en el ascensor, salió del hotel y fue en dirección hacia donde lo había visto caminando. Se fijó al rededor y volvió a verlo a lo lejos, respiró aliviado de que Louis en verdad haya vuelto, fue tras él hasta casi alcanzarlo; se mantuvo unos diez pasos detrás de Louis.

Él iba caminando distraído, observaba su sombra en la nieve y la iba pisando. Caminaba sin rumbo y Edmond lo seguía. Llegaron a un pequeño puente de madera, Louis lo cruzó primero y después Edmond hizo lo mismo al mismo tiempo que caminaba sobre las huellas que iba dejando Louis. Una de las maderas del puente sonó y Louis volteó, ambos se detuvieron.

-Creí que quizá no vendrías, todo está bien?

-Sí, así es –le dijo Louis sonriendo; mintió para que Edmond no se preocupe por él, pero su sonrisa era sincera porque estaba feliz de verlo.

Edmond terminó de cruzar el puente y se acercó a él, sacó la mano del bolsillo de su abrigó y se la tendió a Louis, él la tomó y comenzaron a caminar por la nieve juntos tomados de la mano.

Los siguientes días, ambos pasaban todo su tiempo juntos, cuando no tenían que trabajar salían a pasear o a jugar en la nieve, se divertían mucho y se olvidaban de lo que sea que pasaba alrededor de ellos.

-Atrápala! –dijo Edmond lanzando una bola de nieve después de que tuvieron una guerra de bolas de nieve.

-Lo hice! –celebró Louis al atraparla- ahora tú! –se inclinó para aumentar un poco de nieve a la bola y la lanzó.

Por atraparla Edmond corrió en reversa y cayó al suelo de espaldas riendo, se levantó y armó otra bola de nieve; se acercó un poco a Louis para que la distancia se acorte.

-Oye Lou! Aquí hay algo para ti!, quieres verlo? –Louis asintió sonriente- si? Es todo tuyo –la lanzó y Louis la atrapó- ahora córtala –le indicó haciendo señas con la mano.

Louis pasó el dorso de la mano sobre la bola de nieve y la partió por la mitad, dentro había un collar, lo levantó y éste tenía un dije con forma de estrella, Edmond se acercó a él y tomó el collar.

-Es Polaris –le dijo sonriendo, se paró detrás de Louis y se lo puso.

Un par de días después, Edmond y Louis fueron a almorzar al pueblo que estaba cerca del campo de esquí, en una tienda Louis encontró estrellas fluorescentes, compró unas cuantas de diferentes tamaños.