Capítulo 50

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AVISO: CONTENIDO SEXUAL +18
                  
                       HAYDEN

Llegamos a casa.

Eisah estaba hablándome de lo sorprendida que estaba de Cirius. No tenía idea de que era tan inteligente, divertido y rico.

Mientras subíamos al ático nos reíamos de Maskini. Y su encantadora forma de decirnos que podíamos trabajar.

Astaryam se acercó a Axael.

Vi su cuerpo. Unas cosquillas tentadoras se ubicaron en mi estómago.

—¿Qué tal la noche? Por lo que oí en el trayecto hacia aquí a alguien le dieron una dosis de pene, directo a la vena.

Eisah colocó sus manos en las caderas.
—Y no imaginas lo bien puesta que la dejó.

Aclaré mi garganta para acabar con la discusión.

Axael no estaba celoso, ni molesto por eso, sólo estaba encaprichado con Eisah. La veía como un juguete, estaba emputecido porque sabía que podían quitársela.

Y mi amiga no era muy sentimental con él tampoco. Se usaban mutuamente. Eran mi Chernóbil favorito.

Pero no podía meterme en eso. Era algo de ellos dos, porque muchas veces los había oído follar a escondidas. Estaban locos.

—¿Cómo lo pasaste hermano?

Astaryam se sentó en la cama y echó hacia atrás.
—Bien. Lo disfruté bastante.

Lo miré de inmediato.

—¿Usaste mi pene con hayden? Hay tensión sexual.

Solté un suspiro. Eisah se estiró un poco y acomodó las pulseras en sus muñecas. Estaba lista para cambiarlos de cuerpo.

—Eres un cerdo. Te lo digo enserio.-le respondí.

—¡Ay, qué agresiva! Yo me lavé hasta el último rincón de carne que tenía. Le entregué la 4x4 lista para usarse.

Astaryam arrugó su nariz al oír eso.
—Si hubiese tenido sexo con ella, técnicamente serias tú el que la folla porque es tu jodida esper... ¡Ya!-grité interrumpiendo.—...El que quedaría en ella, no el mío.

Le hice un ademán a Eisah para que lo hiciera rápido.

Ella murmuró las palabras otra vez y luego pasó las manos por sobre los hermanos. Primero cayó Ax hacia atrás, luego esperé a Astaryam.

Nadie se dió cuenta, pero yo lo noté.

El chico de ojos celestes movió sus pies por última vez antes de que se durmiera. Cerré mis ojos ante la imagen.

Realmente esto le dolía.

Me limpié una lágrima pequeña que bajó por mi mejilla y disimulé mi preocupación.

La cara de Ax fue la primera en reaccionar. Él se levantó mientras refregaba su nariz.
—Eso de las pelotas es mentira. Puedo jurar que las mías tienen mejor aspecto.

Luego Astaryam abrió los ojos. Se tomó la cabeza unos segundos hasta que dijo:
—¿Por qué estuviste desnudo toda la tarde?

—No podía moverme, me transpiraba todo el cuerpo. Fue difícil no quitarme algunas prendas de ropa.

Su hermano solo se cubrió con otra frazada. Hubo un silencio incómodo, todos notamos el drástico cambio de humor de Astaryam.

—Bueno, iremos a dormir. Descansen.–habló mi amiga.

ASTARYAM. [EDITANDO]Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ