Capítulo 45

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                                 HAYDEN

Pasaron muchos días después de esa vez en el ático. Sólo veía cómo salía el sol y luego se escondía, el tiempo parecía pasar de forma normal...yo me quedaba atrás.

El invierno ya estaba muy cerca, el vidrio estaba húmedo. Llovería pronto.

Estaba sentada en las escaleras, tenía una buena vista del bosque.

Extrañaba ése lago que estaba cerca de nuestra antigua casa en Canadá. Aunque eramos buenos estando en países como Estados Unidos, Australia, incluso Londres. Siempre elegiríamos la tranquilidad de ciudades latinas.

Después de todo yo había nacido aquí.

Más que un lugar en especifico, extrañaba los antiguos años de Rock and roll. Sexo, sudor, música y amor. Cuando recuerdo los 80s y 90s el corazón se me llena de angustia.

Todo era tan divertido ahí.

Aún recuerdo cuando Astaryam me enseñaba a bailar. Yo adoraba la música, podía tocarla, cantarla e incluso componerla...pero bailarla era otra cosa.

El chico de ojos celestes era un jodido ser tan sensual en esos años, el cabello húmedo peinado hacia atrás. Sus rulos pegados a sus orejas, esa sonrisa con dientes perfectos y la chaqueta negra de cuero que adoraba.

Siempre olía a cigarrillos, ahora ya no fumaba por no tener tiempo.

En los años 80 lo que más tenías era tiempo. Salías a los cafés, te comprabas un helado y te sentabas a comerlo en una plaza. Oías la música rock tan fuerte en los paralantes.

Todos los chicos en un grupo observando a otro grupo de chicas bonitas, ellas maquillando sus labios de un rojo vivo mientras le guiñaban el ojo.

Gente bailando al medio de el estacionamiento sin importarle lo ridículo que podía ser.

Elvis, el dios de todos los adolescentes.

Amor en todo el aire.

Uno de los momentos más lindos que recuerdo es cuando Astaryam me enseñaba a bailar. Era un ladrón, bailarín, músico... Y era muy bueno en el sexo.

Él podía hacer lo que fuera, era un hombre completo. Lo que le preguntabas él lo sabía.

Sólo le faltaba tener paciencia.

Y ser genuinamente bueno.

¿Tienes dos pies izquierdos? Porque no puedo creer que no puedas llevar un ritmo tan fácil.

Solté un suspiro rabioso. Aparté un mechón de mi cabello y lo coloqué detrás de mi oreja.

Estoy segura que estos dos pies izquierdos quedarán muy bien metidos en tu culo, no me vuelvas a gritar.

Me colocó ambas manos en la cintura, movió mi cuerpo como si fuese una jalea.

ASTARYAM. [EDITANDO]Where stories live. Discover now