Aclaraciones:
💟La historia cuenta con dos protagonistas hombres, por lo que si no te gustan este tipo de historia te pido amablemente que te retires.
💟 Será un AU, por lo que no tendrá nada relacionado al hilo de la serie.
💟 Contará con escenas...
-Hola cariño-saludó Derek a su esposo con un beso cariñoso- ¿Qué haces aquí? -preguntó extrañado al verlo entrar a su oficina.
-He venido a secuestrarte -respondió divertido el castaño.
-¿Ah sí? ¿Y se puede saber a dónde va a llevarme, señor secuestrador? -cuestionó Derek en el mismo tono, siguiéndole el juego.
-A comer juntos, no es nada sano que estés todo el día en la oficina -lo acusó señalándole con el dedo índice-O dime, ¿Acaso hay algo mejor que pasar tus ratos libres conmigo? -interrogó jugando con los dedos del azabache.
-Por supuesto que no, mi amor -contestó seguro besándole en la mente.
-Entonces andando, considérese oficialmente secuestrado Sr. Hale -dijo divertido a la par que lo guiaba fuera de la oficina.
En cuanto llegaron al estacionamiento de la empresa, Derek se palpó los bolsillos del pantalón en busca de las llaves del Camaro, abrió los ojos asustado al ver que no estaban.
-¿Está buscando esto, Sr. Hale? -preguntó Stiles con una sonrisa pícara, mostrando las llaves en su mano izquierda- No, no, ni lo piense Sr. Hale, el secuestrado es usted por lo tanto, yo conduzco -justificó abriéndole la puerta al mayor, quien arqueó una ceja divertido por la situación- Vamos Sr. Hale, no se haga del rogar cuando los dos sabemos que le encanta que lo esté secuestrando -aseguró guiñándole un ojo.
-Eres increíble, Stiles -fue todo lo que contestó y finalmente subió al auto.
-¡Vamos a disfrutar esto, Der! -exclamó Stiles tomando asiento en el lugar del piloto, por toda respuesta Derek le robó dos besos: Uno en la mejilla y otro en los labios- ¿Y a qué vino eso? -preguntó un tanto nervioso y sonrojado.
-A que te ves guapísimo con esa bella sonrisa pintada en tu bonito rostro y esas gafas de sol te hacen lucir irresistible -respondió Derek con los sentimientos a flor de piel.
-Va... Vaya, gra... Gracias Derek -fue todo lo que dijo y se dedicó únicamente a conducir el resto del camino.
Puede que Stiles haya mejorado bastante gracias a la terapia que había recibido a lo largo de los últimos meses, sin embargo, aún no sabía cómo reaccionar o qué decir cada vez que Derek le hacía tan bellos comentarios como esos. Su esposo siempre sido había tan transparente con sus sentimientos prácticamente desde que se habían conocido, no le importaba nada de lo que demás pudieran decir y decidía dejar su alma al desnudo y eso causaba conflicto en Stiles, quien estaba acostumbrado a ocultar sus emociones consecuencia de las pésimas circunstancias que había vivido durante su no tan larga vida.
-Bien pequeño, todo estuvo delicioso pero creo que es ya hora de volver a la oficina -dijo Derek limpiándose la boca con una servilleta en cuanto terminaron de comer- ¿Podrías prestarme las llaves, para que yo conduzca esta vez? -preguntó extendiendo la mano a lo que Stiles le dio un manotazo simulando que le había entregado las llaves pero, al momento de que Derek abrió su mano no había nada en ella, causándole que riera divertido, le encantaba horrores este nuevo Stiles tan bromista y natural.
-La respuesta es no Sr. Hale -negó Stiles- Dígame usted ¿En qué momento dije que iba a regresar a la oficina el día de hoy? -preguntó sonriente tomando la mano de Derek con la suya, entrelazando sus dedos- Usted será sólo mío el día de hoy, recuerde que está secuestrado y yo, como su secuestrador en turno, decido cuando se acaba todo esto -sentenció serio aunque el brillo de sus ojos no desaparecía.
-De acuerdo, usted manda entonces, haga lo que crea conveniente Sr. Stiles -contestó complacido, besando el dorso de la mano del castaño.
-No hacía falta que me diera su permiso Sr. Hale -dijo a cambio.
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-¿Y bien? ¿Qué tiene que decir al respecto, Sr. Hale? - preguntó Stiles abriéndole la puerta del Camaro a Derek en cuanto llegaron a casa, después de una más que excelente tarde pasada entre los dos.
-Que ha sido un placer haber sido secuestrado por usted, Sr. Stiles, espero que lo haga más seguido -contestó robándole un beso que, para su sorpresa, Stiles correspondió de inmediato.
Aquel beso no era un simple pico como los que compartían regularmente, aquel beso resultó ser mucho más intenso y pasional, brazos en el cuello y en la cintura del otro, jadeos y respiración entrecortada fueron el resultado final.
-Tomaré en cuenta su petición, Sr. Hale -fue toda la respuesta de Stiles, guiñándole un ojo y conduciéndolo hacia el interior de la casa.
-Voy a darme un baño, cariño -musitó Derek dirigiéndose hacia su habitación, posteriormente Stiles hizo lo mismo.
-¿Sabes? Ya mero va a ser tu cumpleaños -comentó Derek.
Después de que los dos se ducharan (por separado, obviamente) se encontraban recostados en su cama, la cabeza de Derek reposaba en el pecho de Stiles quien se dedicaba a darle tiernas caricias en su cabello; el mayor se había vuelto un completo adicto a los mimos que Stiles le daba y no tenía reparo alguno en admitirlo en voz alta; porque, aunque su esposo no correspondiera sus sentimientos, Derek era capaz de percibir cariño a través de todos esos gestos.
-Sí, ya falta poco tiempo -suspiró- Aunque es un día como cualquier otro, nunca me ha gustado celebrarlo en condiciones, ese día es donde me siento más triste y culpable que nunca porque también es el aniversario de la muerte de mi madre, ese día es donde papá toma más que nunca y me trata peor que otros días -su tono se volvió cada vez más bajito y triste al recordar ese detalle.
-¿De.. ¿De verdad? -preguntó Derek sin saber qué decir en concreto-Se me hace muy raro pensar en eso, mi familia siempre ha hecho lo posible por celebrar a lo grande mi cumpleaños y también el de Cora y Laura, hacen todo lo que esté en su manos para que ese día resulte ser increíble -comentó Derek tratando de desviar un poco el tema y que Stiles dejara de sentirse tan mal.
-Suena muy bonito Der -contestó mirándole a los ojos- Si te soy sincero, siempre he deseado tener una fiesta sorpresa el día de mi cumpleaños -murmuró con aire soñador- Nunca se lo había comentado a nadie tal vez por eso no se ha vuelto realidad, o no sé quizás sea porque no merezco algo así -suspiró.
-No digas eso mi amor, tú más que nadie mereces todo lo mejor que hay en este mundo -repuso Derek totalmente abatido y destrozado al ver a su esposo de esa manera, es que, cómo quisiera encerrarlo en una burbuja o llevarlo a un mundo ideal donde no sufriera más dolor.
Por otro lado, tomó nota del dato que le dio Stiles, tal vez más pronto que tarde su deseo de una fiesta sorpresa se volvería realidad.
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Bien, he aquí otro capítulo.
¿Qué les está pareciendo?
Gracias nuevamente por todos sus bellos comentarios, sus votos y el cariño que han mostrado por esta historia.
