037| En casa.

2.1K 157 33
                                    


[...]

Después de que Yoongi y yo nos convirtiéramos en pareja, decidimos volver a casa, no sin antes subirnos a todas las atracciones de la feria. Al menos yo, pues Yoongi veía con una cara de horror y miedo las montañas rusas, llegué muy cansada pero a la vez feliz por todo lo que ocurrió.

Llegamos al departamento a las 11pm.

—Yoongi, me iré a dormir, no te había dicho pero mañana en la tarde tal vez vendrá mi mamá de visita.—

—Está bien. Descansa.—me abrazó y me dio un corto beso.

—Igual tú.—decía mientras me encaminaba a mi habitación y me despedía una última vez para luego cerrar mi puerta, recargarme en este y sonreír como idiota.

Me quité todo mi oufit que me había tardado más de treinta minutos en escogerlo, y me puse una pijama acogedora. Me acobijé y cerré los ojos.

Pero no duró mucho mi intento de dormir, cuando escuché cómo abrían la puerta de mi habitación, para luego recostarse conmigo, abrazándome por la cintura y apegándome a su cuerpo.

—¿Puedo dormir contigo?—me susurró al oído.

Asentí levemente y él se metió dentro de las cobijas, para luego cobijarnos a ambos. Volteé a verlo y ya tenía los ojos cerrados, seguía con sus brazos en mi cintura y solo sonreí y le dije,

—Descansa, Yoongi.—lo último lo dije con una sonrisa traviesa para después darle un corto beso y voltearme.

—Descansa, TN.—me dijo mi nombre en un susurro cerca de mi oído, erizando mi piel.

Me apegué más a él, sonreí y cerré mis ojos con miedo a que todo esto fuera un sueño, que nunca quisiera terminar. Fueron tantos pensamientos los que invadían mi cabeza cuando por fin caí profundamente dormida.

¿A caso estábamos avanzando muy rápido?

[...]

Domingo por la mañana.

Desperté y tenía a Yoongi al lado. ¿El sueño de toda chica? Tal vez.

—Tendré que acostumbrarme a verte al lado mío al despertar.—dije para mi misma en voz baja y sonreí al verlo todavía "dormido".

—Te acostumbraras rápido.—me dijo con sus ojos aún cerrados, y a la vez intentando abrirlos por la luz de los rayos solares que entraban por la ventana que hacía unos minutos había abierto yo la cortina para que la luz despertara a Yoongi.

—Buenas días bello durmiente.—reí por el sobrenombre, lo tomé de las mejillas levemente y le besé su frente un poco despejado por su fino cabello color negro.

Hizo un puchero y por fin abrió los ojos.

Esos malditos ojos que me enamoran cada vez más.

No entendí el por qué de su puchero y solo reí.

—Yo lo quería aquí.—dijo señalando sus labios, aún haciendo el puchero.

—Bien.—dije riendo mientras tomaba sus mejillas.

Estaba por darle un beso, cuando el ahora toma el control. Me apega a él, tomándome con una mano en mi nuca y la otra en mi cintura, mientras él se sienta en el respaldo de la cama. Cuando logra apegarme a él me siento sobre su regazo, por un momento siento su miembro sobre mi feminidad y ambos soltamos un jadeo casi inaudible por el repentino acto.

—Vaya dualidad que te cargas.—ambos reímos y seguimos con el beso.

No quería "hacerlo" el día que mi mamá vendrá a casa, sólo decidí provocarlo un poco. Así que comencé a mover mi cadera lentamente mientras él besaba mis labios y de vez en cuando bajaba a mi debilidad: el cuello.

Mientras Yoongi me besaba y yo a él, cada vez con más fuerza frotaba mi cadera contra su miembro, noté que ya estaba muy "prendido el asunto", lo cual hacía que mis hormonas despertaran. Me tomó de la cadera para ejercer más presión entre nuestros sexos.

—Yoon- intentaba negarme, pero era casi inútil pues el seguía besándome.—Mi madre vendrá hoy. No quiero perder la virginidad hoy.—alcé un poco más mi tono de voz y lo tomé de los hombros para separarlo del beso.

Al decirle que era virgen, pude ver su expresión de sorpresa que también se había plasmado en mi rostro por la repentina confesión, a los pocos segundos me miró sorprendido pero luego sonrió.

—Tranquila, lo haremos cuando tú quieras, sólo que me moría por probar tus labios otro día más.—dijo tímido y me dió otro beso en el cual ambos sonreímos y después me separé.

—Me daré una ducha.—dije como si nada, y me paré de la cama, dejándolo con una gran erección en su amiguito.

—Yo me baño contigo.—mordió su labio lentamente y me mostró una mirada muy pícara, haciéndome reír a carcajadas para después yo responderle con un rotundo,

—No.—paré de reír y ahora fue él el que rió con cierto dolor por aquella negación de mi parte, me fui al baño para después cerrar la puerta con llave.

[...]

Salí de la ducha, me puse mis respectivas toallas, una en el cabello y otra en el cuerpo.

—¡Yoongi!—gritaba para avisarle que era su turno mientras cerraba la puerta de mi habitación al no oír ninguna respuesta.

Me giré y ahí estaba él aun sentado en mi cama, pero ahora sin camisa.

—Maldita sea. ¡Ponte algo o vete a bañar!—exclamaba mientras me tapaba mis inocentes ojos.

—Cómo si nunca me hubieses visto sin camiseta.—se burlaba de mí.

—Pues s-sí. ¡Pero no es el momento en donde te tengo que ver sin camisa!—gritaba tapándome los ojos, mientras Yoongi solo reía.

Quité mis manos de mi rostro para abrir lentamente mis ojos, veía cómo se iba acercando a mi.

—¡Yoongi basta!—gritaba mientras reía nerviosa, pues el seguía aún sin camisa y se seguía acercando cada vez más.

[...]

Mientras TN gritaba y le rogaba a Yoongi que se pusiera una camisa y saliera de su cuarto, ambos estaban obviamente jugando, pues TN disfrutaba de la gran vista, y a Yoongi le encantaba la manera en que TN le rogaba.

Pero en cómo todas las historias, el drama llegó, literalmente. La madre de TN había llegado más temprano de lo normal, y como ella tenía una copia de las llaves del departamento entró sin consentimiento alguno de lo que se encontraría detrás de esa puerta.

Al comienzo creyó que su hija no estaba en casa, la señora se extrañó un poco pues vió algunos platos en el lavamanos. Pero la situación para ella se tornó más rara cuando comenzaba a escuchar súplicas de su hija como:

—¡Ya!—se escuchaban gritos provenientes de la habitación de TN. 

La madre de TN se alarmó y corrió por el corto pasillo de ambas habitaciones abrió la primera habitación se encontró a nadie más que a...

[...]

Fin del Episodio 37

—BZ🍜

Recuéstate sobre mi hombro || 𝒀𝒐𝒐𝒏𝒈𝒊 𝒚 𝑻𝑵  [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora