Poséeme ✧ KookV.

✧c.-064

N/A: Youngkyun va a servir mucho de ayuda, sólo digo eso para todo aquel que lo odie xD

Cap dedicado a MafeOrtiz17 ♡♡

Hoy os recomiendo 'Strip that down' de mi hijo (tengo como mil hijos, soy una maldita coneja lmao) Liam Payne, que ya no está en uandi, ahora es free (no lo digo yo, lo dice la canción) y haciendo arte, que es lo único que no cambia.

[...]

La jornada laboral se le había pasado volando; entre conocer todos los lugares de la sede, entablar una conversación con sus empleados para familiarizarse y saber dónde quedaban las oficinas de cada uno, TaeHyung conoció su despacho, lo cual le pareció fascinante, porque era prácticamente igual al de Washington, sólo que más amplio y con estanterías grandes en las que podría meter todos sus libros de administración, contabilidad y sus preciados atlas que tanto le había costado tener de vuelta con él. Menos mal que tenía a Marie.

Se había encargado de decorarlo de forma sencilla, como a él le gustaba. No demasiado sobrecargado pero que quedase vistoso, y por el momento, marchaba genial. Incluso se podría decir que tenía un pequeño talento oculto como diseñador de interiores, pero tampoco quería hablar sobre ello demasiado alto, por si acaso se gafaba.

Colocando el último atlas en la estantería, TaeHyung sonrió. Perfecto. Ahora sólo necesitaba hacerse con un archivador considerable en el que meter todos los contratos ya firmados y en curso, para tenerlos bien almacenados, porque había salido tan rápido de la sede en Washington que ni si quiera se había molestado en agarrarlo. Pero, tampoco era necesario, adquiriría otro cualquiera y como si nada.

Cuantas menos cosas en su poder que pudieran recordarle a dicho hombre con cabello negro, ojos oscuros y una jodida pantera tatuada en la piel, mejor.

Suspiró, frotándose la frente y relamiéndose los labios, antes de moverse levemente hacia delante para alinear uno de los marcos de fotos que había colocado, con la imagen de un bebé Yeontan en ella. Apretó los labios, acariciando con el índice el pequeño rostro de su bebé y sintiendo un hueco en su pecho.

En menos de dos semanas todo había dado un jodido giro de ciento ochenta grados, y había sido tan rápido que se mareó en el instante.

Primero, el reencuentro con Youngkyun, la confesión de Jungkook que acabó con su relación, el nacimiento de los gemelos de Sasha, haber aceptado la oferta de dirigir la sede en California y marcharse automáticamente de allí con Callie. Había dejado absolutamente todo atrás. A Yeontan, los cachorros, su antigua empresa, Marie, su casa, Sasha, los gemelos, los recuerdos que tenía con Jungkook. Todo.

Y aquello le pesaba gradualmente en el corazón, el hecho de haber caído por alguien que ya le hirió una vez, que la historia volviese a repetirse y salir huyendo por segunda vez. Se sentía cansado, incluso patético, pero también roto y vacío.

Extrañaba a Jungkook, sus besos, sus cenas, las noches con él, sus abrazos, su sonrisa, aquellos ojos que lo miraban con tanto afecto que conseguían derretirlo. Extrañaba cuando decía quererlo luego del sexo y dormían abrazados. Maldita sea, se ahogaba sólo con recordarlo todo.

Negó con la cabeza, queriendo sacar todas esas imágenes de su mente. ¿Tan difícil le supondría olvidarlo? Porque trataba de conseguirlo con todas sus fuerzas, pero al momento de llegar la noche, y en la soledad de su habitación, era cuando más lo extrañaba.

Un par de golpecitos en la puerta hicieron que TaeHyung se girase, admirando la figura de Callie detrás del cristal, que saludaba alegremente, y movió la mano, indicándole que podía pasar. La rubia se adentró, cerrando la puerta y mostrándole una sonrisa gigante. TaeHyung podía notar la alegría en su amiga, y eso le hacía feliz.