¡¿Yo en The Maze Runner?!

Capitulo 57- "Desesperación y recuerdos"

Newt:

-Ya está, me largo de aquí-me levanté de la cama de un salto.

-Nada de eso-Minho se interpuso en mi camino, con los brazos cruzados- Todos estamos preocupados, pero no podemos salir así de la nada.

-¿Y que haremos?¿sentarnos aquí sin hacer nada cuando puede que Amy este en problemas?

-Y Arlet- señaló Sartén en voz baja.
-Si, si, ella también.
-Dentro de poco vendrán los guardias a abrir la puerta para que vayamos a desayunar. La buscaremos en el comedor y si no está ahí... Bueno, entonces te dejaré hacer lo que quieras–habló Minho sorprendentemente tranquilo.

Genial, hasta Minho había conseguido guardar la calma. Me estaba comportando como un idiota, se suponía que yo era el líder y  no podía dejar que mis nervios se alterasen por algo así, debía tranquilizarme.

Pase la mirada por la habitación, intentando distraerme un poco. Algunos apenas habían conseguido cerrar los ojos y otros seguían dando vueltas en la cama intentando conciliar el sueño. Habíamos pasado la noche intentando convencernos de que la desaparición de Amy y Arlet se trataba simplemente de un error y que al día siguiente estarían en el comedor junto Teresa, a punto de contarnos su gran "aventura". Ninguno parecía haber dormido lo suficiente, llevaban bastante tiempo con la rubia como para cogerle demasiado cariño. Era imposible no preocuparse. Después de tantas cosas ya era difícil confiar en que todo saldría bien. 

No paso mucho tiempo hasta que se oyeron voces por los pasillos, al parecer de guardias.

–¡Busquen bien, tienen que estar por ahí!

Todos intercambiamos una mirada, confundidos y a la vez un poco preocupados, esperando que todo ese jaleo  no tuviera nada que ver con las chicas.

–¿Qué está pasando?–preguntó Sartén.

Nadie dijo nada. Nos limitamos a estar en silencio para escuchar lo que decían los guardias.

–Las puertas están cerradas, a menos que hayan conseguido burlar la seguridad de las puertas eso dos tienen que estar por aquí escondidos–opinó uno de ellos.

–Estos chicos son muy listos Omar, no olvidemos fueron educados aquí. Probablemente uno de ellos sepa más de lo que todos nosotros llegaremos a saber nunca, no podemos fiarnos–habló otro. Me lo podía imaginar hasta con el ceño fruncido. No parecíamos caerle demasiado bien.

–Es cierto. Para mi que es alguno de estos, ¿Estás seguro de que nadie ha salido de ninguna habitación?–preguntó otro de ellos.

–Nadie, todo ha estado muy tranquilo, vinieron incluso los del grupo B–reconocí la voz de uno de ellos. Era la de uno de los guardias   encargado de vigilar los pasillos a las noches, varias veces lo habíamos oido hablar con algunos de sus compañeros, e incluso, para nuestro pesar,  cantar canciones de Beyoncé.

–Parece que alguien se ha escapado o algo por el estilo–susurró Thomas con el ceño fruncido.

–Shh–lo calló Minho, bastante concentrado en la conversación de los hombres.

–Algunos guardias han buscado también el las habitaciones de las chicas, pero es bastante improbable, yo mismo los vi venir aquí.

–Joe, ¿Estás seguro?

–Completamente.

–Bien, pues no pueden andar muy lejos; hay que seguir buscando.

Las botas de estos resonaron por el pasillo, cada vez más rápido, indicando que habían empezado a correr. Todo volvió al completo silencio.