Capitulo 35- Situaciones un tanto fuera de lugar

2.1K 192 115
                                    

Las palabras de Lyla aún seguían en mi cabeza. No entendía nada, de hecho, mi cerebro estaba a punto de explotar, ¿De donde era esta chica? ¿Como sabía todo eso? ¿Le habría pasado lo mismo que a mi...? Todo era demasiado confuso.

—¿Estás bien linda?—me preguntó Newt, al ver que no había tocado nada de mi comida.

—Si... es solo que estoy un poco...no me siento muy bien, no lo se...
—¿Me tengo que preocupar?
—No, no importa—le sonreí.

Era de mañana, yo no había podido dormir después de haber escuchado el sueño de Lyla, así que nos fuimos pronto a desayunar, aún faltaban los demás larchos. Me había dado lastima despertar al pobre de Newt, pero a pesar de que le dije que siguiera durmiendo él insistió en que si yo no dormía el tampoco lo haría, ¡Era un amor!

—¿Como es que ya están aquí?

Alby se sentó a nuestro lado.
—Amy no podía dormir, por eso preferimos venir a desayunar pronto—respondió mi rubius.

—Bueno, pues, Newt, aún no estás en condición de trabajar, así que será mejor que te quedes en la cama, tal vez mañana si te encuentras mejor puedas volver.

—Pero me aburro en la cama...—se quejó Newt, como un niño.

—Bueno, pues puedes estar sentado en algún sitio, pero tienes que estar quieto, no te quiero ver moviéndote y mucho menos trabajando ¿me entendiste?

El rubio bufó para luego asentir  y hacer que en la cara de Alby apareciera una sonrisa de superioridad.

En unos minutos los demás fueron llegando, muchos corrían y se tiraban al piso para poder sentarse en un buen sitio y otros... otros simplemente caminaban como personas más o menos civilizadas. De hecho de todos los larchos, este grupo se veía formado por tres chicos... Solo tres... Los pocos modales que les quedaba estaba claro que ya se habían ido a la mierda... pero aún así los quería mucho.

La única a la que no veía era a Lyla, tal vez aún necesitaba un poco de tiempo para acostumbrarse a los horarios del área o tal vez simplemente al haber tenido un mal sueño, no había dormido bien.

—¿En que piensas tanto?—me dijo el chino sentándose en frente mío como hacía siempre—Me parece haber visto salir humo de esa cabecita.

Le sonreí en modo de saludo.
—No es nada, pero, ¿alguien ha visto a Lyla?
—Yo no, ¿porque no le preguntas a Teresa? se que soy el más listo y el que más vale de aquí, pero ella es su compañera de cabaña.

—¿Pero donde está Teresa?
—Desde anoche no la veo—dijo este comiendo un poco de pan.
—¿Desde anoche?—pregunté un poco confundida—¿Como que desde anoche?

Este me miró con el ceño fruncido, al parecer sin entender mi pregunta, pero segundos después ya se encontraba rojo. Ya había entendido.

—No lo mal interpretes... L-a última vez que la vi fue c-cuando todos nos fuimos a n-nuestras Cabañas—habló un poco rápido.

—¿Porque estás nervioso?—pregunté sonriendo picara, ahora el muy maldito sabría lo que era sentirse así, me había hecho muchas iguales.

—No estoy nervioso, ¿Porque crees que estoy nervioso? ¡No estoy raro, aquí tú eres la rara! ¿Has visto a Chuck? Creo que se ha perdido voy a buscarlo—habló rápidamente. Sinceramente se me había hecho bastante difícil entenderle.
Minho hizo ademán de levantarse, aún sonrojado.

—Pero si estoy aquí.

La voz de Chuck hizo que Minho diera un salto del susto y se diera con el banco en un pie. Al parecer ni siquiera sé había dado cuenta de que el pobre Chuck había llegado más antes que él.

¡¿Yo en The Maze Runner?!Where stories live. Discover now