¡¿Yo en The Maze Runner?!

Capítulo 86- Personas diferentes

Piraña 

Así la había llamado Chuck. Así se había dirigido hacia ella con toda la confianza del mundo y como si la conociera de toda la vida.

A mi lado Arlet se encontraba tensa, mirando la escena que se estaba desarrollando ante nosotras. Angely sonreía a Chuck, escuchando lo que fuera que el más joven le estuviera diciendo, y de vez en cuando nos miraba a nosotras, como si algo le incomodara.

Por la  expresión de asombro y desconcierto que tenía Arlet en el rostro, era evidente que no habían llegado a hablar sobre el trabajo o el puesto que ejercía su novia en el campamento. Y teniendo en cuenta todos los vitoreos y las menciones que recibía esta todos los días, estaba claro de que no se trataba de alguien común.

La caricia que Angely o Piraña, ya no sabía muy bien cómo referirme a ella, le dio a Chuck en las mejillas hizo  que un ligero sonrojo apareciera en el rostro de este. Había sido un gesto simple, como cualquiera que le haces a tu primo o hermano menor, pero estaba claro que para Chuck había sido  algo más. De pronto pude sentir la incomodidad de Arlet.

Unos segundos más tarde Chuck pareció reparar en nosotras y nos saludó con un ligero movimiento de  cabeza. Nosotras nos acercamos y de pronto noté lo tensa que parecía Angely.

-Hola Chuck-lo saludé con una media sonrisa. Eché un vistazo al interior de la caja que sostenía, unos cuantos conos fosforescentes, cuerdas y demás objetos que no reconocí. No obstante, todo indicaba que eran para su entrenamiento- ¿Preparándote para entrenar?

Este negó con la cabeza.

-Hoy me han pedido que ayude en su entrenamiento- dijo este.
-¿En el nuestro?-preguntó Arlet de pronto.

Chuck asintió.

-He pedido que envíen al mejor de su grupo y efectivamente han hecho un buen trabajo- comentó Angely, esta vez un poco más seria pero con un tono de voz lo suficientemente dulce para dirigirse al menor-  Por cierto, me contaron lo que hiciste en la ciudad.

La sonrisa de Chuck desapareció y se encogió ligeramente, como si esperase una reprimenda por parte de la rubia. No parecía muy contento de que esta se hubiera enterado.

-Dicen que estuviste genial, felicidades. Pocos niños de tu edad saben moverse así entre cranks-lo felicitó esta para la grata sorpresa de Chuck. Su sonrisa se hizo todavía más grande y yo estuve segura de que la rubia se refería al momento en que Chuck nos ayudó a distraer a los cranks para mientras los demás subíamos a las naves.

-¿Lo has pedido tú?-le preguntó Arlet de repente, lo que hizo que Angely se pusiera seria de inmediato y que Chuck la mirase con algo de extrañeza al notar el tono tan informal con el que le había hablado a su superior. Angely asintió.

-Ya han pasado el periodo básico. Ahora empieza el verdadero entrenamiento y yo estaré al mando de su grupo. 

Ambas la miramos con asombro. Chuck, en cambio, no pareció nada sorprendido. Es más, su emoción me reveló que él ya estaba al tanto de todo.

-¿Tú nos entrenaras?-habló Arlet, haciendo que, una vez más, Chuck se mostrara algo molesto. Seguramente eran pocas las veces que alguien se dirigía a Piraña de esa manera teniendo en cuenta su posición y ,ciertamente, comprendía lo extraño que podía parecer que Arlet, alguien que había llegado hacía solo unas cuantas semanas, hablase con su superior con tanta confianza. 

-Así es. Me dieron la oportunidad y me pareció buena idea-respondió la rubia- Chuck me ayudará, su entrenamiento es avanzado. Además, le vendrá bien para su entrenamiento para las pruebas del EV.