Capítulo 38.

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Connor se llevó a la muy borracha Daisy luego de que dijera que compraría un perro, dejando a las dos embarazadas y a mi persona saludando al grupo.

Louis tiene sus brazos envueltos en mí en este momento, incluso está casi alzándome. Si tuviera que elegir a mi intocable favorito sin duda alguna escogería a Lou, aunque obviamente guardaré esos pensamientos hasta que me encuentre descansando en mi tumba, si llegara a decir tal cosa los demás intocables me tratarían diferente, puede que hasta mi hermano me quitara el habla.

—Te extrañé demasiado—mascullo hundiendo mi rostro en su cuello.

—Yo también, pequeña Hanna.

—Cuidado, no me vayas a quitar a mi hombre—separándome del intocable me acerco a Livana para abrazarnos efusivamente, la extrañé demasiado. Ella me susurra en el oído un—: Tenemos que hablar, por ahí me enteré de un chisme en el que tu eres la protagonista junto a un francés que déjame decirte, está caliente.

—Ni que lo digas, ¡dime que ya te lo comiste!—Amy se acerca junto a Cristine, las tres chicas nos separan del grupo tratando de sacarme información.

—Pues yo creo que si lo hizo... Yo lo haría —la mirada descarada que suelta Cristine hacia Gaston me causa gracia.

—Tranquilas chicas, cuando estemos a solas prometo ponerlas al día... Al igual que ustedes tienen que hacerlo conmigo.

—Queremos los detalles más sucios—dice Amy moviendo sus cejas pícaramente cosa que me impresiona.

—Realmente Bart te dio ese toque de picardía.

Su rostro cae al mencionar el nombre de su novio, quiero preguntar que sucede cuando unos fuertes brazos me rodean desde atrás, el perfume  emana de aquel cuerpo masculino, no ha cambiado a pesar de todos estos años. Bart besa mi mejilla izquierda para luego colocarse junto a mí—con uno de sus brazos atrayéndome a su cuerpo—, regalándome una de sus peculiares sonrisas.

—En estos momentos quiero ser una chica y que me cuentes el chisme completo de Gaston y tú.

—Gracias a Dios que tienes un pene y no una vagina—menciona Amy mordazmente.

Si, algo pasa entre esos dos.

Cristine y Livana sienten la tensión así que me sonríen antes de dirigirse a los demás del grupo dejándome entre la pareja con problemas.

—Amy, ahora no.

—Claro, siempre tiene que ser cuando tú digas.

—Amy...

—Voy a ver a Daisy, hablamos luego Hanna—dice antes de subir las escaleras con rapidez.

Veo como Bart le sigue con la mirada, luego voltea hacia mí embozando una triste sonrisa.

—No quiero ser metiche pero, ¿puedo saber que pasó?

—Peleas de pareja, me imagino que sabes como son—su mirada triste pasa a una divertida. Va a cambiar de tema, lo conozco demasiado bien—. ¿Quién iba a creer que la hermanita menor de Conito tendría un novio ocho años mayor que ella.

—Aún no es mi novio.

—Bueno, según tu hermano el tipo ha estado succionando un poco esos bonitos labios.

—Oh, Bart, cállate—mis mejillas  enrojecen un poco y Bart al ver tal acción se echa a reír atrayendo la atención de los demas intocables.

***
Este capítulo salió demasiado largo por lo que lo dividí en dos. Así que... ¡Hoy también tendrán doble capítulo?

Entonces...¿teorias de por qué Bamy están raros? ¿Felices de ver a los intocables de nuevo?

Advierto que el siguiente capitulo sera algo emotivo y cuchi, así que preparense.

Este capítulo esta dedicado a... Ta ta ta taaaaa... Scar-Real <3 Espero que te haya gustado.

Nos leemos en un ratito :)

P.D. Si encuentran algún error en los nombres me avisan, aun me cuesta escribir sobre tantas personas en un solo capítulo.

 Si encuentran algún error en los nombres me avisan, aun me cuesta escribir sobre tantas personas en un solo capítulo

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Entre campanas de boda| Los Intocables #8Donde viven las historias. Descúbrelo ahora