Capítulo 34.

24.4K 2.3K 515
                                    

—¿Tía Bea?

Vale, es extraño verla, pensé que no lo haría hasta la boda de Sophie. Bea es la hermana de mi madre, la persona con la que vivió Sophie sus últimos años de adolescencia... mi tía. Que reencuentro más bonito, la sobrina más pequeña comiéndose a besos con un tipo mayor que ella.

—Hanna, oh mi Dios, estás preciosa.
Ella se acerca a mí envolviéndome en un fuerte abrazo, yo se lo devuelvo algo tímida.

En mi vida solo ví a mi tía Bea en doce ocasiones, ocho de ellas vía Skype cuando hablaba con Sophie, dos en las que solo tenía tres años y las otras dos cuando tenía seis y nueve años respectivamente. La única conexión que puedo sentir con ella es que era la hermana de mi madre. Más nada.

—¿Por qué no me has ido a visitar? —dice ella en el momento de separarse de mí, luego mira sobre mi hombro frunciendo el ceño—. Aunque puedo tener una explicación sobre eso.

—Hola, preciosa y caliente tía.

Gastón se acerca a ella envolviéndola en un abrazo,  a su vez guiñandome al ver como mi ceja se encuentra perfectamente arqueada.

—Gaston Bonnet, ¿otra vez tratando de robar a una de mis sobrinas?

—A Sophie nunca la robé, pero si hablamos de Hanna... Tal vez desee secuestrarla.

—No diré absolutamente nada, pero quisiera hablar un rato contigo, Hanna. ¿Tienes tiempo?

Quiera decir no, que debo irme porque no quiero pasar tiempo con nadie que tenga que ver con mi familia materna. Pero sé que debo hacerlo, dejar todo atrás y hablar con ella.

—Seguro, solo si no tienes problemas de que Gastón esté con nosotras.

Gaston forma una sonrisa mirando a mi tía con atención quien amablemente acepta que él este presente.

Fuimos a un cafetín y hablamos por horas, sobre mi graduación, lo que pensaba estudiar, donde creía que iba a hacerlo, la boda de Sophie... Y mi relación con Gaston. Hablar con mi tía Bea fue divertido y afortunadamente en ningún momento me hizo sentir incómoda,cosa que agradezco demasiado.

Luego de despedirnos—ya que mi tía tenía que hacer algunas compras en el supermercado—. Gaston y yo seguimos recorriendo el centro comercial con nuestros dedos entrelazados y uno que otro beso robado.

Escucho que alguien grita mi nombre a la distancia cuando nos detenemos fuera de otra librería.  Lo que pienso al escuchar mi nombre ser llamado por otra persona es Vaya Hanna, estás muy solicitada. Gaston se tensa a mi lado cuando voltea a ver de quien proviene la voz, yo lo imito exceptuando que una sonrisa se posa en mis labios.

—¡Fran!

—¡Hola, chica americana!

—Hili, chici imiricini—escucho decir a Gaston por lo bajo pero decido ignorarlo. Aunque al parecer Fran también lo escucha y por ese motivo se sonroja.

Uhm, hola. Soy François Moselle,  un amigo de Hanna— Fran extiende su mano hacia Gaston y éste lo toma con firmeza.

Gastón Bonnet, el novio de Hanna.
Fran lo mira sorprendido para luego hacerlo conmigo. ¿Qué pasa? ¿Por qué me mira de esa manera? Quisiera tener alguna idea de lo que se dijeron pero lo único que pude entender fueron nuestros nombres. Así de mal estoy.

—¿Qué sucede? —decido preguntar.
—¿Tienes novio?

***
Holaaaa!

Es un capítulo corto pero muy jugoso xD

¿Opiniones sobre el capítulo? ¿Dudas? ¿Amenazas de muerte?

Este capítulo está dedicado a @Emily-Perez-01 espero que te guste ❤

Sin más que decir, nos leemos :)

Simy x

Entre campanas de boda| Los Intocables #8Donde viven las historias. Descúbrelo ahora