¿Dónde está el Tártaros cuando lo necesitas?

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POV Percy

Leo se había pasado de la raya, yo también me había molestado con muchos dioses, es decir, todos saben que Ares y yo no tenemos la mejor de las relaciones pero de eso a inundarles la cabaña a sus hijos... No, ni siquiera yo llegaba tan lejos.

Zestia había dicho que hablaría con él, supuestamente era su culpa y aunque no quisiera admitirlo pues sentí culpa de hacerlo, no podía evitar pensar que sí, todo lo que estaba ocurriendo era por ella; tras la guerra habíamos mantenido una vida relativamente tranquila. Pero también comprendía de primera mano lo terrible que podía ser tener el ojo de un dios sobre ti.

- Y eso fue lo que pasó -. Concluyó Hazel, quien había intentado entrar en razones con el ahora "piromaniaco" Leo. El resto del campamento se mantuvo en silencio, en especial Piper a quien se le había prohibido participar de las negociaciones en pro de nuestro amigo pero que no por eso dejaba de lanzar miradas molestas.

- Esta bien, lo dejaremos pasar pero esperamos que estén listos para arreglar nuestra cabaña - Dijo uno de los mayores de la cabaña de Apolo. Will seguía mirando al vacío con el ceño fruncido.

- Por supuesto que sí - Le respondió con una forzada sonrisa, Nyssa. No me veía a un montón de hijos de Hefesto dejando de lado lo que fuera que ellos hicieran todo el día encerrados, arreglando la brillante y cool cabaña del dios del sol.

Suspiré aliviado, no sé qué habría hecho si es que se intentaba armar una persecución al estilo Frankenstein. La cabaña 7 se retiró, el resto de los presentes se disolvió de a poco, hasta que quedamos solo el grupo de amigos de siempre.

- Iré a hablar con Leo - Dijo Piper. Y salió disparada tras Nyssa. No sabía que planeaba pero estaba bastante agotado, ver a alguien resucitar de una forma tan tenebrosa y luego el casi incendio habían drenado mis fuerzas. Solté un bostezo y de inmediato sentí una mano cálida tomando la mía. Me giré para ver a Annabeth, parecía igual de cansada que yo.

- Creo que nos toca descansar - Dije mientras me despedía con la mano libre del grupo.

- Tienes razón, no todos tuvimos un día tranquilo como Jason - Me respondió Frank con un tono entre broma y serio.

- Es cierto, supongo que sigue con Thalía - Mencionó Hazel, todos asentimos. Bostece de nuevo y si media vuelta en dirección a mi cabaña, supongo que después de todo el alboroto a nadie le molestara que comparta una siesta con mi novia.
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POV Piper

Nyssa me ayudaría; todos en el campamento sabíamos que los de la cabaña 9 entraban al búnker todo el tiempo y aunque Leo era el "dueño", por así decirlo, ellos seguro tendrían alguna manera de entrar incluso sin él presente. Después de todo, la cabaña era para todos los hijos de Hefesto, ¿no?

- ¡Hey, chicos! - Grité para llamar su atención, todos dejaron de caminar y esperaron a que les diera alcance. Le indique a Nyssa que me acompañase; Sus hermanos, por otro lado, siguieron su camino.

Los tres caminamos rumbo al búnker.

- Cualquier otro día te diría que no pero supongo que esto es casi una emergencia -. Nyssa me miró con seriedad. - Esto es un secreto de la cabaña 9, no puedes contárselo ni a tu novio. Promételo -.

Por lo menos una vez (Leo Valdez)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora