3. Falling.

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**Ya que en la historia existen muchos clones, dejaré los recordatorios de su aspecto en cada capítulo usando animalitos que, supongo, todos pueden relacionar**

700-K (Luke ♂️🐰) Padre de:

56-K (Rebecca ♀️🐰) y

J-700-K (Jungkook ♂️🐰)

0 (Yunki🐱♂️) esposo de

404-J (Jung🐿️♂️)

Dentro del observatorio, cerca del atardecer en el desierto, belleza divina y los más altos IQ se desperdiciaban

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Dentro del observatorio, cerca del atardecer en el desierto, belleza divina y los más altos IQ se desperdiciaban... en una inminente disputa familiar entre dos rocas inamovibles, quienes no cambiarían su opinión ni estaban dispuestas a escuchar.

Puede sonar absurdo describir clones por separado, pero yo y mi papá no lucíamos exactamente iguales. Con su chaqueta de rockstar, grandes botas negras y camiseta desgastada, siempre impecable, mi papá parecía salido de los 80" de la Era Pasada. Mantenía su cabello corto a los costados, peinado hacia atrás en la parte alta, siempre orgulloso de su mechón blanco; testigo de los extraños diez años en los que Übermensch envejeció... Claro, poseer el aspecto físico de un treintañero, casi cuarentón, pero bien sabroso es digno de alarde.

Yo, como todos los nacidos después del 228 de la Nueva Era, viviría eternamente estancado en los 25. Y no me malentiendan, claro que soy alto y guapo como mi papá ¡Que soy su clon! Misma espalda ancha, cintura estrecha, piel de porcelana y un rostro de "niño bueno" nada compatible con mi carácter, pero me hallaba en la intimidad de mi "observatorio personal"... Con el cabello mojado y mal atado en lo alto como una vieja loca, mi camiseta/pijama holgada y rota, pantalones cortos en el mismo deplorable estado y descalzo... Joder; sí parezcía un vagabundo, salvo por mi intachable higiene. Mas no estaba en condición de poner atención a nuestra presentación personal en ese momento.

La quijada bien marcada, tanto en mí como en mi padre, así como la maldita costumbre de empujar la cara interna de nuestras mejillas con la lengua, eran claras muestras de la tensión en el ambiente.

-Bueno, bueno; si te pregunto a ti, hasta las gallinas importan -objeté tratando de mantener mi posición-. Me pregunto cómo aún no eres vegano... ¡Ah! Lo siento, lo olvidé -hice un puchero burlón-, las lechugas también sienten.

-Me importa cómo tratas a tu hermana -aclaró serio, caminando hacia mí de brazos cruzados. Su mirada inquisitiva parecía escanear mi alma, tragué en seco, era difícil permanecer firme ante él-. Y tu salud mental, que a todas luces no está nada bien.

-No estaba hablando solo -me excusé torpemente, señalando al gato... O donde debía estar el gato. «¡Traidor!», inhalé ofendido ¡mi minino se frotaba amorosamente contra los pies de mi papá!-. ¡Suga!

-Suga también quiere lo mejor para ti.

-¡Agh! No me hables como a un niñito. Si vienes a encararme por lo que le dije a Rebecca piénsalo dos veces ¡Ustedes se meten en mis asuntos! ¡No respetan mi espacio! Quiero vivir solo y en paz, aislado como Shrek en su pantano ¿Es tan difícil de entender?

ÜbermenschWhere stories live. Discover now