CUESTIÓN DE RESISTENCIA | CAMREN G!P [REEDITANDO]

Capitulo 19: Una boda Cabello. Parte I

Después de la terapia, las semanas habían pasado en relativa paz, aun Lauren seguía llegando justo a la hora que debía recoger a Erik para ir juntos en bicicleta, había decidido para disgusto de la morena no acompañarlos en los desayunos hasta que se sintiera de nuevo en confianza con Camila.

Aun seguía procesando todo el asunto de la mentira que la diseñadora había dicho a sus padres con la sola intención de evitar que ellos advirtieran a Lauren de su paradero y de su hijo. Como Allyson le había dicho, tenia que intentar ver las cosas desde las heridas de Camila, y aunque era efectivo en gran parte para guardar la calma y controlar sus emociones, aun había una parte que estaba dolida con la castaña.

Sin embargo el proceso de distanciamiento entre las dos se había facilitado ya que ahora Camila estaba trabajando a toda rapidez para el vestido de novia de su hermana Sofia quien se casaría dentro de dos semanas, sabia por parte de su hijo que la mujer había tenido que mover gran parte de su agenda para hacer el diseño y poder viajar a Miami a tomar las medidas de su hermana y para las pruebas del vestido. De hecho Lauren había visto un par de veces cuando llegaba a dejar a Erik después de sus practicas privadas con ella, un desastre de telas blancas en el despacho de la diseñadora y a la misma con sus gafas puestas cociendo a mano detalles en las mangas y los adornos de encaje.

Lauren nunca había descubierto la sensación pacifica que ver a Camila en su ambiente le daba, pero cuando la vio por primera vez tan abstraída de todo en su propio mundo, tanto que ni escucho cuando Erik y ella llegaron, Lauren sintió que se enamoraba otra vez de la mujer. Recordaba que se fue en silencio para no sacarla de su trabajo, pero definitivamente se había tomado un tiempo en secreto para verla.

Aun no podía creer que tal mujer tuviera tantas inseguridades al respecto de su propia vida, como descarnadamente se había abierto en la sesión con Ally días atrás. Tenia el mundo a sus pies y sin embargo, aun sentía que todo le saldría mal. Lauren sintió una punzada en el corazón, porque le dolía que Camila no pudiera verla con sus ojos, a pesar de todo el conflicto al rededor de ellas.

Y ahora la atleta se encontraba en su ultima practica antes del partido contra las Mercury, era un partido decisivo para que las Liberty sumaran puntos para entrar a la ronda de playoff. Mentiría si decía que no estaba nerviosa por ello, era su debut como jugadora de Nueva York, y también era la primera vez que su familia la vería.

– Te siento de mejor humor. –intuyo el coach acercándose a la mujer que se veía de mejor semblante desde la ultima practica.

– Es así. –confirmo la atleta tomando un poco de agua.

– ¿Qué tal la cena?

– Un desastre. –solo dijo la mujer y el coach no quiso ahondar más.

– ¿Entonces de donde viene ese buen humor?

– Usted me dijo que debo pensar en el siguiente tiro y eso estoy haciendo. Y ellos vendrán a verme jugar mañana, después de todo Camila sigue siendo la madre de mi hijo y por primera vez tengo a alguien a quien dedicarle mis juegos, eso me pone feliz a pesar del problema. –explico la mujer sonriendo, de verdad que el pensamiento de su hijo y Camila sentados en primera fila viéndola anotar la ponía feliz.

– Esa es la actitud, treinta. Espero mañana rompas tu récord de tres puntos. –dijo el coach alejándose para ir con el coach asistente.

Lauren también esperaba romper ese récord, porque definitivamente se sentía con la energía para hacerlo.

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– Chica, tienes una habilidad para joder lo bueno en tu vida. –decía Dinah mientras observaba a la diseñadora tomar una aguja que sostenía entre sus dientes para colocarla en el borde de un vestido en el cuerpo de Normani quien rio al escuchar el comentario de la rubia.