La Comandante A, Victoria Heldman ha desaparecido de la faz de la tierra. Nadie la ha visto en mucho tiempo.
Alpha tiene la misión de encontrar a la mujer que hace temblar el cielo y la tierra junto con sus hermanos. Mike Windsor tomó el control co...
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Mike
Pasa a verme y me sonríe aliviada.
—No estoy embarazada —me relajo —. No estoy, no seré madre de un hijo que será de David nunca más. Bien.
—¿Estás bien?
—Nunca me sentí más aliviada —se acerca a mí —. Lo que dijiste allí a fuera no cambiará, ¿O sí?
Sonrío.
Me es difícil ver a Victoria de esta manera, insegura y vulnerable, pero me gusta. Me gusta porque significa que me deja entrar en su vida.
—Victoria Elizabeth Heldman Nowak, ¿Qué debo hacer contigo? —abre su boca y su mirada traviesa, oscura y seductora son mi perdición.
—Puedo darte ideas, como por ejemplo... —la beso antes de que lo diga, porque si lo hace, empiezo y no terminaré jamás.
—Vamos antes de que se nos salga esto de las manos.
—¿Y qué pasa si quiero que esto...?
—Te castigaré después, ahora vamos —ella sonríe y deja un beso en mis labios —. Me lo pones difícil, eh.
—Te lo puedo poner más difícil, pero lo dejaré cuando nos vayamos a Londres.
Dios, ampárame.
Salimos del baño.
Nuku Hiva
20 de noviembre a las 0500 horas
Sobrevolamos la isla con los soldados que hemos seleccionado. Debemos ser los más silenciosos y discretos posibles si lo que me dijo Victoria es real. Miro a los demás y siguen armándose.
Me coloco el apple watch que está sincronizado con todos los de Alpha para esta ocasión. Victoria pasa los intercomunicadores entre nosotros y luego le entrega a los Heer el suyo.
Fulmina a Paris con su mirada y me sorprende que aún no le ha hecho nada, pero si para revelarme a mí que sabía que había follado con ella le tomó meses, no sé cuándo podría ser su ataque y sé que no será precisamente rosas lo que le dará.
Viene junto a mí.
Se coloca las gafas transparentes. Jimin viene junto a nosotros.
—La cámara ya está activa, si alguien quiere ingresar a la base de datos, no solo me alertará, sino que podremos verlo desde nuestros relojes —nos llega una alerta —. Danielle y Ubbe irán rotando sus puestos.
—Bien, ahora, concentrémonos en esto.
Llegamos a la posición inicial de nuestro recorrido y nos preparamos para descender cuando el helicóptero baja y queda a centímetros del suelo.
