CAPÍTULO 41

457 35 35
                                    

Mike

Ups! Tento obrázek porušuje naše pokyny k obsahu. Před publikováním ho, prosím, buď odstraň, nebo nahraď jiným.

Mike

Victoria se tensa a mi lado y trata de salir de la cabina.

—Vic, no —la detengo.

—Él es el que está aquí, debe tener algo sospechoso.

—Cálmate, si vamos, vamos juntos.

—Bien —rueda los ojos.

Cuando se tranquiliza nos vamos junto al comandante superior Richard. Hay algo que no me gusta de todo esto, tal y cómo Victoria sospecha. Aquí hay algo que no del todo encaja.

Pero Victoria anda desconfiando más de lo normal en muchas cosas, así que no se si confiar tanto en su instinto ahora.

Nos acercamos a él.

—Comandantes, ¿Qué hacen aquí?

—Podemos preguntarle eso mismo, Richard.

Él traga grueso y se acerca a Victoria.

—Tengo malas noticias para ti.

—¿De qué hablas?

—Johann ha muerto —el rostro de Victoria se descompone y niega con la cabeza —. Lo lamento.

—No, él está en Suiza, yo lo encarcelé...

—Sus compañeros de celda lo asesinaron. Lo dejaron desangrarse, todos nuestros guardias estaban conteniendo un altercado que sucedió en uno de los sectores, fue allí cuándo lo asesinaron.

—¿Se sabe por qué lo hicieron? —pregunto mientras Victoria digiere toda la información.

—Aparentemente, él los cabreaba todos los días. Se cansaron de que aquello pase, pero también manejaba cosas ilícitas en el recinto.

—¿Qué cosas ilícitas? —su voz es grave y distante en un momento.

—Eso es lo que estamos averiguando, pero esa no es la única razón por la que vine —esperamos a que siga —. Su misión para detener a los japoneses terminó, otro grupo retomará aquello. Ustedes deben detener al bioterrorista Paul Francelli.

—Otra vez —se queja Victoria exasperada y yo me tenso. La última vez que nos enfrentamos a algo parecido, terminamos en una trampa con mi novia siendo secuestrada por Mors Rubrum.

La veo y ella rueda los ojos.

—No podremos hacer nada sin el resto de Alpha.

—Su equipo vendrá dentro de algunas horas, no se preocupen por eso. Están en camino junto a algunos soldados de Alemania.

Asiento.

—¿Dónde se encuentra Paul? —pregunto.

—Eso es lo gracioso de todo —comenta y ambos lo vemos extrañados —, está aquí, en esta isla.

COMANDANTE INFALIBLE ©Kde žijí příběhy. Začni objevovat