𝟬𝟰 || 𝙢𝙞 𝙚𝙣𝙛𝙚𝙧𝙢𝙞𝙯𝙤 𝙥𝙚𝙣𝙨𝙖𝙢𝙞𝙚𝙣𝙩𝙤

50 8 0
                                    


Yo pensé que estaba bien sostener una relación que no iba para ningún lado. Mi afán de tener gente en donde sea se volvía una enfermedad mortal para mí cerebro que apenas entendía como sumar y restar, que todavía no se sabe las tablas porque prefiere aprenderse una canción y los nombres de esas personas que me hacen suspirar y sentirme viva.

No me di cuenta, pero yo pensé que estaba bien, pensé que íbamos a tener un felices por siempre y te termine olvidando porque mi corazón cerro sus puertas para que pudieras entrar, porque vio como rompiste cada parte de el. Pero yo pensé que eso estaba bien, que quedarme sola iba a estar mal, que te necesitaba.

Me olvidé lo que era estar triste por un momento y conocí el estrés, la inseguridad y la desconfianza que podría llegar a cargar por un solo comentario tuyo, por una sola risa que soltarás burlandote de mi a mis espaldas con tu nuevo grupo de amigos.

La tristeza me gano y aunque quise romper todo no lo hice porque me lo guarde para mí, porque aprendí a guardarme todo lo que me doliera para no manchar a nadie a mi alrededor de mi mierda. Aprendí a callarme, pero yo pensé que eso estaba bien, pero un día me di cuenta que pensar de esa manera no servía, perdí contacto, perdí inocencia, perdí un amigo porque ese era tu título en mi vida y lo perdiste de la mejor manera posible.

Trate de olvidarte, no quise pensar en todo lo que estabas haciendo mal, trate de ser empática como siempre lo fui y buscar una solución, pero la cagué y la cagué fuerte. Me perdí a mi misma tratando de quedarme con alguien que no servía y ahora me odio.

Pero yo pensé que esto entre nosotras funcionaria...

Y ahí está uno de mis mayores defectos, el miedo a quedarme sola y mi extraña enfermedad con quedarme donde solo me hacen sentir mal. Desde que escribí esto hasta el día de hoy puedo decir que cambie, pero no cambie lo suficiente porque sigo quedándome en muchas ocasiones y sigo rompiendome mi cabeza, porque siento que eso es lo que me merezco por ser lo que soy. Muchas relaciones amistosas que tuve terminaron haciéndome llorar por haber cortado los lazos y después me daba cuenta de que necesitaba irme de ahí, porque ese no era mi hogar, ese no era mi lugar seguro...

Los Miedos de Ayus Where stories live. Discover now