Game Of Thrones/ Una historia muy diferente.

Capítulo 6 "La llegada de los Leones y el Ciervo"

Esa mañana todos estaban más apurados de lo normal, desde la habitación del joven matrimonio se podría escuchar todo el alboroto, cuando se despertaron Valyria tenía un mal presentimiento pero lo dejó a un lado cuando su esposo se acercó a darle un pequeño beso y salir corriendo de la habitación pues los dos tenían demasiadas cosas que hacer.

Lady Catelyn había pedido que Robb, Theon y Jon se cortaran nuevamente la barba y el cabello para estar presentable para la Reina y el Rey, pues hoy llegaba.

La pequeña Sansa y Valyria les llevaron la ropa que Lady Catelyn había escogió para los jóvenes, así que se dieron paso a la pequeña cabaña donde se estaban arreglando.

-Madre dice que se pongan esta ropa y que estén lo más presentable que puedan.-dijo la pequeña Sansa entrando a la cabaña.

-Pobre Jon otra vez le quitaron su bella barba.- comentó burlándose Valyria de su mellizo.

Theon y Robb sólo rieron mientras Jon veía mal a su melliza. Antes de que él pudiera decir algo, Sansa y Valyria se fueron rápidamente.

Valyria se encontraba viendo y explicándole a Arya como disparar con el arco, mientras su esposo, amigo y mellizo se reían de que le estorbaba el vestido para disparar bien, todas las risas se apagaron cuando él gritó de el pequeño Bran resonó en toda Invernaldia.

-¡El Rey estará pronto aquí.!- grito corriendo en busca de Lord Eddard Stark

De un momento a otro toda Invernaldia se puso seria, todos pararon sus actividades para ir a ver al Rey y a la Reina.
Robb se colocó al lado de su padre, mientras Valyria arreglaba un poco el cabello de Sansa y le da un beso en la frente, mientras la pelirroja reía pues ya se estaban llevando mejor, cuando terminó se puso justo al lado de su esposo mientras se daban la mano, justo atrás de ella se encontraba su mellizo quien al voltear a verla le sonrió.

Ned la miraba nervioso e impaciente por la reacción que llegara a tener el Rey al verla, Valyria noto eso y le dio una gran sonrisa mientras se alisaba un poco el vestido azul rey con flores doradas que llevaba hoy al igual que la corona de flores que Sansa y Rickon habían hecho para ella.

-¿Dónde está Arya?-preguntó Lady Catelyn buscando con la mirada a la pequeña niña traviesa- Sansa, ¿dónde está tu hermana?

Sansa alzó los hombros sin saber qué responder pues en realidad solo prestaba atención a ver a el príncipe, Arya apareció a los pocos segundos dando brinquitos con su capa ondeando y un casco en la cabeza. Robb y los mellizos no pudieron reprimir una sonrisa cuando la vieron.

-Oye, oye, ¿qué estás haciendo con esto?- comentó Ned deteniendola al instante y quitándole el casco- Ve a tu lugar, anda.

Arya obedeció a su padre pero en el proceso empujó a Bran quien estaba en su lugar.

Segundos después el primero en aparecer fue Ser Jaime Lannister con su armadura dorada y su capa blanca, después entró el príncipe y heredero, Joffrey Baratheon, Valyria al verlo supo de inmediato que era un chiquillo presumido y mimado, cosa que no le dio buena espina, pero no todas pensaban como ella pues Sansa parecía encantada con él, cosa que no pasó desapercibido por Robb ni por su padre.

El carruaje real apareció y detrás entró el Rey, Robert Baratheon, al solo verlo toda Invernaldia se arrodilló ante él mientras  avanzaba en su caballo.

La reina bajó del carruaje real, su cabello era largo y dorado justo igual al de su mellizo Jaime, no pudo negar a lo que había dicho Theon era bella pero con esa cara de amargada toda belleza se iba.

En cambio el Rey era gordo y barbudo, al verlo no pudo imaginar a ese hombre destrozando a Rhaegar Targaryen, bajo de su caballo y se acercó a Ned Stark, lo vio desde arriba y con un movimiento de mano le indico que se pusiera de pie, seguido de los demás.

-Majestad.- dijo Ned, el Rey lo vio por unos largos segundos sin decir nada.

-Estás gordo.-Fue lo único que dijo con una seriedad que confundió a todos. Ned alzó una ceja y vio de reojo la barriga del rey.

Robert soltó una carcajada y abrazo a su viejo amigo, después pasó a saludar a Lady Catelyn y despeino un poco el cabello del pequeño Rickon.

-En nueve años que no te he visto, ¿que has estado haciendo?- dijo el Rey con una gran sonrisa.

-Cuidar del norte por usted su Majestad. Invernaldia es suya.-comento Ned feliz.

-¿Y el diablillo?- Pregunto inocentemente Arya buscándolo con la mirada.

-¡Cierra la boca Arya!- Grito Sansa, roja de la vergüenza.

-¿Y que tenemos aquí? Tu debes ser Robb-dijo el Rey viendo a Robb y estrechando su mano, aunque el en ningún momento soltó la mano de su esposa, cuando él Rey avanzó para seguir saludando se detuvo y abrió los ojos con demasiado asombro- Lyanna-dijo en un susurro viendo a Valyria quien apretó más fuerte la mano de su esposo sintiéndose un poco incomoda por la comparación con su difunta tía.

-Majestad ella es Valyria, esposa de mi hijo Robb.- comento Ned apresuradamente pues veía la incomodidad de Valyria.

-Eres idéntica a ella.- susurró el Rey y se inclino para besar la mano de Valyria, quien no sabía que hacer más que tomar más fuertemente la mano de su esposo y ver a su padre, después que el rey soltara su mano siguió caminando para ir con Sansa aún con sus ojos en Valyria- Vaya eres muy hermosa- hablo el Rey dirigido a Sansa quien se sonrojo, se dirigió hasta estar enfrente de Arya a lo que preguntó- ¿Y tu nombre es?

-Arya -comento haciendo una pequeña reverencia.

El rey camino hasta quedar enfrente de Bran y sonrió

-Vamos enséñame esos músculos- El pequeño obedeció a lo dicho por el rey mostrando sus pequeños y débiles brazos, por lo que el rey río- Serás un gran soldado.

La reina finalmente se presentó e hizo un acto de aprobación hacia los Stark, se acercó hasta quedar enfrente de Ned y estiró su mano esperando que la besara, sin despegar la vista de Valyria.

-Mi reina.-dijo Ned mientras le daba un beso en el anillo.

Justo cuando pensó que ya nada podía hacerla sentir más incomoda, se dio cuenta de que el Rey la seguía viendo de manera más insistente.

También sentía la mirada de los Lannister así que apretó aún más la mano de Robb, quien le sonrió para tratar de tranquilizarla.

-Llévame a la cripta Ned, quiero presentar mis respetos.- Ordenó a él guardián del norte.

-Llevamos viajando un mes, mi amor los muertos pueden esperar.- dijo la Reina con una leve sonrisa.

-Ned.- Volvió a decir Robert quién ignoro a su esposa y salió rumbo a las criptas con Ned siguiéndole.