Capitulo 33

6.8K 583 124
                                    

Vas a morir ____, y nunca más vas a poder comer en toda tu maldita vida. Y te lo mereces, por gorda obesa desobediente.

Sentí su cara acercarse a mi cuello y aspirar en esa zona. Sabía que estaba tardando para hacerme sufrir. O al menos, eso suponía...

Todo pasó muy rápido.

Su aliento chocando contra mi cuello. Sus manos saliendo de repente de mi cara. El frío que recorría mi cuerpo al acercarse, desapareciendo. Un grito de dolor. El tronco de un árbol rompiéndose.

Abrí los ojos en ese mismo instante. Necesitaba saber qué mierda estaba pasando.

Una espalda, de un muchacho. De un muchacho que yo conocía.

Christopher.

Caí sentada contra el tronco en cuanto vi su cuerpo dándome las espaldas.

Suspiré. Y maldita sea, no quería suspirar. Porque sabía bien que era un suspiro de alivio. Y Dios, cada vez esto tenía menos sentido, ¿qué mierda podía estar haciendo él aquí?

Christopher se giró hacia mí, revelando su ceño fruncido y sus ojos llenos de preocupación.

Se agachó junto a mí e inspecciono todo mi rostro. No sabía que buscaba. Pero me estaba derritiendo bajo su mirada y me sentía como una completa idiota.

- ¿Estás bien? - su ceño seguía fruncido, estaba preocupado. Se notaba demasiado. Mi corazón se encogió cuando escuche una risa. Y no era de Christopher... Ni mucho menos mía.

- Esto es tan conmovedor... En serio, se me ha caído una lágrima. Bueno, si mi cuerpo pudiera llorar, probablemente eso hubiera sucedido. - Me hice más chiquita, aplastando mi espalda más en el árbol. Christopher rugió. Y Dios que me había hecho temblar.

Giró en su cuerpo poniéndose de pie. Camino tres pasos más por delante de mí, dejándome una perfecta vista del cuerpo sin cara que me había acosado segundos antes.

Estaba frustrada por no poder ver su rostro. Si lo veía, por lo menos podía ir a la policía y denunciarlo, no lo sé.

- Este no es territorio de cazadores. No puedes estar aquí. - Sus manos se hicieron puños. Quien sea, río.

- ¿Y a mi debería importarme porque...?

- Porque es territorio de otro clan, y pueden cazarte, según las leyes.

¿Territorio? ¿Clan? ¿Leyes? ¿Cazadores? ¿Qué carajos?

- El problema es que jamás podrían cazarme. Jamás. - No entendía ni mierda de lo que estaban hablando, pero su tono arrogante me daba escalofríos.

- ¿Por qué estás tan seguro de eso?

- Nunca nadie ha podido decir lo contrario. - Christopher abrió sus manos y...

Oh no. Oh Dios no.

¿Eran garras? Dime que estoy alucinando, por favor. Alguien dígame que me volví loca.

Vi como Christopher se echó a correr como un animal en plena caza. Era malditamente rápido. Pero no 'rápido veloz'. La clase de 'rápido inhumano'. Era un maldito Flash.

El chico sin rostro saco un par de garras también. Y maldición, me sentía un puto ninja en una película de superhéroes. No entendía ni mierda de todo esto. Y eso sólo hacía que el pánico se expandiera mucho más rápido por mis venas. Me aplasté más contra el tronco sin poder dejar de mirar la escena que se encontraba frente a mí.

Christopher golpeó al chico sin rostro en la cara y lo hizo volar al menos cinco metros sobre el aire. El chico se levantó al instante y lo rasgó en la cara con sus, ahora mejor vistas, gigantescas garras.

Christopher Where stories live. Discover now