Vas a enamorarte de mi

By SookYon

16.3K 1.4K 150

Azul tiene una meta clara: llegar a ser una gran violinista y que su abuelo se sienta orgullosa de ella. Todo... More

Capitulo 1
Capitulo 2
Capitulo 3
Capitulo 4
Capitulo 5
Capitulo 6
Capitulo 7
Capitulo 8
Capitulo 9
Capitulo 10
Capitulo 11
Capitulo 12
Capitulo 13
Capitulo 14
Capitulo 15
Capitulo 16
Capitulo 17
Capitulo 18
Capitulo 19
Capitulo 20
Capitulo 21
Capitulo 22
Capitulo 23
Capitulo 24
Capitulo 25
Capitulo 26
Capitulo 27
Capitulo 28
Capitulo 29
Capitulo 30
Capitulo 31
Capitulo 32
Capitulo 33
Capitulo 34
Capitulo 36
Capitulo 37
Capitulo 38
Capitulo 39
Capitulo 40
Capitulo 41
Capitulo 42
Capitulo 43
Capitulo 44
Capitulo 45
Capitulo 46
Capitulo 47
Capitulo 48
Capitulo 49
Capitulo 50
Capitulo 51
COMUNICADO

Capitulo 35

256 31 1
By SookYon

Azul

Estuve esperando a Matt, pero él no aparecía lo cual me parecía extraño ya que el siempre ha sido puntual.

— ¿Hoy es miércoles?— me pregunte a mi misma.

— Corre. Vamos, se están peleando.— oí que una chica le decía a un grupo de chicas que la seguían detrás. Entre esa multitud que corría hacia un lado vi a Lina y Gabriela.

— ¡Hey!— las llame mientras corría hacia ellas.— ¿Quien se esta peleando?

— ¡Oh! Azul—dijo Lina dejando de correr.—Al parecer Cameron y Matt se están dando a hostias.

— ¿Cameron?—pregunte preocupada.—¿Matt?

— Sí, vamos corre.

No deje que me lo repitiera, pero para cuando llegue lo único que pude ver fue a Matt y Cameron siguiendo a un profesor. Se habían metido en un buen lío.

Para cuando quise darme cuenta ya me encontraba detrás de esos tres. Necesitaba saber que era lo que había pasado.

— ¡Oye!—me llamo una chica tocándome el hombro. La mire seriamente, no me hacia ninguna gracia tenerla cerca. Entre que le tengo miedo y rabia, más de lo segundo y menos de lo primero.— ¿Se puede saber a donde vas?

— No es de tu incumbencia.— le conteste de mala gana y seguí mi camino.

Vi como los chicos entraban a lo que suponía que era el despacho del profesor, pero no tardaron en salir. Se sentaron en el banco que se encontraba al frente del despacho. Los observe, estaba claro que esos dos no se llevaban nada bien. Quise acercarme a Cameron, pero entonces recordé que tenia a su novia detrás, así que decidí ir hacia mi amigo Matt.

— ¿Matt?— le llamo Daniela adelantándome y dejándome un poco sorprendida, pensé que primero iría a ver a su novio. —¿Que te ha pasado?

Mire a Cameron, el cual también parecía sorprendido. Podría decir que hasta se sentía dolido y no por las heridas que se veían en su rostro, sino por la acción de Daniela. No debería de preocuparme, pero no pude evitarlo.

— ¿Estas bien?—le pregunte un poco insegura. Cuando me miro parecía como si estuviera volviendo al mundo real y estuviera enfocándome. ¿Tanto le había afectado que Daniela no hablara primero con él? ¿O soy yo la que esta exagerando?

— ¿Azul?

— Nos volvemos a ver.—comente intentando sonreír, tenia mal aspecto.—Pero tu no te ves nada bien.

Tenia la mejilla roja y en su ojo izquierdo se empezaba a notar un hematoma. Le inspeccione todo el rostro con la mirada y me centre en su labio, en el cual se había acumulado un poco de sangre y estaba levemente hinchado. Acerque mi dedo a su herida del labio y lo toque ligeramente y lo mantuve ahí. Sentía que tenia que hacer algo por él, debía curar sus heridas...

— ¿Duele?—pregunte. Él iba a contestarme, pero Daniela intervino. Poso cada una de sus manos en cada mejilla de Cameron.

— ¡Cameron!—exclamo, es tan odiosa, tan falsa. —¿Estas bien?

Me aleje de ellos y fui hacia Matt.

— Estoy bien.—oí que le contestaba Cameron de mala gana. Intente olvidarme de ellos y centrarme solo en mi amigo.

— Nunca pensé que te vería en este estado.—le dije sonriendo, tenia la misma pinta que Cameron.

— Lo siento.— dijo agachando la cabeza.

— ¿Por que me pides perdón a mi?— le pregunte. Él solo me miro como si quisiera decirme algo, pero no lo hizo. Le sonreí, para darle a entender que todo estaba bien. Iba a decirle algo, pero el profesor que había visto antes salió.

— Vosotros dos dejad a vuestras novias y entrad.—les ordeno.

¿Novia? No, yo no soy la novia de nadie. Me sonroje ligeramente, admito que ese comentario me puso nerviosa.

— Ahora salgo. ¿Me esperas?—me dijo Matt posando su mano en mi hombro, asentí y él entro.

Seguí mirando la puerta por la que mi amigo había entrado, no quería moverme. Quizás intentaba ser invisible y que de ese modo la chica de dos cara no me digiera nada. Pero fue en vano. Después de que Matt entrara ella no tardo ni cinco segundos en abalanzarse a mi.

— Te dije que te alejaras de ellos.

— ¿Y yo que te dije?

— Tu no dijiste nada.

— Lo siento, debería haberlo echo en ese entonces.

— ¿Qué?

-No pienso hacer lo que tu me digas—dije con toda la valentía que encontré. ¿He comentado que jamás en mi vida me he peleado? No se exactamente que debo hacer, pero tampoco quiero que sienta que ha ganado.

— ¿Qué es lo que acabas de decir? — pregunto desafiante invadiendo mi espacio personal.

— Yo-yo no pienso hacerte caso.

— ¡Ja! ¿Te he preguntado si ibas a obedecerme? No te he pregunto si puedes alejarte de ellos, te ordeno que lo hagas.

— ¿Por-por que debería yo-yo hacer eso?—dije ahora intimidada, su mirada era aterradora. Mierda, ¿que pasa conmigo?

— Porque te lo ordeno.—No puedo continuar así. ¿Cree esta chica que le tengo miedo? Bueno...un poco sí. Pero no soy de las que se dejan pisotear.

— ¿Tú?—la mire del mismo modo que ella lo había estado haciendo.

— Creo que no tienes ningún derecho a pedirme que me aleje de Matt. Y sobre Cameron, se que es tu novio, pero creo que tampoco tienes el derecho de pedirme que me aleje de él. ¿Sabe él que el que realmente te gusta es Matt? ¿No crees que eres un poco... Hum, no se como definirte sin que te sientas ofendida— Concluí sonriéndole, sabia que eso le había molestado. Ella me miro con odio y me dio una bofetada. Llave mi mano a mi mejilla, la cual había recibido el golpe. Nunca antes nadie me había pegado. Dolía. La mire con odio, sentí que las lagrimas se habían acumulado en mis ojos. Pero no solo por el dolor, sino también por la rabia que sentía hacia esa chica.

— ¿Tienes algo mas que decirme?—me pregunto triunfante, no pude hacer nada porque la puerta se abrió y yo agache la cabeza quien fuera el que estuviera saliendo no quería que me viera. Me sentía humillada.

— ¿Cameron, estas bien?—dijo Daniela, pero Cameron no respondió. Por sus pasos supe que se había ido.

— Como le digas algo a Matt o a Cameron te haré la vida imposible—amenazo Daniela y luego se fue. Levante la cabeza y deje salir las lagrimas que había estado reteniendo.

— Zorra.— dije en susurros y mire hacia la puerta del despacho. Matt seguía dentro. No quiero que me vea así.

Me aleje de ahí lo más rápido que pude.

Lo siento, no pude esperarte porque mi abuelo me llamo y necesitaba mi ayuda. Lo siento Matt, nos vemos el próximo miércoles.

Azul.

Cuando estuve en casa le mande el mensaje. Mi abuelo no estaba, hoy tenia que ir al medico para hacerse una revisión. Sí, había mentido a Matt.

"Como le digas algo a Matt o a Cameron te haré la vida imposible"

¿Hacerme la vida imposible? ¿Debería preocuparme por ello?

No pienso alejarme de Matt porque ella me lo diga, pero sobre Cameron... es diferente. No me alejo de él porque le tenga miedo a Daniela, lo hago porque tengo miedo de él. Es un miedo un tanto estúpido, pero a la vez es un miedo que me prohíbe estar cerca de él. ¿De que es lo que tengo miedo exactamente? De que consiga enamorarme.

Aun no he tenido mi primer amor, no he tenido esa persona por lo que haya sentido que daría y haría todo. No he sentido aun ese amor que por lo que cuentan te vuelve tonto y ciego.

No tengo que confundirme, aun no estoy enamorada de él. No lo estoy, simplemente es atracción. Creo y pienso que estar enamorada es aun mas complicado que solo gustar de alguien.

Lo que si se es que ese chico me gusta aunque me cueste admitirlo. Por eso voy a alejarme de el, seguiré haciendo lo que he echo hasta ahora; evitarlo.

— Niña a desayunar, rápido.

— Ya voy abuelo— le conteste mientras bajaba las escaleras. — ¿Puedo saber por qué me llamas niña?

— Porque es lo que eres, una niña.

— Sí, lo se. Pero lo que quiero decir es que nunca me has llamado de una manera cariñosa.

— Esta es mi forma de ser cariñoso.— dijo mientras le daba un mordisco a su tostada.—Creí que lo sabias.

— Eres tan fríamente cariñoso, abuelo.— afirme, no había razones por las que seguir hablando sobre ello por eso cambie de tema.— ¿Que tal te fue ayer en el hospital?

— Odio ese lugar. Me tratan como si fuera un viejo.

— Pero lo eres.

— No soy tan mayor, niña.

— Perdone, joven.— bromee y el me miro mal, pero se que él también esta bromeando—¿Cuando te dan los resultados?

— El viernes, es decir mañana.

— ¿Quieres que te acompañe?

— No, debes ir a los ensayos con la orquesta. No te distraigas con otras cosas.—dijo pegándome un pequeño golpe en la cabeza.— Se que últimamente todos los miércoles sales con un chico.

— ¿Qué?— dije atragantándome con la leche, tosí un par de veces.—¿De que hablas?

— Os vi dos miércoles seguidos y tu siempre llegas tarde esos días. ¿Crees que soy tonto?

— Lo siento, es solo un amigo.

— ¿Es el mismo del otro día? ¿Ese de artes dramáticas?

— Sí, es él.

— No te distraigas con él. No te enamores, si lo haces te olvidaras de cuales son tus metas. — Es solo un amigo, abuelo.

— Tu padre se enamoro y lo dejo todo—comento inmerso en sus recuerdos.—No te enamores aún.

— No lo haré.—conteste.— ¿Aun-aun puedo salir con mi amigo?

— No voy a prohibirte que no lo hagas. Entiendo que quieras salir con tus amigos.

— ¿Estas bien abuelo?—pregunte sorprendido. Mi abuelo es una persona conservadora, nunca le ha gustado verme con chicos. Así que el echo de que ahora no le importe que este cerca de Matt me sorprende.

— Estoy bien.

Y así termino la conversación. Extraña, muy raro. ¿Qué pasaba con mi abuelo? No dijimos nada más, terminamos de desayunar y yo salí de casa dirección a la parada del autobús. Quizás el abuelo empieza a ser mas blando, ya esta mayor, puede que se haya cansado de seguir discutiendo. Aun que me parecía extraño, me gustaba el echo de que no me quisiera enviar a un internado de monjas.

Ya en el autobús, me senté en un asiento libre que se encontraba casi al final del autobús.

Me asuste al no verte cuando salí del despacho. ¿No estas enfadada conmigo, verdad?

Leí el mensaje que Matt me había enviado la noche anterior y que aun no había leído. Entonces recibí otro mensaje.

¿No estas enfadada, verdad?

Sonreí al ver una imagen adjunta en la que Matt salía haciendo puchero como un niño pequeño.

¿No vas a responder?

Envío otra imagen en la que salía con el ceño fruncido.

Se que estas sonriendo.

Cuando leí el mensaje aparte la mirada de la pantalla del móvil y lo busque con la mirada por el autobús.

Detrás tuyo.

Me gire y lo vi sentado en el asiento detrás de mi.

— Matt.—lo salude.

— ¿No me habías visto?—me pregunto.

— No, lo siento. No se como no me di cuenta.

— Pensé que estabas pasando de mi, me asustaste.—dijo como un niño chiquito. A este chico le gusta actuar de manera linda.

— No estoy enfadada contigo y lo sabes.—el sonrío y se sentó en el asiento libre que había a mi lado.

— ¿Como estas?—me pregunto. Y me puse nerviosa, en cuanto escuche esa pregunta recordé la amenaza de Daniela. ¿Por que estoy recordando eso?

— Yo-yo estoy bien. ¿Y tu? —quise que la conversación se centrara solo en él y que no me preguntara nada más.

— Estoy muy cansado.—dijo acomodándose en su asiento.—¿Crees que pueda dormir un rato hasta que lleguemos?

— Claro.—conteste. Que se durmiera seria lo mejor, entonces nadie tendría que hablar.

Él sonrío y cerro los ojos. Yo por mi parte también me relaje y pose mi cabeza en la ventanilla. De alguna manera también me sentía cansada. Me quede quieta observando como los arboles se movía a toda velocidad, bueno esta claro que los arboles no se movían sino el autobús. Entonces note como algo caía en mi hombro y se mantenía ahí. Mire hacia esa dirección, Matt estaba durmiendo y tenia su cabeza en mi hombro. Me deslice un poco hacia abajo de manera que Matt estuviera más cómodo. Lo mire, tenía una pestañas larguísimas. No puedo negar que es realmente atractivo, cualquier chica podría enamorarse de él. El autobús giro haciendo que Matt dejara de apoyarse en mi. Con cuidado pose una mano en su mejilla para guiarlo hasta mi hombro otra vez, si se quedaba en la posición en la que estaba anteriormente.

¿Se ven todos lo chicos tan atractivos cuando duermen? Tenia ganas de jugar con su cabello. Acerque mi mano lentamente hacia el pelo que le tapaban ligeramente los ojos, pero cuando ya estuve cerca el abrió los ojos. Me quede quieta, lo tenía tan cerca. Él siguió mirándome y vi como levantaba su mano lentamente. La poso en mi mejilla y luego acomodo mi cabello detrás de la oreja.

— Eres realmente hermosa.—susurro.

Continue Reading

You'll Also Like

567K 76.5K 45
Una sola noche. Dos mujeres lesbianas. ¿Un embarazo? ¡Imposible!
155K 21.6K 64
nacido en una familia llena de talentos aparece un miembro sin mucho que destacar siendo olvidado sin saber que ese niño puede elegir entre salvar o...
338K 25.4K 53
Historias del guapo piloto monegasco, Charles Leclerc.
165K 13.9K 34
|𝐀𝐑𝐓𝐈𝐒𝐓𝐒 𝐋𝐎𝐕𝐄| «El amor es el arte de crear por la sensación misma, sin esperar nada a cambio,más allá del placer mismo del acto creativo...