Capitulo 43

199 21 0
                                    

Azul 

Después de todo lo que había pasado no tenia ganas de volver a ver a Cameron.

¿Quién se creía él para burlarse de mis sentimientos? ¿Cómo gozaba venir y decirme todo aquello?

Paso una semana y no supe nada de él, cosa que tampoco me molesto. Podría decir que me sentía rara, sí. Me sentía aliviada de no verle la cara, pero que por otra parte también estaba preocupada por él.

— Él sigue sin aparecer. — Comento el novio de Lia. Desde hace unos días él y su grupo se sentaban con nosotros a la hora de comer.

Intente no prestar mucha atención a su conversación y seguir concentrada con mi comida, pero fue algo que no pude hacer.

— Le he llamado un millón de veces, pero no responde.— dijo otro de los chicos. — Nuestro profesor esta empezando a preocuparse porque al parecer ya tenia aviso por faltas y si sigue así perderá la evaluación continua.

Durante los últimos ensayos se me estaba haciendo casi imposible concentrarme, no era capas de tocar más de tres notas sin preguntarme si él estaba bien. ¿He llegado hasta tal punto de idiotez que solo pienso en como estará? Esto me estaba irritando, y mucho.

Nunca antes había sentido algo especial por otro chico, simplemente pensaba que este tema de enamorarse era algo para lo que quizás no estaba preparada. Y después de que él apareció lo único que pude comprobar es que tenia razón, no estoy preparada para sentirme de este modo. Siento que es estúpido, siento que no vale la pena...

— ¡Hey! Azul, deberías estar más atenta.— llamaron mi atención.

— Lo siento.— me disculpe rápidamente.

— Falta menos de dos semanas para la presentación no podemos permitirnos errores.

— Sí. Lo siento.

Esto se me estaba haciendo imposible. Después de un largo día, estaba dispuesta de irme a casa y enterrarme en mi cama para no salir de ahí en todo el día, Pero alguien hizo que todas esas ideas se fueran a la basura.

— Te he visto muy rara últimamente.— comento mientras caminaba a mi lado.

— ¿Me has visto? Yo no te he visto. — le dije deteniéndome y mirándolo.— ¿Estas espiándome?

— ¿Qué?.— río Matt.— No. Pero cuando quería acercarme tu desaparecías de la nada, te veía de lejos. No prestabas atención a tu alrededor, simplemente te mantenías encerrada en tus pensamientos. ¿Ha pasado algo?

— No.— conteste y comencé a caminar de nuevo.

— Puedes contármelo todo. Venga.

— No pasa nada.

— Espera.— dijo y me tomo del brazo.

— ¿Qué pasa? — le mire desganada. Necesito irme a casa. Lo siento Matt, estoy siendo muy mala contigo.

— Me gustas.— dijo sin más interrumpiendo mis disculpas mentales.

Lo mire sorprendida sin decir nada. ¿Pero esto ya lo sabíamos, no? Me dije a mi misma. No, no lo sabíamos. Era algo en lo que insistía Lina, pero yo nunca le preste mucho importancia. ¿Qué se supone que debo hacer ahora? Nunca antes se me había confesado ningún chico. Siempre prense que quizás era porque a ninguno le resultaba atractiva, pero más adelante me di cuenta que era yo la que de algún modo los distanciaba. Pero con Matt no lo había echo. ¿Por que?

— ¿No vas a decir nada?— pregunto buscando en mi mirada algún tipo de respuesta. Negué lentamente con la cabeza y me di la vuelta dispuesta a irme.

No me siento en el mejor estado para afrontarme a esto. ¿Que se supone que le debo de decir?

— Espera.—corrió detrás de mi y me detuvo.— Esta bien. Ahora no tienes que decirme nada. Yo, yo solo necesitaba decírtelo.— sonrío levemente. Esa sonrisa que cautivaba a cualquiera.

— Yo no...- iba a decirle que lo sentía, que yo realmente no creía que sintiera lo mismo. Que no era él quien me gustaba, pero me interrumpió.

— Hoy no. No quiero que respondas hoy. Siento que vas a rechazarme sin que me haya declarado correctamente. Respóndeme la próxima vez ¿de acuerdo? — me miro dulcemente y me dedico una pequeña sonrisa.— Ahora me voy.— dijo y me dio un beso en la frente.

Llegue casa y me fui directo a mi habitación, sin prestar atención a mi abuelo.

Recordé como había conocido a Matt y como había conseguido hacerme sonreír durante nuestras conversaciones. ¿Siento algo yo por él? 

Vas a enamorarte de miDonde viven las historias. Descúbrelo ahora