Capitulo 2

707 37 5
                                    

Azul

Llegue a casa después de una tarde extremadamente larga. Primero el trabajo en grupo que no parecía tener fin, lo segundo que la directora de la orquesta me pidiera recoger los uniformes, tercero mi lucha contra la maleta y por ultimo el bus.

— Abuelo, ya llegue —dije mientras me quitaba los zapatos en la entrada para ponerme las sandalias.

Mi abuelo era un maniaco de la limpieza y no soportaba que ensuciara el suelo con mis zapatos de la calle. <<Sabes la cantidad de basura, bacterias y otras mierdas que puede haber en la calle — me había dicho —sin hablar de los chicles y las meadas de los perros>> Mi abuelo tenia un lenguaje tan fino cuando se enfadaba.

— ¡Quítate los zapatos! —grito des de donde estuviese.

— Ya lo he hecho —conteste ahora cargando la pequeña maleta que había llevado para poder transportar los uniformes. Maldita sea, esta maleta pesaba mucho. Pero no podía arrastrarlo por el impecable suelo de la inmaculada casa. No si no quería pasarme el día siguiente haciendo una limpieza a fondo.

Cuando por fin había logrado dejar la maleta en mi habitación y me había sentado cómodamente en el sofá al lado de mi abuelo, puede descansar.

— ¿Cómo fue el ensayo? —pregunto aun atento a los noticias de la televisión. Lo mire y sonreí, aunque fuera una persona que suele ser distante se preocupaba por mi.

— Fue realmente bien, mis practicas personales con el violín han servido de mucho.

— Te dije que no te obligaba porque si. Tu abuelo siempre tiene razón. ¿Y que tal el trabajo?

— Se que lo haces por mi bien. Y, sobre el trabajo. Fue bastante agotador. —dije conteniendo un suspiro.

El abuelo amaba la música clásica, des de que yo fui a parar a su casa me enseño todo lo que sabia y así también creció mi amor por la música. No me gustaba solo la clásica, a mi me encanta cualquier tipo de música que pueda transmitirme cosas, sentimientos. Pero el abuelo odia cualquier otro tipo de genero musical,para él el pop y todos los demás son un insulto para aquello a lo que llamamos música. Para el abuelo música clásica es la verdadera música, él era un director de orquesta muy conocido. De ahí provenía la fortuna de la familia, de los conciertos y de las muchas canciones que había compuesto. Aun pertenecía a algún tipo de asocian encargada de elegir las mejores canciones para los conciertos a los que asistían personas muy importantes, aparte de eso también es muy activo en mi universidad.

En la universidad de arte hay diferentes departamentos. Yo estoy en el departamento de música clásica. Pero aparte de mi departamento también esta el departamento de arte escénicas y danza, y por ultimo el departamento de música general.

— ¿Has comido? —Pregunto mi abuelo.

— No — conteste — se me había olvidado.

Me levante del sofá y fui hacia a la cocina a prepararme un sándwich. Cuando fui al salón ya no encontré a mi abuelo, seguro que ya se había ido a dormir. Es de las personas más calladas que conozco, la muerte de mamá lo había dejado muy mal. Pero no solo a él.

Encendí la televisión e hice zapping, no había nada interesante. Mañana entraría temprano a la universidad así que debía ir a dormir pronto si no quería dormirme por las calles o aun peor, en clase de historia. No podía crearme mala fama, solo habían pasado dos meses des de que comenzamos las clases.

Cuando acabe de comer, lleve el plato a la cocina y la lave. Al acabar pase por la sala y fui hacia las escaleras. Cuando pase por la habitación de mi abuelo acerqué mi oreja a su puerta y no se oía nada; esta dormido, pense. Me fui a la mía que estaba en la otra punta y entre intentando no hacer ruido. Cuando entre lo primero que hice fue meterme a la ducha. Estaba reventada.

Vas a enamorarte de miDonde viven las historias. Descúbrelo ahora