Vas a enamorarte de mi

Capitulo 37

Azul 

Estos últimos días no he podido parar de pensar en esas dos palabras que Matt me había dicho.

"Eres hermosa"

Esa palabras me tienen bastante confundida ya que Matt después de haber dicho aquello actuó como si no hubiera pasado nada. ¿Lo había dicho en serio?

— ¿Estas diciendo que después de aquello el chico no dijo nada más? — me pregunto Lina.

— No. Tampoco hubo tiempo de que digiera nada más porque ya habíamos llegado y teníamos que bajar.

— ¿No notaste nada más?

— No. Bajamos y luego cada uno se fue por el camino que le tocaba.

— Esta claro. A ese chico le gustas, te lo he dicho un millón de veces.

— No lo creo, él tiene algo con Daniela. Lo sé.

— ¿Matt?

— Bueno, creo que es más solo por lado de ella.

— ¿Que quieres decir?

— Daniela sigue enamorada de Matt. — dije después de darle un sorbo a mi bebida.

— Pero si ella esta saliendo con Cameron.

— Lo se, pero solo nosotras sabemos eso. ¿Has oído de alguien en todo el campus que los empareje?

— No.

— Eso es porque seguramente ella no quiere que Matt se entere. El día en el que Matt y Cameron se pelearon el profesor dijo "dejad a vuestras novias".

— ¿Novias?- dijo riendo.

— Sí. — reí. — el caso es que es lógico que yo me sintiera incomoda al oír esas palabras. ¿pero por qué la que es realmente la novia de uno de ellos se puso nerviosa?

— Estas muy rara. — comento sonriendo. — continua.

— Esta claro que se puso nerviosa porque Matt estaba ahí y no quería que él se enterara de que esta saliendo con Cameron. Además, vi como miró a Matt de reojo preocupada.

— ¡Wow! Azul, eres toda un detective.

— Gracias — reí.

— ¿ Y cual es tu plan?

— ¿Que? — e pregunte confusa.

— Si has descubierto todo esto será porque algo tienes planeado. ¿No?

— Yo... — estaba confundida, ¿realmente podía yo hacer algo?

— Sal con Matt. — propuso Lina mirándome.

— ¿Qué? ¿Estas loca?

— Te golpeó — me recordó ella indignada — debes vengarte.

— Pero...

— Nada de peros. Que sufra, joder.

— ¿ Pero que pasa con Matt? No puedo utilizarlo de ese modo.

— ¿Por que no? — pregunto descarada.

— Es mi amigo.

— ¡Oh! Tú y tu buen corazón, creo que voy a potar. — se burlo.

— No puedo hacerle eso — dije, pero no para Lina. Me lo decía a mi misma ya que una parte de mi quería venganza y veía Matt como un gran arma para herir a Daniela.

— Ya me ha quedado claro, no hace falta que me lo repitas. — reclamó— ¿ por cierto no tenías ensayo con la orquesta?

— ¿Qué? — mire mi reloj de pulsera y maldecí mentalmente, iba a llegar tarde.