God Knows | Maylor

Tutor

La sesión de estudio fue abrumadora. 

Brian y John hablaban de cosas que no entendía, y resolvían ejercicios a una velocidad impresionante. Él apenas encontraba la fórmula, y los otros dos ya habían acabado la sección entera. Sin embargo, valía la pena estar ahí cuando Brian se detenía a explicar algo. 

Roger lo aceptó, sería inevitable ignorar lo que sentía por ese chico de ojos miel, tan dulces como su voz al hablar de los límites de continuidad y el teorema de cocientes de derivadas. Lo hacía con claridad y distinción, como si recitara un pasaje de Hemingway en lugar de matemáticas. Si fuese su profesor atendería más a la clase, aunque no prometía una mejora en sus notas. 

Ni siquiera procesaba lo que decía.

Su atención estaba fijada en el movimiento de sus labios, y de vez en cuando regresaba a sus ojos; eran breves los momentos en los cuales el mayor dejaba de mirar los apuntes del cuaderno para toparse con ese par de esferas azules que lo asechaban.

Roger lo recordaba así de regio, con esa postura correcta y esas facciones definidas, pero creyó que tanta perfección derivaba en parte del vértigo provocado por el alcohol. Pero no, ahí estaba, todo divino frente a él, poniéndolo tonto sin si quiera esforzarse. 

Distraído como era, Brian lo encontraba fascinante. Había aprendido que John era muy observador y para ahorrarse preguntas incómodas optó por ignorar a Roger, y de paso a los nervios que le provocaba la insistente atención que le prestaba. Aunque no dejaba de ser un enigma; lo analizaba en silencio sin emitir emoción alguna, ni siquiera una sonrisa. 

No esperes que sea directo, le había dicho Freddie; pero había una diferencia entre aparentar indiferencia y observarte como si fueses un alienígena. Para ser francos se sentía como uno; quizás Roger lo encontraba extraño. 

"¿Entendiste todo?" preguntó John al finalizar, dirigiéndose al rubio, quien había permanecido en un silencio sepulcral casi toda la tarde. Asintió automáticamente. 

"¿Acabamos?" 

John afirmó, y Roger se apresuró a guardar su cuaderno.

Por la prisa cayeron regadas las varias lecciones que guardaba sin cuidado entre las páginas. Prefería ponerlas ahí que archivarlas en su carpeta y encontrarse con las F's a cada rato. La expresión de sorpresa de Brian y de John al ver sus notas lo hizo sentir estúpido. 

"Vaya, Rog... no creí que en serio te iba tan mal" murmuró el castaño examinando una de las muchas donde destacaba la tinta roja de la profesora.

Roger tiró su cuaderno a un lado para recoger las hojas y las ocultó en su maleta. Al ver la libreta cerca Brian ojeó la página abierta en los apuntes de esa tarde; revisó los pocos ejercicios que resolvió, y estaban todos mal. 

Y ahora soy el típico rubio tonto, pensó Roger al brevemente cruzar miradas con él, tomando el cuaderno bruscamente de sus manos para guardarlo. El rizado rompió el contacto visual, notablemente apenado por la intrusión y por recibir la fulminante negativa en la mirada del rubio. 

Roger exhaló resignado.

"Dije que iba a reprobar, ¿no?" carraspeó, un intento falso de ocultar la vergüenza.

"Eres de último año, si repruebas no vas a poder graduarte" comentó John con una pequeña mueca. Roger encogió sus hombros restándole importancia, como si no se hubiese percatado de ese detalle antes. "¿Seguro que entendiste lo que hicimos?"

El silencio se tornó pesado y sintió sus mejillas arder. 

"¿Sabes? Si necesitas ayuda extra podrías tomar tutorías con Brian," ofreció John tratando de cortar algo de la tensión. El nombrado buscó la mirada de Roger sin éxito, no le agradaba verlo así de retraído de repente. Lo ayudaría si eso quería, definitivamente, pero no parecía ser el caso y una punzada en su pecho se hizo presente. 

¿Era eso rechazo? Quizás. Ni siquiera le había contestado el mensaje sobre la banda, probablemente quería evitarlo. El castaño vio a Brian distraído y lo golpeó bajo la mesa para que dijera algo. La presión, de nuevo, aunque ahora se sentía molestoso al insistir en establecer contacto. 

"Sería un placer ayudarte, puedo tomarme la semana libre y nos reuniríamos en las tardes" comentó atropelladamente evadiendo los nervios. Aparentemente no necesitaba de Freddie para verse forzado a estas situaciones, para eso estaba Deaky.

"¿No tienes tutorías con John?" inquirió. 

"John no importa aquí, yo puedo tomar la prueba sin problemas, Rog" rió el menor de los tres dándole una palmada entusiasta en la espalda. "Anímate. Brian me explicó toda la unidad de física cuántica en dos horas, ni la profesora pudo acabar bien el tema en todo el semestre."

"Tienes quince, ¿y sabes física cuántica?"

"Lo básico... ¿tú no?"

"Elegí biología."

"¿Y entonces?" insistió el menor. 

"Podría considerarlo..." sonrió, regresando a ver al rizado quien le respondió con otra sonrisa, muy aliviado. No tuvieron tiempo de acordar nada, John parecía decidido a servirles de mediador. 

"¡Genial! No te vas a arrepentir. Es más, una sesión con él y vas a querer quedártelo" exclamó emocionado. 

Claro, quedármelo, se dijo. 

A Roger le hubiese gustado sentir esa emoción, o quizás la sentía pero era incapaz de externalizarla. La vida parecía estar tirando a Brian en su camino, y por más que quería quejarse no podía. 

Freddie sabía bien la razón por la cual dejó de salir en citas con chicos, y debió respetar eso antes de presentarle a Brian. Si quería hacerle un bien era que le presente a alguna chica, aunque ambos bien sabían que eso nunca resultaba bien... ya lo habían intentado. Y mientras John se ponía a monologar sobre lo increíble que era el rizado como persona, el aludido y él se miraban en silencio. 

Brian tenía esa manía de descomponerlo con su sonrisa tranquila, pero no podía contagiarse de esa calma. 

"Debería irme" contestó levantándose. 

Sintió el repentino impulso de huir y eso hizo, evitando la mirada de ambos mientras tomaba su mochila, y se dirigía a las escaleras con prisa. Ignoró los gritos de John preguntando si estaba bien, y sin siquiera regresar a ver cruzó la puerta principal.