61. Un nuevo año

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Narra Jean
El tiempo que pasamos en Grecia fue totalmente mágico; la cultura, el Partenón, el centro de Atenas. Todo era bellísimo. Y lo mejor es que pude saber más sobre la Mitología Griega, un tema que la verdad me interesa mucho, y aprendí algunas palabras en Griego. La verdad fue algo muy emocionante.

Después de eso nos trasladamos a Francia, todos esos días en Paris fueron hermosos; fuimos a los Campos Elíseos, la Catedral de Notre Dame, el Palacio de Versalles , visitamos el Louve y el ultimo día Tom me organizo una cena sorpresa en la Torre Eiffel por cumplir 5 meses de novios.

Fue la mejor sorpresa que jamás me habían dado, todo el lugar estaba decorado con luces y en el fondo había una mesa para dos llena de flores y comida, ese día estuvo inolvidable. Sabia que Tom era alguien muy detallista y romántico, pero esta vez se voló de la barda.

Ahora nos encontrábamos en España; primero pasamos unos días en Sevilla, después viajamos hasta Barcelona y ahora nos encontramos en Madrid para pasar Navidad con mi familia. Después de todo Tom decidió aplazar el viaja porque pensó que seria algo lindo estar un tiempo con mi familia. Les juro que es el mejor novio del mundo.

Al llegar y ver todo a mi alrededor un sentimiento de nostalgia vino en mi. Este era mi hogar, había pasado toda mi niñez aqui cuando tenia a toda mi familia. Cada lugar que veía me hacia acordarme de mis padres, siempre que salíamos a pasear o cuando nos llevaban al parque. Todos esos momentos en lo que estábamos juntos.

Era muy difícil regresar aquí, recordar era algo muy dolorosos, pero sabía que debía disfrutar esto al máximo. Tom y yo estamos juntos y eso es todo lo que importa.

-¿Cómo estás tan segura qué les caeré bien?- preguntó Tom por enésima vez al salir del taxi.

-Amor por favor tranquilízate. No tienes porque estar nervioso, estoy segura que ellos te amaran como yo a ti.

Le di un tierno beso en los labios y tomé su mano para que siguiéramos caminando.

-¿Pero en serio crees qué cause una buena impresión?

Me detuve nuevamente y lo mire directamente a los ojos.

-¿Recuerdas cuando conocí por primera vez a tu familia?- él asintió- Bueno en ese momento yo tambien estaba muy preocupada, pero tú me tranquilizaste. Dijiste que entrara ahí siendo yo misma y que vería que todo estaría bien. Entonces es turnos de que tú hagas lo mismo, eres un gran hombre y estoy segura que ellos se darán cuenta tambien.

Me miro con atención y un brillo salió de sus ojos.

-Esta bien

Dimos unos cuantos y nos topamos con una enorme casa, las paredes eran todas blancas y en cada lado se podían ver dos enormes ventanas, desde la distancia se podía ver que este era un lugar acogedor. Ya que en realidad lo era.

Me acerqué a la puerta de madera y toque unas cuantas veces, no tardó mucho en abrirse, y al hacerlo la pude ver parada justo en frente.

-Abuela!!!

Ella al instante abrió sus brazos y la abracé con emoción. Ella era la típica abuela dulce y cariñosa, amaba el tiempo que pasaba con ella ya que en serio era alguien muy divertida. Muchas veces me habían dicho que yo era igual a ella, alguien totalmente amable pero con una pizca de locura en sus venas, al igual que lo era mi madre.

Me estrechó entre sus brazos y se separó poco a poco para verme con más atención. Una sonrisa se asomó de mis labios y al momento me dio un beso en la frente.

-Pero mira que enorme estas, no puedo creerlo. Me recuerdas tanto a tu madre- puso una sonrisa melancólica y yo traté de reconfortarla con mi mirada.

Más que solo amigos [EDITANDO]Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt