Más que solo amigos [EDITANDO]

3. Visitando el cielo

Narra Jean
Al escuchar el despertador vi que eran las 9:00 de la mañana, así que me levante al instante, pude haberme quedado dormida pero preferí despertarme ya que tenía cosas que hacer. Hoy supuse que iba a ser una mañana muy cansada, no habia desempacado absolutamente nada de las maletas y tenia que apurarme ya que quería visitar la fabrica, por que en serio extrañaba ese lugar.

Solo imagínense, entrar a un lugar con millones de torres apiladas de cómics, para mi eso es el cielo. Recuerdo que cuando tenia 15 años, podía pasar horas leyendo cómic tras cómic y no aburrirme nunca, creo que esos son unos de los motivos por el cual se todo sobre el universo Marvel.

Al levantarme fui a abrir mi maleta y comencé a sacar toda mi ropa para acomodarla nuevamente en el armario. Creo que eso es lo que más me molesta de viajar, porque ni si quiera tiene sentido, como vas a guardar tu ropa en un lugar si después vas a sacarla y acomodarla en otro, simplemente es frustrante.

Ya habían pasado unas horas y mi ropa ya estaba acomodada en el armario. Iba a salir de mi cuarto, pero no sin antes cambiarme la pijama, así que saque el conjunto mas casual que encontré y me lo puse.

Al salir de mi habitación me tope con mi abuelo que estaba en la sala leyendo el periódico.

-Hola abuelo.

-Buenos días mi niña, ¿Como dormiste?.

-Muy bien, la verdad es que ya extrañaba mi cama.

-Me da gusto- contestó entre risas.

Camine directamente hacia la puerta para salir, pero él se levanto del sofa y se acerco hacia mi.

-¿A donde vas?- me preguntó.

-A la fabrica.

-Oh no, ni  creas que vas a ir sin antes desayunar algo.

-Pero abuelo- dije haciendo puchero.

-Pero nada, siéntate y come, porfavor- dijo lo mas amable que pudo.

Me acerque a la cocina de mala gana y saque  un tazón y cereal. Al empezar a comer me acerque al ventanal para ver la hermosa vista que teníamos.

Nosotros estábamos  ubicados en el ultimo piso de la torre central, en donde mi abuelo tenia un enorme departamento y en donde yo viví gran parte de mi vida. El lugar tenia 4 habitaciones, un bar (obviamente perteneciente a mi abuelo), una sala en el centro, un comedor para 8 personas, la cocina y el enorme ventanal que cubría toda esa área.

Al terminar de comer me acerque a la cocina y lave mis platos sucios, trataba de hacerlo lo más rápido, estaba perdiendo mucho tiempo.

-Listo,¿feliz?

-Mucho- contestó con una sonrisa burlona.

Me acerque para darle un beso en la mejilla y me dirigí a la entrada. Al salir fui a el ascensor y presione el botón del lobi, segundos después ya estaba ahí, así que empece a caminar lo más rápido que pude.

  -Que tenga un lindo día señorita- dijo la recepcionista al verme pasar.

-Igualmente Kate- respondí con una sonrisa.

Al salir del edificio fui a buscar un carro para poder ir a la fabrica lo más rápido que se pueda.

En los estudios normalmente nos trasladamos en carritos, como los que ocupan los jugadores de golf, ya qué la distancia de un edificio al otro eran muy largas y sería muy tardado ir a pie.

Al llegar al estacionamiento pude encontrarme a Roderic, él se encontraba sentado en uno de los carros haciendo prácticamente nada.

Roderic siempre fue nuestro conductor, él era la persona que siempre me llevaba y me recogía a todos lados, de hecho siempre me recogía del aeropuerto. Pero esta vez no fue así, quién sabe por qué, tal vez tuvo trabajo que hacer. La verdad me daba mucho gusto verlo, él y yo siempre tuvimos una buena amistad.