Capítulo 23: Fuga en masa de Azkaban

Start from the beginning
                                    

Como supongo que te habrán dicho, Ethan es ahora mi tutor legal, por lo que he pasado con él las vacaciones de Navidad. Al igual que su padre, él también es experto en la legeremancia, y ha descubierto que apoyo a la Orden del Fénix. Me ha dicho que debo alejarme de la Orden, o de lo contrario mis seres queridos pagarán las consecuencias. Por tanto, he decidido obedecer, dado que no quiero arriesgarme a que les suceda nada a quienes quiero. Ya se lo he dicho a Dumbledore. Ethan también ha insistido en que me mantendrá alejada de los asuntos de su padre; quiere mantenerme neutral y fuera de peligro, al parecer.

Dada la situación, lo más probable es que no pueda verte pronto, tío, pero espero que todo te vaya bien.

Un saludo,

Alice Black."

Una vez que terminó la carta, fue a la lechucería y la envió por medio de una de las lechuzas del colegio. Después permaneció unos minutos mirando al exterior, preguntándose cómo sería su vida sin tener que preocuparse por su padre ni por la Orden del Fénix, sin magia. Sacudió la cabeza y dio media vuelta, dirigiéndose al Gran Comedor.

No habían pasado muchos días cuando una noticia llegó al colegio gracias a El Profeta, alterando por completo la calma. Alice no recibía el periódico, por lo que en muchas ocasiones no se enteraba de las noticias hasta que alguien, generalmente de su casa, le informaba sobre lo sucedido.

Aquel día fue Theodore quien se acercó a ella durante el desayuno, junto a Draco, y puso el periódico sobre la mesa. Alice vio de inmediato diez fotografías en blanco y negro de personas a las que conocía, dado que había escuchado sus nombres en infinidad de ocasiones. La mayoría de ellos se burlaban en silencio desde las fotografías, o actuaban con aire insolente. Todos ellos eran presos de Azkaban.

A Alice le llamó la atención la fotografía de su tía, Bellatrix Lestrange, que había sido condenada por torturar a Frank y Alice Longbottom hasta causarles una incapacidad permanente. También estaban Antonin Dolohov y Augustus Rookwood, entre otros mortífagos todavía leales.

—¿Qué... ? —comenzó a preguntar Alice, confundida.

—Lee el titular —le indicó Theodore.

La bruja comenzó entonces a leer la noticia, dado que deseaba saber qué era lo que había ocurrido con aquellos presos de Azkaban entre los que se encontraba su tía.

FUGA EN MASA DE AZKABAN EL MINISTERIO TEME QUE BLACK SEA EL «PUNTO DE REUNIÓN» DE ANTIGUOS MORTÍFAGOS

El Ministerio de Magia anunció ayer entrada la noche que se había producido una fuga en masa de Azkaban.

Cornelius Fudge, ministro de Magia, fue entrevistado en su despacho y confirmó que diez prisioneros de la sección de alta seguridad escaparon a primera hora de la noche pasada, y que ya ha informado al Primer Ministro muggle del carácter peligroso de esos individuos.

«Desgraciadamente, nos encontramos en la misma situación en que estábamos hace dos años y medio, cuando huyó el asesino Sirius Black —declaró Fudge ayer por la noche—. Y creemos que las dos fugas están relacionadas. Una huida de esta magnitud sugiere que los fugitivos contaron con ayuda del exterior, y hemos de recordar que Black, el primer preso que logró huir de Azkaban, sería la persona idónea para ayudar a otros a seguir sus pasos. Creemos también que esos individuos, entre los que se encuentra la prima de Black, Bellatrix Lestrange, han acudido a ofrecer apoyo a Black, al que han erigido líder. Sin embargo, estamos haciendo todo lo posible para capturar a los delincuentes, y pedimos a la comunidad mágica que permanezca alerta y actúe con prudencia. No hay que abordar a ninguno de estos individuos bajo ningún concepto.»

—¿Cómo pueden pensar que mi tío Sirius está detrás de la fuga? —preguntó Alice, sin poder dar crédito a lo que leía. Le parecía increíble que el ministro pudiese pensar que Sirius estaba implicado.

—Se niega a aceptar que el Señor Tenebroso ha regresado —comentó Theodore encogiéndose de hombros—. No quiere creer que el mundo mágico esté de nuevo amenazado y que pueda comenzar otra guerra pronto.

—Deberá hacerlo —comentó Alice—. Es innegable el hecho de que los dementores están ahora del lado del Señor Tenebroso. Mientras el Ministerio no haga nada para evitarlo, el Señor Tenebroso aprovechará para hacerse con un gran ejército de criaturas mágicas. Solamente la Orden del Fénix hace algo para evitarlo, pero no cuenta con los suficientes miembros ni el suficiente poder.

La joven se volvió hacia la mesa de Gryffindor, en la que se encontraba Neville Longbottom, con aspecto compungido. Era normal, dado que la mujer que había provocado una enfermedad mental permanente a sus padres había escapado de la prisión y se encontraba libre.

—Longbottom no parece muy contento —se burló Draco, siguiendo la dirección de la mirada de su prima.

—Cállate, Draco —espetó la bruja—. ¿Cómo te sentirías tú si estuviese en libertad quien volvió locos a tus padres?

Ella nunca había hablado personalmente con Neville, pero le había observado, tanto durante las clases como durante las reuniones del Ejército de Dumbledore. Muchos alumnos pensaban que era un chico torpe, pero ella había sabido ver que era alguien valiente, que nunca había tenido oportunidad de demostrar su verdadera valía. Sabía que necesitaba que alguien le animase y creyese en él.

—No me digas que sientes lástima por Longbottom, primita —comentó Malfoy.

—Si no quieres que te lance una maldición imperdonable mientras duermes, te recomiendo cerrar la boca.

El tono duro que empleó la joven persuadió de inmediato a su primo, quien comprendió que no bromeaba y que era capaz de cumplir su amenaza.

—Te recomiendo que hagas lo que dice —rió Theodore—. Parece un ángel, pero puede llegar a ser un verdadero demonio. ¿Verdad, Alice?

Ella no respondió, pero sonrió diabólicamente, haciendo reír a los dos chicos. A ningún alumno de su casa le cabía duda de que Alice Black era alguien con quien no era recomendable enemistarse. Al fin y al cabo, todos eran conscientes de su gran poder y de su cercanía con el hijo del Señor Tenebroso.

Durante los días posteriores, los alumnos se mostraban inquietos debido a la fuga en masa de Azkaban. Los profesores se reunían en grupos reducidos para conversar con el fin de que la profesora Umbridge no pudiese escucharles, y pronto se publicó un nuevo decreto de enseñanza que prohibía a los profesores dar a los alumnos información no relacionada con la asignatura que impartían. Parecía que Umbridge quería mantener a los estudiantes en la ignorancia acerca de la situación.

Alice deseaba saber más sobre lo que estaba ocurriendo, pero ni su hermano ni ningún otro familiar se molestó en enviarle una carta para contarle nada. Su padre continuaba con su idea de mantenerla al margen de todo, y por tanto no la informaba.

El día de San Valentín fue el primero que Alice pasó a solas con Theodore en semanas. Fueron a Hogsmeade, por donde pasearon como una pareja normal, y donde él logró hacerla olvidar todas sus preocupaciones por unas horas.

—Deberíamos hacer esto más a menudo —comentó él—. Últimamente apenas pasamos tiempo juntos, siento como si estuviésemos alejados...

—Es solamente por las circunstancias —se apresuró a decir ella, temiendo que él pensase algo incorrecto—. Por supuesto que quiero estar contigo, Theo, es solamente que están ocurriendo demasiadas cosas.

—Lo entiendo, pero Alice... las relaciones hay que cuidarlas. Hay veces en las que es necesario tener claras las prioridades, y que no se puede tener todo. Deberías tenerlo en cuenta...

No volvieron a tocar el tema durante lo que quedaba de día, pero aquellas palabras hicieron reflexionar a la bruja. ¿Cuáles eran realmente sus prioridades? Su padre y su hermano eran las más importantes, pero no podía ayudarles en aquel momento. Después de su familia, Theodore era probablemente la persona más importante de su vida, y estaba prácticamente segura de que no podría haber llegado hasta donde estaba sin contar con su apoyo. No, no podía perderle.

Tal vez hubiese llegado el momento de poner realmente en orden sus prioridades.

Los herederos de Voldemort  ✔️Where stories live. Discover now