No Me Dejes Caer Jamás #1 [COMPLETA] En Edicion

C A P I T U L O 59

TRES SEMANAS DESPUÉS...

Definitivamente no puedo creer cómo pasaron los días después de la propuesta de Zab. Fué lo más hermoso, la manera en que lo hizo y cada uno de los detalles, nunca pensé que tramara algo así. Cuando les dimos la noticia a todos nos felicitaron y han estado tan feliz por nosotros. Santo cielo, no sólo eso. Me pidió que nos casáramos en tres semanas las cuales a partir de ese momento han pasado tan de prisa que no puedo creer que mañana me pasaré con el hombre de mi vida.

Sonrío como tonta mirando el anillo en mi dedo anular. Es hermoso, con una piedra pequeña y sencilla dándole un toque único.

Estoy con Zoe en un club,"Última noche para disfrutar mi soltería"
como dice ella, Zab salió con Calvin, aunque hubiera preferido que saliéramos juntos, tengo deseo de verlo y dormir abrazada a él después de casi una semana que no lo hago, Sandra y Zoe insistieron que deberíamos dormir separados la última semana próxima a la boda, que sería todo más intenso, se lo propuse a Zab el cual se negó rotundamente, entonces cedí, no quería estar lejos de mí y la verdad yo tampoco de él. Pero de buenas a primeras cambió de opinión. Cuando me lo dijo estuve confundida y sólo pensé, "Que bipolar"

Ahora la verdad los días separados me ha parecido como un milenio, pero aunque no hemos dormido juntos, nos hemos visto cada día y pasado tiempo en común. En cambio hoy no lo he visto en ningún momento, se supone que ya no nos podemos ver, pues porque ya nuestra boda es mañana, Dios, solo él puede saber lo ansiosa y nerviosa que me siento cada vez que pienso en ello.

Le pedí a Zab que fuera una ceremonia sencilla, algo íntimo con las personas más cercanas y su familia. Será en un lugar un poco apartado y muy hermoso, con nuestros invitados, Algunos compañeros de Zab y sus esposas, su jefe Arthur, su hermana y los padrinos que serán Calvin y su madre. Zab decidió que fuera su madre porque quería concederle ese sueño y yo escogí a Calvin porque aunque cuando lo conocí casi me mata es y ha sido una persona super especial en nuestra vida, al igual que Zoe.

¡Dios, me voy a casar!

Crece esa sensación de nervios en mi estómago y trato de relajarme. Tomo un sorbo de mi copa y la vuelvo a poner en la mesa al darme cuenta que ya el alcohol está haciendo efecto en mi cabeza además de el cansancio que me cargo.

Hasta ahora todo ha salido perfecto, la madre de Zab ha sido una fundamental ayuda ya que se ha encargado de la decoración del lugar y la velada, lo demás pues Zab y yo...

Miro el reloj y me doy cuenta que ya han pasado algunos diez minutos desde que Zoe fué al servicio, le dije que cuando regresara nos iríamos, estoy muerta del cansancio y no quiero desvelarme demasiado. Quiero que todo sea perfecto, porque sé que es uno de los días con los que siempre he soñado.

Una de las mejores cosas que hice fué seleccionar mi vestido, aunque al principio me pareció una tortura. Después de tanto vestidos que no me parecían el ideal, pues encontré el mejor. Desde el momento que lo ví me dí cuenta que era con el que me quería casar con mi chico. Trato de imaginarme cómo será, pero solo logro que se haga un apretado nudo en mi estómago, entonces siento mi teléfono vibrar en la mesa sacándome de mis ensoñaciones y al ver la pantalla sonrío.

Zab...

Me retiro un poco para poder hablar y lo tomo inmediatamente.

—Hola... — hablo sonriendo.

—Nada de Stripper —dice tan pronto como me escucha y tengo que reprimir una carcajada.