Breaking /Teen Wolf |running#4|

XXXIII

Hannah se quedó viendo la lluvia hasta que amaneció.

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Scott no durmió tampoco.

No iba a morder a Hayden. No podía hacerlo. No importaban las crueles palabras de Liam, los reclamos sobre dónde estaba Hannah y la desesperación y el odio con que Liam lo miraba. No podía.

Hayden estaba demasiado débil. La mataría. No podía ser la única manera de salvarla. No.

Las palabras de Liam aún resonaban en su cabeza, sin poder olvidarlas.

"Prometiste qué harías todo para salvarla".

"Hannah lo haría". 

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Hannah se fue antes de que Stiles despertara. Dejó panqueques listos, con una nota para que se los llevara a Malia pero casi había ignorado eso. Las palabras trazadas en caligrafía desordenada se quedaron impregnadas en Stiles como si Hannah las hubiera escrito en su piel.

"Lo lamento. Tengo que arreglar esto. Tengo que ir con Scotty. Te amo".

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Scott no podía creer cuando Hannah entró a la clínica veterinaria la mañana siguiente. En cuanto llegó lo ignoró olímpicamente, pero en cuanto analizó la situación, se encaminó hacia Scott decididamente.

—¿Por qué no la mordiste? —preguntó en voz baja, aunque fue inútil. Liam los miraba atentamente, sin disimularlo. Scott se removió, incapaz de mirarla a los ojos.

—No sabía si sobreviviría a la mordedura.

—Bueno, pues es obvio que sus posibilidades de sobrevivir sin ella tampoco son muy altas.

—¿Qué querías que hiciera?

—Que la mordieras. Era lo que necesitaba que hicieras —Scott se quedó callado. Al darse cuenta de que no obtendría más de él, Hannah se dio media vuelta. Scott la detuvo, tomándola del brazo. Ambos bajaron la mirada a donde su mano estaba posada posesivamente. Hannah alzó la mirada, retadora—. Si vas a decirme algo, ni siquiera lo intentes. A mí siempre me vas a tener. A Stiles no. Yo no soy la persona a la que le debes una explicación y un momento. 

Scott se quedó sin habla, pero la dejó ir. Hannah caminó hacia Liam, el cual era un desastre. Inmediatamente lo envolvió en sus brazos, sosteniéndolo.

—Todo va a estar bien. No importa qué.

—¿Tú la morderías, cierto? Si pudieras.

—No importa lo que yo haría. No sirve de nada. No puedo morderla, Liam. Solo un Alfa.

—¿No conoces a uno que pueda venir? —preguntó Liam, desesperado. Hannah negó con la cabeza.

—No —dijo suavemente—. Solo conozco gente que solía ser Alfa y todos están demasiado lejos en este momento —musitó, pensando en Ethan, Isaac, Derek, Peter...—. Pero algo podremos hacer.

—¿Por qué? ¿Porque Scott lo dice? —Hannah hizo una mueca ante su sarcasmo pero no dijo nada.

Nadie en la habitación lo decía en voz alta, pero todos sabrían que Hayden moriría. Tal vez en segundos, minutos, horas... Pero lo haría. Su mirada se cruzó con la de Melissa, quien la miraba comprensiva.