Aquí te esperamos

8.6K 776 74
                                    

—¿Y mañana se van a su cosa esa, no? —dice Fer entre un pequeño hipo del cual ella misma se ríe.

—Sí —me río yo también—. Salimos a las cinco de la mañana y aquí seguimos. —Y ahora me carcajeo.

—¿Cinco de la mañana en sábado? ¿A dónde van? —pregunta Eric.

—Tienen un concurso, amor. Algo de danza aérea —dice tiernamente Fer y lo toma de la mano.

—Vaya, danza aérea —dice sorprendido.

—Así es —me encojo de hombros.

—Además es buenísima y... —comienza a decir Fer pero alguien nos interrumpe.

Más específicamente, una mano sobre mi hombro.
La presión es un tanto fuerte e inconsistente, y lo rodea cierto olor a alcohol, por lo que supongo que también tomó.

Volteo a ver justo cuando esa persona comienza a hablar.

—Ven, vamos a bailar —me dice él en una enorme sonrisa.

Yo corro a pedir con la mirada que Fernanda y Eric me salven, pero ella solo me guiña el ojo.

—Anda, tigresa, aquí te esperamos —dice con una risa descontrolada mi amiga, encimándose cada vez más en su novio.

—Yo... —me rasco la nuca y suelto una risita.

Cuando vuelvo a voltear ella ya está prestándole únicamente atención a su novio.

—Por favor. —Me extiende la mano y me sonríe todavía parado junto a mí.

Bueno, aunque probablemente sea el alcohol hablando: ¿Por qué no?
Se ve bastante guapo y después de todo el aire de la noche y la música a todo volumen cambian tu perspectiva de las personas.

«Y el alcohol»

Pero al verme sonriendo ante la posibilidad de levantarme y bailar con él, decido ponerme de pie y darle un enorme trago más a mi bebida.
Si tanto dicen las chicas que estar tan cerca de un hombre las emociona mucho, ¿por qué no lo intento yo también y vemos qué pasa?

Sé que hace rato tenía miedo de una situación parecida, pero justo en este momento me siento capaz de demostrar que no. No soy una aburrida antisocial.
Y aunque no lo conozco bien, ¿qué importa? Al diablo con mi idea de no querer acercarme a un chico cuya vida entera no me sé de memoria.
(Es broma, no tengo esa idea... Yo... Solo... Argh) Necesito un trago más, y ya.

Al final dejo mi vaso en la mesita, junto a Fer y Eric que ya se están besando intensamente. Ella está sobre su regazo en la misma silla que él y yo no sé en qué momento pasaron a esa posición.

Siento mis piernas tambalearse un poco y la sangre correr por todo mi cuerpo, pero mis pensamientos siguen siendo coherentes. Todavía tengo definitivamente todo bajo control.
Pero me siento más enérgica, más libre y con menos ataduras en la cabeza.

Siento un brazo rodear mi cintura mientras caminamos y la espalda me hace cosquillas.
Por fin llegamos a un lugar de la casa donde la gente se amontonó para bailar o simplemente pegar sus cuerpos.

Tengo muy claro que mi juicio se está nublando un poquito, pues en una situación normal no sentiría un cosquilleo agradable mientras una mano pasa por mi espalda baja y me obliga a acercarme más y rodear sus hombros con mis brazos.

Con que así se siente bailar con un chico que huele tan bien.
Hundo mi cara en su cuello y aspiro su loción combinada con mucho alcohol y restos de cigarro impregnado.
Se siente bien.

Incluso algo en mi interior me pide acercarme más y no me sorprende estar pensando así. Sé que así se siente lo que tanto alborota a las chicas.
Ya tuve novio antes, sé lo que es aquel cosquilleo cuando estás tan pegada a alguien que consideras atractivo. Aunque creo que me acabo de dar cuenta de que lo considero atractivo.

Nos quedamos un rato así, moviéndonos de lado a lado.
Pero mi razonamiento funciona todavía bastante bien como para reaccionar y comprender lo extraño que es esto. Por eso cuando veo su rostro mirándome, a punto de acercar sus labios a los míos, comprendo que pareceré toda una chica fácil si sigo con esto. Y no es porque no tenga ganas de hacerlo, pero simplemente es muy extraño. Es un completo desconocido.

Digo, en realidad no conozco a Esteban.

Solo sé que va en sexto y que hablé con él esta mañana. Y también que vio mi pequeña escena con Alex. Seguro piensa que cualquiera puede solo acercarme a él descaradamente y plantarme un beso.

Por eso decido que no es el mejor momento para continuar con esto, y a pesar de que me la estaba pasando bien con él, me disculpo y me dirijo al jardín.
A fin de cuentas no parece importarle demasiado, pues ya está bastante perdido y solamente continúa con su camino para buscar más chicas.

Me alegra no haber hecho nada, pero fue emocionante sentirme así y además no tener nada de lo que arrepentirme.

Por lo menos acabo de comprobar que no soy asexual o algo por el estilo.

No obstante, cuando regreso al jardín mis amigos ya no están ahí, por lo que puedo muy fácilmente suponer que fueron a buscarse un cuarto.

Solo me queda buscar a Jade. Todavía es muy temprano y no creo que la diversión se haya acabado, pero para seguir pasándola bien necesito encontrar a mi amiga.

Así que comienzo a pasearme entre la gente moviéndome al ritmo de la música, con la esperanza de encontrarla pronto.

Es una apuesta ©Where stories live. Discover now