| one shoots |

| 100 | Martin Garrix

— Basta, pareces un niño.— reclamo dándole un manotazo al chico a mi lado.

— Tú eres una niña.— contesta indignado y rueda los ojos, pero al final he logrado que deje de jalar mi cabello. O al menos eso creía hasta que volvió a enredar uno de sus dedos en uno de los mechones de mi cabello y jaló de el.

— Voy a golpear tu linda cara.— lo empujo y él ríe mientras retrocede.

Seguimos caminando y no puedo evitar sacar continuas y múltiples tomas con mi cámara fotográfica. Estoy obsesionada con los parques y zonas verdes de todas las ciudades, de todos los países. Cada uno es tan diferente.

Martín y yo nos sentamos en el césped, yo repaso todas las fotografías que he tomado hasta ahora mientras él corre detrás de un hombre que vende helados. Vuelve a los pocos minutos y retoma su lugar a mi lado, estira el dulce en varias ocasiones hacia mi logrando que yo lo pruebe levemente antes de que él lo aleje de mi rápidamente, ruedo los ojos cada vez que lo hace pero no aparto la vista de mi cámara y no dejo de probar el helado.

Se supone que estamos esperando a un amigo de Martin que nos dará un tour más seguro y eficiente por la ciudad. No dude de hacer de un parque nuestro punto de encuentro.

— Apuesto a que no puedes llegar más rápido que yo a ese pequeño restaurante.— alzo la vista únicamente para ver la distancia del restaurante y regreso la mirada a mis fotografías.

— Eso es estupido, ya hemos hecho carreras a esa distancia. Yo gane.— él rueda los ojos.

— Me lastime el pie ese día.— vamos a seguir discutiendo cuando su amigo hace acto de presencia.

— ¡Peter, amigo! — Martin golpea su espalda y estrecha su mano, solo para después girar hacia mi y señalarme con su mano.— Ella es Moony.

— Luna, en realidad, ese es sólo un apodo qué él invento y creyó que era muy bueno y creativo.— digo mientras estrecho su mano.

— Es fabuloso. Y muy bonito si me lo preguntas. Y tuve que idear algo después de que me arrojó un zapato cansada de que la llamara Luna Lovegood.

— Esa solo era la excusa que usabas para poder llamarme bruja.— ruedo los ojos mientras Peter suelta varias risas. Conversamos varios minutos hasta que Martin vuelve a insistir con el asunto de la carrera.

— Ya te dije que es algo estupido, además jamás podrías alcanzarme, ya qué...— corto mi propia oración y comienzo a correr.

— ¡Oye! — oigo que grita.— ¡Joder, eres una tramposa!

Su grito se ve ahogado y de reojo veo que comienza a correr, le basta dar unas cuantas zancadas para nivelarme el juego. Al final mi improvisada hazaña me cobra factura y pierdo el aire rápidamente. Tengo que parar repentinamente y veo su castaña cabellera y su arrogante sonrisa pasar a un lado mío.

— ¡Ja, gane, eres una tramposa! — celebra y le doy un gran empujón. Observo a Peter caminar hacia nosotros mientras ríe. Al parecer dimos un buen espectáculo. Después decidimos que sería buena idea entrar a ese mismo restaurante a almorzar.

Pasamos un buen rato ahí, Peter hace bromas que hacen que ambos soltemos risas un poco escandalosas, me parece que la vieja mujer en la mesa a lado nuestro está a punto de llamar al gerente.

— Martín, estoy llena.— murmuro mirando mi plato dónde aún queda una buena porción de comida.

— Siempre haces lo mismo, Moony.— regaña pero aún así toma mi plato y comienza a comer de él.— Siempre pides algo grande que sabes que no vas a terminarte.

— No me molestes.

— ¿Te molesto? — dice mientras comienza a darme leves empujones.

Comienzo a maldecir en español solo para que el suelte una carcajada y comience a hablarme en holandés.

— Nadie entiende lo que dices.

— Igualmente.

— Ni siquiera puedo decir tu nombre de nacimiento por qué la mujer a nuestro lado creerá que estoy maldiciendo.

Peter sigue observándonos mientras suelta risas ocasionales. Niega mientras nos ve y cruza los brazos sobre su pecho.

— Son los mejores amigos que he visto en el mundo, en serio. Amigo, ella es de las mejores chicas que he conocido.— ambos nos miramos y soltamos una gran carcajada. Peter nos observa confundido varios segundos.

— Él es mi novio.— contesto sonriendo.— Bueno, aunque tienes razón, es mi mejor amigo.— Martín rodea mis hombros con su brazo y deja un beso a un lado de mi cabeza.

— Vaya.— suspira Peter.— Nunca lo hubiera imaginado. Amigo, si yo retara de esa manera a mi chica ella probablemente cortaría mi cabeza.— ambos soltamos una risa mientras negamos.

— Fuimos mejores amigos durante muchísimo tiempo.— dice Martín mientras se encoge de hombros.— Lo único que hicimos con nuestra relación fue agregarle besos y sexo.

Le doy un golpe tan rápido y fuerte que hace que pierda el aire varios segundos.

— Idiota.— murmuro.

— ¡Eso realmente me ha dolido! — ruedo los ojos y como Peter ha estado haciendo las últimas horas, se ríe de nosotros y nuestro extraño comportamiento. Al final se levanta para ir al baño y cuando Martín y yo hemos quedado solos, él sujeta mi mentón y hace que nuestros labios queden repentinamente juntos. El movimiento me toma desprevenida y aunque por supuesto sigo el beso, no estaba preparada.

— Eres un bruto.— murmuro mientras él ríe y vuelve a acercar sus labios a los míos.

— Te amo, Moony.— murmura en mi oído, sonrío y rodeo su cuello con mis brazos.

— Te amo, Martjiinn.— él suelta una risa y coloca su cabeza en el hueco de mi cuello.

— Me parece que quisiste decir mi nombre pero la verdad no sé que fue eso.— siento como deja un beso en mi cuello y lo tomo de las mejillas.

— Vete al infierno, amor mío.— sonríe y me toma de la cintura para volver a juntar sus labios fuertemente con los míos.

— — — — —
Bendita corrección que ha hecho todo moverse.
Bienvenidos al nuevo OS 100.
Gracias (de nuevo)

(...)

alo.
OS basado en la relación real de una mis mejores amigas 😆, juro que es una joya verla con su novio.

Espero que les haya gustado. 👌🏻

Déjenme sus comentarios para saber qué opinan de los OS ❤️

nos vemos.