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#SábadoDeHopeless 7w7



—...Y además, tengo que agradecer la colaboración que tuvieron con el club de Tecnología junto con el de Medio Ambiente por haber aportado su parte y dejar los aparatos electrónicos por cuarenta y ocho horas. Según la dirección central de energía... —la vicerrectora revisó entre sus notas, sin darse cuenta de que un papel estaba en el suelo.

La cafetería era el lugar donde anunciaba los nuevos comunicados para todo el cuerpo estudiantil. Era raro que no usara el gigantesco auditorio estos días, pero de seguro era porque todos frecuentaban más a menudo un lugar para almorzar que en donde algunos se ausentaban por considerar aburridos los enunciados. Volviendo al tema principal, di una mirada desde nuestra mesa en todas direcciones mientras sorbía del envase de jugo. Como ya lo dije: algunos prestaban atención, otros no.

George estaba a mi lado y por parecer bromista, hizo leves sonidos simulando ronquidos. Pauline, que estaba a su izquierda rió. Blake sólo miraba su plato de comida.

Las puertas de la cafetería se abrieron y con una mano en el bolsillo de su chaqueta, Reece quedó atónito al lado de la vicerrectora. Bajó la mirada y se percató del papel a detrás de la mujer. Irrumpió en sus palabras tocándole el hombro.

—... Oh, señor Bibby —tomó el papel en sus manos y sonrió agradecida. Reece asintió y caminó entre las mesas y miradas hacía nuestro lugar—. Como decía... el ochenta y cuatro por ciento del uso de electricidad se redujo. Veo que estuvieron muy comprometidos en la situación. Ojalá esto haya servido de experiencia para aprender a cuidar el mundo en el que viven y espero que se dieran cuenta de todas las actividades que pueden hacer en lugar de estar frente a una pantalla todo el tiempo... Ahora, pasemos a lo siguiente...

Reece captó mi mirada en el momento que se situó en la silla junto a Blake, noté que el castaño también tenía posada su mirada en mi y ahora Reece lo observaba con una expresión tan neutral que podría haber dicho que no era propia de su actitud. El duelo de miradas concluyó con la atención del ojiverde en otra cosa pero Blake aún me veía. Me resté de hombros al él, en señal de no entender nada de lo que estaba ocurriendo. Era la primera vez que Reece aparecía en el día y ni siquiera había saludado.

En el momento que oí sus palabras en el día fueron cuando salí de los vestuarios para dirigirme a clases de actividad física. Pauline se había adelantado a mi y salió de prisa de los cambiadores para ayudar a la profesora Penny a colgar las redes para practicar deportes, eso había dicho. Ajusté mi coleta por última vez y me acerqué a la cancha de deportes tronando los huesos de mi cuello y al momento de querer pasar tranquilamente hasta donde se encontraba el grupo de chicas, su voz resonó a mis espaldas.

—...Me encontré con ella y hablé en las primeras horas, le mencioné que fue un error y me disculpé. No... —reducía lentamente mis pasos para poder escuchar con más claridad—, demonios, no actuó como yo esperaba. Y lo lamenté. Lo hice. Hasta tuve contacto físico con ella por primera vez en mi vida, no supe que más hacer hacer...

Mi imprudencia y excesiva curiosidad fue lo que me costó que él se alejara por todo el día. Me detuve en seco, consternada por saber a lo que Reece podría estar refiriéndose y giré para poder ver a ambos chicos.

—¿Qué pasó?, ¿ocurrió algo malo, Reece?

Me ignoró. No supe la razón hasta dentro de unos minutos después pero mientras eso estaba por ocurrir, nos dirigió una última mirada a George y a mi y se alejó de la cancha de deportes.

—George, ¿acaso sólo a ti te dirige la palabra? No entien... —cocí con una aguja imaginaria mi boca para abstenerme de todo lo que podría decir y luego me arrepentiría, en lugar de escupir más cosas, me dediqué a esperar una respuesta del rubio.

Apretó los labios hasta que formó una fina línea y se acercó hasta estar a dos pasos de mi.

—Habló con ella —no comprendí—. Habló con ella sobré lo que pasó en la fiesta —Kennedy. Exacto—. No me contó mucho, pero por lo poco que dijo creo que fue algo con... sentimientos de por medio.

¿Y por eso actuaba extraño?

Asentí cortamente, mirando la grava y removiendo las piedrecillas con mi zapato. No quise decir nada más, así que luego de soltar un apenas perceptible suspiro, elevé mis ojos de nuevo a George y ambos nos dirigimos con nuestros respectivos grupos para comenzar con la clase, evitar posibles inconvenientes y reprendidas por parte de los profesores. Después de todo, si Reece no quería compartir lo que le había ocurrido, debía de tener algún o varios motivos.

Por otra parte, Penny Huff estaba de buen humor; ese era un motivo de estar más aliviadas. Tal vez era porque consiguió una cita, bajó de peso, o quizás ganó el juicio de su más reciente divorcio, pero los motivos no eran tan importantes cuando este tipo de situaciones se presentaban. Todo se resumió a armar un pequeño partido de volley luego de pre-calentar. Cinco chicas en el equipo y una capitana, y por supuesto -aunque de igual manera tomándome por sorpresa-, fui elegida como última opción, creía que alguien preferiría jugar con medio equipo completo a que conmigo.

—Lorraine, ¿podrías ir al centro, por favor? —pidió Jocelyn, quien tomaba la clase de hoy a pesar de pertenecer al grupo de último año. Su circular, pálido y delicado rostro explotando en la asombro de unos celestes ojos y cabello castaño me pareció haberla visto en otra ocasión, pero en ese momento si me preguntaran de dónde mi respuesta sería nula. Una melodía se asemejó con mi recuerdo. Sí, una melodía.

No taladré más mis pensamientos y planté duramente mi pié en el lugar que me correspondía. Recorrí todo el lugar con la mirada hasta más adelante, visualizando al equipo masculino, y al final frente a mi y la larga red de volley, el rostro de Pauline sonriéndome. Ella estaba en el equipo contrario.

—¡Vamos, señoritas, prepárense!

Luego de alertarme por el rugido de Huff, mi mirada recayó en la pelirroja cabellera suelta a mi derecha.

Noté a Kennedy sorber su nariz dos veces tan rápido como quité la mueca de mi rostro. Su melena era una cubierta que prohibía dar el paso para ver el perfil de su rostro.

—Eh... ¿Kennedy? —inquirí, algo preocupada.

Escuché un tenue << ¿Uh-hum? >>.

—¿T-tu te encuentras bien?

Volteó el rostro y la imagen mental que tenía se estrujó como mi caja de jugo esta mañana. La maraña caía en sus facciones, sus ojos y la punta de su nariz del mismo color que su cabello, sin mencionar los restos de agua salada esparcidos por sus mejillas y su sudadera.

—No, no estás bien. —Mierda, Lorraine, ella debe saberlo—. Lo lamento, quiero decir... ¿Qué ocurrió? —esperé una respuesta distinta a un " Nada" pero claramente un nada no puede ocurrir estando en un estado casi demacrado— ¿Está Lou por ahí?—negó— ¿Quieres que le pida permiso a la entrenadora para que vayas a los cambiadores? —asintió —. Ven conmigo. —Tomé su muñeca y luego de pedirle a Jocelyn que nos diera un momento la llevé con Penny. La dejó ir sin reparos, quise pedirle si podría acompañarla pero tal vez preferiría estar un rato sola hasta que dejara de eliminar sustancias por los lagrimales. No dijo nada cuando se alejó y yo tampoco lo hice. Simple. Ella ingresó al interior de la escuela.

Mis sospechas acerca de todo lo que estaba pasando se confirmaron y Pauline pareció notarlo cuando la descubrí observando toda la escena, pero no sólo ella, sino todas las chicas de la clase.



La que no actualiza desde el año pasado (ahr) reapareció! We we we, las vacaciones me tienen de excesiva ociosa lol.

¿Qué suponen qué pasó con Reece y Kennedy? Se prendió esta mie...

Nos leemos,

Sandy <4


AWANTEN AWANTEN!!1! CUÉNTEME QUÉ LES PARECIÓ EL VIDEO DE #PERFUME?! NECESITABA ESA VERSIÓN ESTUDIO DE SUS VOCES Y AHORA VIDEO ASDFÑKFHXY. ESTOY ORGULLOSA DE LOS CHICOS, SU PRIMER VÍDEO OFICIAL, SE MERECEN MUCHO ÉXITO Y LO MEJOR DEL MUNDO ES VER SUS ROSTROS SONRIENTES DISFRUTANDO DE HACER LO QUE AMAN. Me siento una mamá orgullosa si.

Ahora sí,
cambio y fuera.

Hopeless - NHCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora