Capítulo 69

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Cerró los ojos luego de responder las últimas preguntas, sintiendo muchas nauseas de repente y mucho miedo pensando que podía desmayarse, sin embargo nadie se daba cuenta de que no se sentía bien. Bastó que terminase de hablar para que todos se pararan de sus asientos, aplaudiendo extremadamente emocionados por la fuerza y valentía de una muchacha de 19 años que sufría. Aplausos, muestras de cariño, con su experiencia iba a ayudar a muchos a tomar consciencia de no dejarse caer. Después de unos segundos abrió los ojos de nuevo pero su mirada se dirigió hacia la de Lauren. No, la verdad es que no podía verla del todo bien porque estaba sentada casi en los últimos asientos del auditorio y a esa distancia las cosas se volvían bastante borrosas. Sólo dibujó una sonrisa porque sabía que estaba allí sentada, en las buenas y en las malas siempre a su lado se encontraba. Una mujer rubia levantó la mano para hacer una pregunta, aunque la charla había terminado nadie se había retirado.

XX: ¿Podría, antes de retirarse, decir una frase otra vez que nos inspire? –habían quedado maravillados con su forma de expresarse tan madura.

Camila: Creo que el cielo es algo lleno de paz que los mortales tememos mucho, pero al final es algo que en el fondo deseamos -volvieron a aplaudirla por su fortaleza y gracia al expresarse. Aunque habían acudido muchísima personas y hasta pacientes, gente y funcionarios miraban por la puerta, no se había autorizado la entrada de los medios de comunicación pues la morena así lo había deseado.

Quien quisiera escucharla estaba cordialmente invitado, pero sin grabar videos. Quería tener aunque sea un poco de privacidad en ese sentido, además de que si salía en la televisión dando la charla, su abuela o cualquier pariente podría enterase de la verdad.

Poco a poco se fueron yendo, otros conversaban con ella o simplemente se acercaban para decirle adiós.

Clara se acercó y la abrazó fuertemente. Aunque no estuvieron de acuerdo en que tuvieran una relación a escondidas de Fiore, no podían entrometerse en la vida de su hija.

Clara: Que valiente eres Camila –le apretó dulcemente una mejilla mientras la morena sonreía, que agrado hubiese sido tenerlos de suegros toda la vida. Sintió que se acercaba su hija y con el resto se retiraron para dejarlas a solas, la puerta del auditorio se cerró aunque todos afuera morían por saber que estaba pasando.

Lauren: Me cuesta hablar, realmente me sorprendiste –acarició su mejilla con ternura mientras esta acurrucaba su rostro contra su mano- ¿te sientes bien?

Camila: Anímicamente sí, pero siento un poco de cansancio y náuseas –escondió su rostro en el cuello de ésta, dejando que la abrazara fuertemente.

Lauren: Va a pasar, tranquila –le murmuraba al oído exquisitamente. Había hecho un gran esfuerzo, la charla salió de maravilla y de seguro muchos recordarían esto- debo contarte algo –le sostuvo el rostro con delicadeza, se notaba un poco pálida- hoy es el último día que trabajaré aquí.

Camila: -hizo una mueca- ¿por qué?

Lauren: Es que cuando decidí volver a la clínica,  le dije al directorque sólo sería por un mes, luego dejaría mi trabajo en pausa y me dedicaría únicamente a cuidarte y aprovechar el mayor tiempo posible juntas -a la morena sus ojitos se le llenaron de lágrimas. ¿Acaso Lauren también sentiría que el "final" estaba cerca?- vamos con los demás a ver las otras actividades –besó sus labios con delicadeza, porque cualquier movimiento brusco aumentaba el dolor de cabeza o las náuseas de Camila.

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Viernes 9 de marzo 2016

Se miraba al espejo en su habitación con los ojos llenos de lágrimas, pasando una y otra vez su mano frente a su ojo derecho. Apretó los labios y llevó ambas manos a su cara para contener la angustia. No debía sorprenderle, pero de todas maneras le dolía el hecho de que del ojo derecho ya estaba casi totalmente ciega, sólo podía distinguir los cambios de lo claro a oscuro. ¿Cuánto faltaría para que pasara lo mismo con el izquierdo? Caminó hacia la cocina, tomó un vaso con jugo de durazno y bebió con ello los medicamentos, aunque últimamente no le surtían tanto efecto. Inclinó el cuerpo hacia atrás para notar que su celular estaba sobre la mesa de la pequeña sala de estar del departamento. Respiró profundamente a medida que se acercaba porque no podía dilatar las cosas más tiempo, debía ser responsable y si iba a fallecer quería hacer las cosas bien, dejar todo en orden para estar en paz. Llamó a Shawn pero al parecer se encontraba en clases, así que optó por llamar a Dianna para que la acompañase a un lugar importante.

Bitter Sweet Symphony {Adaptación Camren}Where stories live. Discover now