Bitter Sweet Symphony {Adaptación Camren}

Capítulo 35

Lentamente, mientras sentía las gotas de agua caer sobre su cabello, dejó de besar a Camila. Aquello la morena no lo sabía, no lo tenían planeado previamente pero bastó que Shawn le susurrara en el oído que aquel beso había sido fingido, no tenía intenciones de conquistarla, meramente había sido actuación para ver si surtía efecto en una persona. 

Jauregui levantó la barbilla sin dejar de ver como Shawn susurraba cosas coquetamente en la oreja de Camila, imagen que parecían provocarle profundas ganas de romper o golpearlo todo. 

Se apartó de su amiga hacia un costado para dejar que el agua volviera a caer coquetamente en su cuerpo. Eran increíbles las ganas que poseía por reírse de la situación. Camila besaba bien y eso no podía negarlo, pero no estaba enamorado de ella. Además, como no divertirse si sentía la mirada asesina de Lauren sobre él. "Touché" murmuró complacido pues había dado en el clavo. Era obvio que ella sentía celos de aquel contacto que tuvo con la morena.

Llevó un dedo a sus labios, inclinando el rostro de costado y dejando que su hombro quedase descubierto. Su gracia, su mirada y sonrisa desafiantemente coqueta hacia la cámara, estaba provocando con muchas fuerzas a la mujer de ojos verdes. Decidió otra vez hacer contacto visual con ella para intimidarla "inocentemente", no quería creer ni hacerse ilusiones, sería su imaginación ¿O la Dra. Jauregui recorría cada rincón de su cuerpo con la mirada? Se atrevió a sonreírle y movió sus ojos marrones otra vez al lente de la cámara mientras el fotógrafo y Fiore la alentaban e indicaban como posar.

"Para tener casi los 19 años está hermosa, más que hermosa, es jodidamente sensual" pensó en un segundo, mas bastó darse cuenta de que su instinto salía a flote por sobre la razón, como para discutir internamente consigo misma y fruncir el ceño. La sesión de fotos había terminado, todos allí presentes la aplaudieron a medida que un asistente se acercaba para entregarle una toalla, estaba totalmente mojada.

Fiore: Esa era mi sorpresa -Lauren la abrazó por la cintura- contraté a Camila para que tuviese un empleo propio. Sin querer la otra vez escuche que necesitaba dinero, que buscaba trabajo y bueno, tú sabes que tengo una hermana de su misma edad, sé lo que tiene y decidí prestarle ayuda, toda la que necesite.

Lauren: -apoyó su frente con la de ella- Eres maravillosa, una italiana divina, muchas gracias por eso, no sabes cuan feliz me pone que ella reciba apoyo. -Se acercó para darle un beso en los labios mientras la gran protagonista de esto desviaba la mirada hacia la nada. Dianna le hizo una seña con los ojos a Shawn para que se retiraran del lugar pues ambos tenían que hablar. Otro punto y esta vez a favor de él, había captado la atención de la rubia.

Fiore: Tengo que separarme de ti 10 minutos -vio su teléfono celular- ¿Me esperarías un momento? –la ojiverde asintió.

Una vez que la italiana se había ido, volteó su cuerpo hacia el estudio, notando que solamente se encontraban algunos asistentes de cámara. Muy rápido sus ojos viajaron por cada rincón de allí sin ver a quien deseaba. Cautelosa y decididamente caminó hacia un corredor estrecho, no conocía muy bien el lugar pero estaba decidida a encontrarla. Se encontró con una puerta semi abierta, asomando cuidadosamente su rostro para volver a contener cualquier suspiro o gemido. Camila estaba secando lentamente su hombro mientras observaba el espejo de cuerpo entero. Meneó el rostro y tocó la puerta para capturar su atención. Ella se había sobresaltado con el ruido y peor, con la mirada asesina y casi enfadada de ella.

Lauren: Felicidades tienes trabajo, te veías muy bien. –Le dijo tajante y molesta- Sabes que tu salud es sumamente delicada, ¿cómo te expusiste al agua y vestida? ¿Y si te resfrías? Incluso aquello puede...

Camila: -sus palabras secas y tajantes le molestaron, haciendo de cuenta que no la había escuchado volteó para sostener la toalla, mas luego la interrumpió- ¿Matarme? ¿Es eso? Pensé que me dirías que estabas orgullosa de mí pero no con ese tono de voz que luce como si pensaras todo lo contrario. Créeme Lauren, sé que me voy a morir.  -Caminó hacia el espejo para peinarse el cabello mojado mientras la ojiverde se quedaba reflexionando consigo misma. ¿Qué era lo que le sucedía? ¿Qué la había afectado tanto para hablarle con molestia a Camila?