— ¿Qué? — dije algo sorprendida. ¿BlueBand? ¿Esos no eran los que nos había quitado la sala de actos?

— Sí, así podríamos tocar en el bar en el que tocan ellos— comentó Lina.

— ¿Qué?— volví a preguntar yo. ¿Bar?

— Azul, no me digas que no sabes quiénes son los BlueBand— intervino Sofía dando en el clavo.

— Pues no. Y tampoco sé en que bar tocan.

— ¿Pero en que mundo vives?— dijo Lina

— Sabes que el abuelo me mataría si alguna vez me viera escuchando ese tipo de música. Ademas nunca me habíais dicho que ibais a un bar a escucharlos— las acuse. Ellas me sonrieron angelicalmente para que no las matara. ¡Me habían dejado de lado!

— No te llevamos con nosotras para protegerte. Tu abuelo te mataría.— intento justificarse angelicalmente Lina. Mentira. Acaba de usar mi propio argumento en mi contra.

— Bueno pues los BlueBand tocan en Niko's y estudian aquí . — dijo Sofia.— Bueno no en nuestro departamento, ellos estudian música general.

— Vale, eso ya lo había supuesto. Pero me quieres decir como vamos a hacer para que acepten la propuesta.— Me quejé, no podía ser quisquillosa y no buscar alternativas. Si ellas decían que una presentación de esos chicos ayudaría, será que es así.

— Tendremos que ir a verlos tocar.

— ¿Qué? —pregunte incrédula.

— Vamos Azul, no te vas a morir por ir a ver como tocan y pedirles el favor de que nos ayuden.

— Moriré si el abuelo se entera— le conteste a Lina.

— Pero nadie a dicho que se fuera a enterar...

No se que es lo que estaba haciendo. ¿Como me había dejado arrastrar por este trío de locas? Iba a morir, esta claro. No os voy a negar que me daba mucha curiosidad conocer a esa banda...BlueBand. Quería saber que era eso que ellos podían transmitir como para que tanta gente los conociera, eran como celebridades.

Se suponía que este era el lugar; era un bar moderno bastante grande y tenia una muy bonita decoración, nada vulgar. Podía ver caras conocidas, no sabría decir sus nombres pero sí podría decir que los había visto, tal vez, por el campus.

— Oh, mira ya comienzan— dijo Lina señalado hacia un punto que quedaba en el centro del local, ahí había un pequeño escenario y en este cuatro chicos. En el fondo había un chico con la batería, sonreía ampliamente mientras guiñaba a alguna chicas; en un lateral había otro chico con el teclado que parecía concentrado ajustando algunos cables en el instrumento; al otro lado había un chico con un bajo, era bastante guapo al igual que los otros dos; y por último delante, en el centro había un chico ajustando su guitarra, estaba muy serio.

— ¿Son ellos?— pregunté, después de analizarlos.

— Sí — afirmó Sofía mirándolos embobada. ¿Esa era mi tímida Sofía?

— Buenas noches— oí de los altavoces. Mire al escenario, el que hablaba era el chico serio.

— ¡Oh! Ese es Cameron— me informó Angy.

Así que ese chico se llamaba Cameron, tenia un aura un poco extraña.

— ¿Preparados para la buena música?— chilló el chico de la batería, mire a este. Era totalmente diferente al que había hablado al principio.

— ¡Sí! — gritaron como respuesta las mil y una chicas que no podían parar de gritar. Parecían unas locas, no puedo entender que es lo que ganan con tanto grito. Quedarse afónicas y dejar a otros sordos; como a mí. ¿Era esto para tanto?

I don't even try, 'Don't know why they're like that

Just seeing me makes them go crazy

My look, my style, my swagger

Oh I don't do anything, just love myself the way I am

Just give a glance with a casual approach

"Hey girl! How're you doing?"

Comezo a cantar Cameron acompañado de su guitarra y los otros. Era una canción bastante movida, y la letra podía llegar a parecer graciosa. Se supone que el chico es el mejor de los mejor así que las chicas se ha enamorado de él porque según el chico es irresistible. ¡Que chico más engreído, el de la canción!

Girls girls girls they love me

What's with my body

Girls girls girls they love me

From birth until forever

Cantaron todos los presentes a unísono. Hasta mi trio de locas.

Realmente tocaban muy bien, podríamos conseguir mucho dinero. Mire a Cameron con más atención, parecía como si estuviese en otro mundo en el que nosotros. El público, no existía. No podía parar de mirarlo, su forma de tocar me había dejado conquistado. Se veía tan jodidamente bien, normal que las chicas griten por él.

No, Azul no pienses en eso.

Cuando acabaron el primero en bajar fue Cameron, no dijo nada. En toda la presentación no lo había visto sonreír ni una sola vez, era tan...raro.

A diferencia de Cameron los demás miembros de su banda se despedían con guiños y saludos.

— Es hora de preguntárselo —dijo Lina, sacándome de mis pensamientos.

Asentí, estaba algo nerviosa. Fui por donde había visto que Cameron se iba, pero no lo encontraba. ¿Dónde se había metido? Salí del bar, pensando que tal vez estaría fuera tomando el aire o relajándose. Entonces lo vi, estaba de espaldas a mí. Me acerqué poco a poco , los nervios me mataban era un chico muy raro, ¿y si me mandaba de paseo?Cuando estaba más cercar pude ver que estaba hablando con una chica, bueno la chica era la única que hablaba. La chica tenía la cabeza gacha, ninguno de los dos parecía haber notado mi presencia, me escondí y seguí mirándolos.

—Te he visto tocar des de hace mucho tiempo, te veo y siento que el corazón se me para. — Se callo un momento — ¿Quieres...quieres salir conmigo?— continuo la chica tímidamente, tenía una voz muy tierna.

— No — dijo el sin rodeos. Abrí los ojos sorprendida. ¿Como era capaz de rechazarla de esa manera?

La chica levanto la cabeza para mirarlo.

— ¿Por qué?— pregunto ella. Y era verdad, por qué le había dicho que no. Era un chica muy linda.

— No me interesan las chicas feas — espeto el cara dura de Cameron. ¿Como podía decirle eso después de que esa chica se le declarara? Yo le habría pegado. Y al parecer no era la única que haría eso, la chica que me había parecido tímida parecía tener carácter. Oí el estruendo agudo al chocar su mano con la mejilla del chico. Este no dijo nada solo se giro y entonces fue cuando me vio.

Mierda. Seguro que ahora va a pensar que les estuve espiando. Cambie mi peso de un pie al otro nerviosa, el chico me miro sin expresar ningún tipo de sentimiento. Bueno uno sí, indiferencia. Salí de mi escondite y le plante cara. No quería quedar como estúpida.

— Yo.. yo no..— intentaba decir que no los estaba espiando, a un que tal vez lo había echo, pero no conscientemente. Busque a la chica con la mirada, pero ella ya se había ido. Antes de que pudiese continuar hablando el chico me interrumpió .

— ¿Tu también vas a declararte?— preguntó de la manera más indiferente y fría. Lo mire con el ceño fruncido. ¿Pero este chico que se creía? ¿Pensaba que yo me iba a declarar? Este estaba muy mal de la cabeza. Todo el respeto que le había tenido por su manera de tocar y cantar se había esfumado completamente. A idiotas como él ni agua.

— ¿Que?— le espete indignada.

Cameron me miro de arriba a bajo, intentando intimidarme. No iba a perder contra él, pero antes de que yo pudiera mandarlo a freír espárragos el chico se movió a un lado y se fue. Así sin más, sin decir nada.

Cameron, definitivamente era un chico tremendamente raro y egocéntrico. Y ahora estaba en mi lista negra. 

Vas a enamorarte de miWhere stories live. Discover now