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Cuando me despierto son más de las nueve de la mañana. John ya se ha marchado a trabajar.Después de darme una ducha me tomó un café.

 Anoche Lily me llamó por teléfono para indicarme que me vistiera con un pantalón negro, ya que, la camiseta del uniforme del Black Sheep Lodge, también es negra. Tras echar un vistazo al reloj para asegurarme de que era la hora a la que nos habíamos citado, bajo a la calle. Lily ha estacionado su camioneta frente a la puerta del edificio y me espera en su el interior.

La hermana de John cubre sus ojos con unas gafas de sol oscuras. Está mascando chicle y ni siquiera se molesta en saludarme cuando me subo al vehículo. Se que no soy santo de su devoción.

Tras un breve trayecto llegamos al Black Sheep Lodge. Lily aparca la camioneta cerca del restaurante y me dedica unas palabras a modo de advertencia.

-Este es mi lugar de trabajo y necesito este empleo para dar de comer a mis hijos. ¡No me hagas quedar mal! - me advierte.

-No te preocupes. Me esforzaré al máximo- le aseguro.

-Mira, chica. No me gustas y pienso que mi hermano pierde el tiempo contigo. Te he conseguido este empleo así que trata de dejarme en buen lugar- me recalca.

Yo pongo los ojos en blanco antes de asentir con la cabeza. No se porqué Lily es tan dura conmigo y la verdad es qué no estoy acostumbrada a que me traten así. Cuento hasta diez para no perder los nervios con ella y acto seguido me bajo de la camioneta y sigo sus pasos.

Entramos en el restaurante. Está a punto de dar comienzo nuestro turno y el resto del personal llega apresuradamente.

El Black Sheep Lodge tiene una larga barra rodeada de taburetes altos. También unas grandes mesas de madera oscura con sus respectivas sillas. El local está equipado con suficientes pantallas de televisión cómo para que ninguno de sus clientes se pierda detalle de los acontecimientos deportivos. Unas mesas de billar y una diana completan la oferta lúdica del lugar. En el exterior, un patio hace las veces de terraza. En él hay multitud de mesas de picnic. En el establecimiento se ofrecen una gran variedad de hamburguesas, sándwiches y hot dogs, además de una amplia gama de cervezas.

Tras la barra, Frank Wilson, el propietario del Black Sheep Lodge, última los preparativos antes de abrir el restaurante. Lily se acerca a él con toda confianza y yo la sigo algo desubicada.

-Hola, Frank. Esta es Mia, la chica de la que te hablé...- me presenta Lily.

-Buenas días, señor Wilson. Encantada de conocerle- digo alargándole la mano con la intención de estrechar la suya.

Frank levanta una ceja después de lanzar una mirada furtiva a Lily. Parece algo sorprendido por mi manera de presentarme pero finalmente me da la mano decidido. Después se me queda mirando fijamente hasta el punto que me hace sentir incómoda.

-¿Y dices que esta preciosidad es la mujer de tu hermano?- le pregunta Frank a Lily.

-Así es cómo la presenta John...- añade Lily.

Escuchar su nombre hace que un escalofrío recorra todo mi cuerpo. ¡Le amo tanto!

-Pues pienso que John es muy afortunado...- asegura Frank.

-Gracias, señor- contesto por cortesía.

-Llámame Frank-  me indica con una sonrisa. A continuación me facilita una camiseta negra que lleva impreso el nombre del restaurante. También un mandil corto que de momento descarto utilizar.

Lily me sugiere que me recoja la melena y yo lo hago peinándome con una coleta alta. ¡Comienza mi primer día de trabajo en el restaurante!

Acompaño a Lily observándola mientras atiende a un par de clientes. Una vez asimilada la rutina de presentación, el modo en el que acostumbra a tomar notas y las rutinas a la hora de servir las mesas se me asignan una zona. Minutos más tarde el restaurante empieza a llenarse.

EL GUARDAESPALDASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora