Diecinueve

10.9K 640 78
                                    

Brad

Me desperté y Scarlett y su almohada no estaban a mi lado. Entraba claridad en la habitación y supe que estaba amaneciendo. Me incorporé un poco y miré por la habitación hasta encontrar a Scarlett tumbada frente al ventanal con la cabeza en su almohada.

Me levanté suspirando y me tendí detrás de ella. Puse mi codo en la almohada y empecé a acariciar su brazo.

- ¿No puedes dormir? - dije en voz baja.

- No - murmuró. - Y estoy muy cansada.

Besé su hombro - ¿Trajiste las pastillas?

- Se me olvidaron.

Había estado hablando con Taylor de que Scarlett no era la chica que se había mostrado por WhatsApp, era totalmente diferente y eso me tenía confundido. Había estado enamorado de la chica con la que hablaba a distancia, pero esta chica era muy diferente.

Taylor me dijo que esperára, y lo estaba haciendo.

Scarlett era totalmente distinta a Madison y eso chocaba en mi mente. Incluso era muy distinta a Stella, necesitaba a alguien menos reservada, más alegre y... no lo sabía, alguién con el que me sintiera cómodo.

- Lo siento - dijo. - No estoy acostumbrada a esto. A preocuparme por alguien como debería hacerlo contigo. Tampoco estoy acostumbrada a depender de otra persona, supongo que mi problema es que soy muy independiente y... no lo sé. Sé que algo va mal conmigo y estoy intentando de solucionarlo, solo... - suspiró y se puso boca arriba para mirarme.

Observé sus ojeras grises debajo de sus ojos, su mirada apagada, sus labios rosados y su rostro pálido.

- Intenta no presionarme. No soy perfecta.

- No espero que seas perfecta. Quiero que tengamos una relación... normal, supongo.

- Lo normal aburre, Brad.

Sonreí de lado y cogí un mechón de su pelo. - Quiero que te abras a mí, Scarlett. No puedo ayudarte si no se lo que piensas o estás siempre a la defensiva.

Ella fue a decir algo pero se calló. - ¿Qué ibas a decir?

- Nada - murmuró dandose la vuelta de nuevo.

- Dilo. - la animé.

- Quizás deberías buscarte a otra que no tenga tantos problemas mentales.

Me quedé callado y supe que tenía razón. Podría dejarla ir y empezar de nuevo. Pero no iba a quedarme con la curiosidad de saber lo que esa chica tenía que darme.

- No creo que eso sea una posibilidad.

Bueno, no estaba diciendo la verdad del todo. La Scarlett que había conocido no era esta y yo no sabía lo que sentía.

Scarlett se giró y no tardé en posar mis labios sobre los suyos en un beso lento. Mi brazo la rodeó mientras ella, sumisa, correspondía al beso y a mis movimientos.

Mi mano entró en su camiseta y no tardé en agarrar uno de sus pechos. No sabía si a ella le apetecía hacerlo, pero su cuerpo me correspondío acercandose a mí y decidí continuar.

Scarlett se dio la vuelta para quedar frente a mí y pude poner mi mano en su trasero para acercarla más a mí, poniendo su pierna encima de mi cintura.

Mi mano viajó por su cuerpo hasta ponerla en su pequeño rostro.

Dejamos de besarnos y abrí mis ojos para mirarla, nuestros labios a centímetros y sus ojos aún cerrados.

Volví a besarla, metiendo mi lengua en su boca y ella pasó sus manos por mi pecho desnudo.

Scarlett acabó encima de mí y pasé mis manos por sus piernas mientras seguíamos besandonos y ella movía sus caderas para rozarnos.

ADOPTA A UN TIO / NO CORREGIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora