ADOPTA A UN TIO / NO CORREGIDA

Doce

Seguí entrenando a Scarlett durante la semana haciendo que ni siquiera ella pudiera agacharse a coger algo de lo que le dolía el cuerpo. La veía sufrir cada vez que se montaba en el coche o hacía cualquier movimiento.

El sábado por la mañana la recogí y fuimos al hospital infantil. Ambos entramos y saludé al recepcionista al entrar. Fui al despacho a ponerme la bata blanca con mi nombre y Scarlett me esperó fuera. Después de sonreírme, fuimos donde estaban los niños. Hice mi rutina de visita, examinándolos y jugando con ellos, enseñándoles mis tatuajes y presentando a Scarlett.

Estaba enseñándole de nuevo mis tatuajes a Jesse cuando miré a Scarlett. Ella estaba haciéndole dos trenzas de raíz a Hannah. La madre estaba presente viendo como mi pequeña chica realizaba el peinado.

- De mayor quiero tener tantos tatuajes como tú - Jesse llamó mi atención.

- Bueno, no tantos - dijo su padre.

Sonreí y puse mi mano en su nuca. Me fijé en su cabeza, ya sin pelo debido a la quimioterapia. Tenía cáncer, todo le vino a raíz de un tumor cerebral que le detectamos.

- Cuando seas mayor podrás hacerte los que quieras - le susurré. Él me sonrió abiertamente.

- Ella es guapa - miró a Scarlett. - ¿Qué le pasó en su mejilla? - preguntó inocente.

- Alguien le hizo daño. - dije observando su sonrisa.

- Aun así sigue siendo guapa. - Le sonreí a Jesse y ambos miramos a las chicas.

- Me lo he pasado muy bien - dijo saliendo del hospital. - Aunque es muy triste que estén pasando por eso.

- Demasiado.

- ¿Y puedo saber por qué no te has comprado ya una casa con piscina?

Reí. - No quiero precipitarme. Además, ¿Qué haría en una casa yo solo?

- Me tendrías allí en verano para bañarme en tu piscina y tomar el sol.

Me gustaría tenerla en todas las estaciones, no solo en verano. La verdad es que no quería comprar nada hasta encontrar a alguien.

- ¿Cómo te van los exámenes? - le pregunté.

- Bien - se encogió de hombros. - Algunos mejores que otros.

- Al final estás teniendo tiempo para todo.

- Sí, solo tenía que organizarme. Stella ha encontrado trabajo en una agencia de viajes y va a dejar la cafetería.

- Ya era hora. Estaba desesperada porque no encontraba trabajo de lo que había estudiado.

Ella se calló y llegamos al coche. - ¿Cómo va tu relación con Madison?

- Nos ignoramos - se encogió de hombros. - Y yo no paso mucho tiempo por casa. ¿Quieres una cerveza?

- ¿Vas a invitarme? - sonreí abriendo el coche.

- Sí, pero no te acostumbres. - me sonrió.

Bebí de mi cerveza mientras la observaba beber de la suya.

- Así que... te gustaría organizar fiestas en Miami.

Scarlett asintió - Es donde más se mueve el dinero en ese tema, y en Los Ángeles.

- ¿No tendrías reparo en irte?

Ella me miró - No siento que pertenezca a ningún sitio, Brad. Cuando consiga sacarme el máster, iré donde el trabajo me lleve, y ahí es donde estará mi vida.

- Lo tienes todo muy pensado.

- Es lo que quiero hacer por ahora. Nadie va a regalarme nada, y no me importa sacrificarme si después la recompensa es buena.