Because I love You

"Mi mujer"

Yo sí puedo resistir, ¿él?, no lo sé, pero de algo si estoy segura y es que va de mal en peor, sus contusiones ya tienen tonalidades negras, parece como si su piel se estuviera pudriendo, suda mientras duerme a la vez que se encuentra tiritando entre mis brazos, yo ya viví esto y me salvé por la ayuda de Mildred, ahora ella no está para poder ayudarme con Dylan.

El agua ya no es suficiente y la comida no llega hace un par de días, el pan que he estado guardando es incomible, tan duro que podríamos quedar sin dientes al intentar comerlo.

Cuatro días llevamos aquí y en cada uno de ellos he temido a que sea el último.

Un ruido ensordecedor despierta a Dylan y me alarma.

-Están aquí- Digo en inercia respondiendo a una pregunta que jamás fue formulada.

-Quienes- Dylan me acorrala entre sus brazos para unirnos más, sé que eso no nos protegerá- ¿Quiénes?- Vuelve a decir un poco más fuerte cerca de mi oreja.

-Ellos- Apuntó con mi dedo hacia la puerta, ahí estaban ellos, mi peor pesadilla.

Lágrimas se desbordaban de mis ojos. Yo ya sabía por que estaban aquí.
Dylan se puso de pie, entrelace nuestras manos, pero, él no, él la soltó, lo miré preocupada. Ira veía en su ojos, su rostro totalmente desfigurado por odio, y es que lo estaba transmitiendo. Tomé su mano para acercarla a mi boca, deposité un beso corto. Por una fracción de segundo esa tosquedad en su rostro desapareció, pero fue solo un momento.

-Dave- Gritó , su voz no era la misma.

-¡Pequeño Dylan!- Soltó con ironía el hombre de grandes brazos que me ha torturado desde que estoy aquí.

-¡MALDITO HIJO DE PUTA!- Me asuste, mi espalda toco la fría muralla ,fue totalmente irreconocible, su voz calo mis oídos llegando hasta mis entrañas.

-Jajajaja- Tosió - Hola Dylan, ¿me haz extrañado?- Dylan iba a responder pero lo callo- Shhh, mejor preguntémosle a mi preciosa... ¿SELENA MI AMOR ME HAZ EXTRAÑ..- No pudo terminar, porque rápidamente Dylan ya se encontraba sobre el golpeándolo, de la nada el tal Dave saca una especie de bastón con el cual le propinó electricidad a Dylan haciendo que este comenzará a convulsionar en el suelo.

-DYLAN- Al momento de reaccionar ya me encontraba arrastrando a Dylan hacia mi.

-DÉJALO EN PAZ- Grité entre sollozos.
Deja de llorar maldita sea, no quiero llorar por todo, no quiero temerle a los truenos, no quiero temer más.

-A Sii, ¿quieres que lo deje en paz?-

-SI- Me sorprendí al notar que mi voz salió firme, que no temblé al decirlo, pude notar por su expresión que también se sorprendió.

-Muy bien- Se acercó a mí- Entonces terminemos lo que he venido hacer aquí hace semanas. Maldita escoria- Lo último me lo susurro cerca de mis labios.

Escupí con algo de repudio el piso, cerca de sus pies.

-¿Qué cosa? -Pude oír decir a Dylan. Me volteé exaltada, pensé que él estaría inconsciente y no estaría presente.

-Dy'l yo- Dave no me dejó terminar pues él le contó.

-La hare mía, Dylan, eres muy poca cosa para ella, yo en cambio si soy suficiente- El intento ponerse de pie pero fue en vano, su cuerpo no respondía. Me reprimí a llorar - Y gracias a que estas despierto, te podré enseñar cómo se hace gritar a una mujer.

Pude notar que Dylan intentaba con todas sus fuerzas ponerse en pie, pero sus intentos no eran más que eso.
Nuevamente sus grandes manos recorrían mi cuerpo, cerré los ojos en un intento fallido de imaginar a Dylan.Me tomó de los muslos para ponerme sobre una mesa la cual había traído el mudo, así lo llamaba debido a que nunca hablaba, solo obedecía a Dave. Jamás pensé que conocería su nombre.